Así que si ya estáis cansados de playa, quiero que sepáis que hay otros lugares diferentes para pasar las vacaciones. Unas vacaciones mucho más relajantes, en pleno contacto con la naturaleza.
El Pirineo Aragonés son una fuente de vitalidad, un paraíso inigualable situado al norte de la Península Ibérica, entre España y Francia. Los principales valles del Pirineo Aragonés son: El Valle de Benasque, el Valle del Aragón, el Valle de Tena, el Valle de Gistau, el Valle de Hecho, el Valle de Broto, el Valle de Ansó, el Valle de Vió y el Valle de Bielsa.
El Pirineo ofrece muchas posibilidades, desde paseos por bosques misteriosos como el de las Bosque de las Hayas de Candanchú, paseos a cientos de ibones: Ibón de Acherito, Ibón de Orná o Cravelas, Ibón de Sabocos, Ibón de Asnos, Ibón de Bernatuara, Ibón de Anayet, Ibón de Escalar, Ibón de Estanés, Ibón de Gistaín, Ibón de Bernatuara entre otros… Hasta llegar al techo del Pirineo: Al Pico del Aneto, con sus 3404m. Quizás el pico más popular de esta zona, que no quiere decir que sea el más difícil, pero si uno de los más concurridos por su altitud.Muchos son los tresmiles del Pirineo para poder disfrutar de la alta montaña: Picos de los Infiernos (3.083m.), Pico Aragualas (3046m.), Gran Facha (3005m.), Garmo Negro (3051m.) entre otros…
Encontrarnos con animales por el monte es muy común en el Pirineo, los rebecos son los más fáciles de ver en media montaña, zorros, jabalís incluso los más afortunados pueden llegar a ver osos!!. Sin olvidarnos los afortunados a la flora, que también tienen un obligado paso por el Pirineo. Ya que cuenta con una gran variedad de plantas y árboles.
Pero si por algo os recomiendo el Pirineo aragonñes para pasar unas vacaciones inolvidables es por sus paisajes, gastronomía junto con sus gentes, lo hace un lugar obligado de visitar.
Así, si lo que buscas es estar en contacto con la naturaleza, tranquilidad y pasar unas vacaciones sin estrés, este es el destino que estabas buscando.