El penúltimo día de la temporada de esquí en Grandvalira tuve la suerte de pasar un buen rato con Joan Verdú, el campeón andorrano de esquí. Un joven atleta que se está abriendo un hueco entre los grandes del esquí mundial, a sus 20 años ocupa el puesto 76 del mundo en Gigante y el 77 en Súper Gigante. Además fue olímpico en Sochi en 2014.
Pues como os digo, el penúltimo día de la temporada en Grandvalira fue un excelente día de esquí. Empezamos la mañana con nieve recién caída, disfrutamos de unas pistas con una nieve excelente y terminé pisteando con los boreas como si no fuera a haber un día más, y es que, realmente, solo quedaba un día más. Digamos que esquié mientras pude, porque sobre las 4 de la tarde estaba ya con las piernas destrozadas, había empezado a las 9 con los Amplid gorditos y el cuerpo ya no daba para más. ¡Cómo lo echo de menos ahora! Os dejo un enlace de lo que fue aquel día.
Casi se me pasa la hora de comer, y eso había quedado con Javi Moya en L’Abarset, que todos conocéis por su magnífico “après-ski”. Además de ser un sitio obligado para tomar algo después de esquiar, también se come muy bien en L’Abarset, me ha tocado un par de veces esta temporada y vale la pena.
Pues allí estaba Javi, en su calidad de distribuidor de la marca Sweet Protection con su amigo y patrocinado Joan Verdú junto a Amelia, con la que habíamos pasado también un buen rato de esquí.
Joan es un joven con un físico bastante impresionante, muy moreno, la cara y la voz le dan cierta madurez a un chico tan joven, los ojos lo revelan como un poco tímido e inquieto. Me llaman la atención sus brazos, hay mucho trabajo ahí. En seguida pasamos a hablar de esquí, me han dejado pedir (estoy fuera de hora de comidas) y me han traído un refresco sin el cual podría desfallecer. ¿Cómo puedo aguantar esquiando tanto tiempo sin apenas pausa? No tengo un físico espectacular, como tiene Joan, no tengo una técnica depurada, no sigo un plan de entrenamiento y, sobre todo, no tengo sus 20 años, pero hay algo que sí tenemos en común, y es la pasión a la hora de esquiar. Y eso se nota en cuanto nos ponemos a hablar, este chico es un loco del esquí, va pasando el rato, va viniendo gente, se va llenando el local y seguimos hablando de esquí. Todo el ruido que se va generando, las risas y las conversaciones que surgen alrededor se oyen débiles y me centro en la conversación con Joan, la expresividad de sus ojos, ya no está tan tímido, el juego de sus manos, debe ser un chico muy inquieto, su voz grave en la que me centro para poder escucharla por encima del buen ambiente reinante.
Enseguida me he comido una buenísima hamburguesa y nos cambiamos de mesa para tomar un café. Algunos están ya de copas, es la última noche para l’Abarset y hay que celebrarlo. Joan y yo hemos declinado la oferta y seguimos a lo nuestro, hemos decidido que de esta conversación saldrá una entrevista, creo que vale la pena que os cuente algunas cosas de este joven deportista, un campeón con presente y, sobre todo, un campeón con futuro.
- Álvaro. Joan, tú seguro que recibes muy buen material, ¿cuánto te dan?
-Joan. Me dan aproximadamente entre 15 y 20 pares al año. El proceso de selección lo hacemos en verano, en glaciares, o en Argentina. Me dejan probar 3 ó 4 modelos distintos, y a partir de aquí, elijo el modelo que me va mejor, el que más me gusta. Entonces me dan varios pares de ese mismo modelo. Habitualmente uso 4 pares para Súper Gigante, 4 pares para Gigante, 4 para Eslalon y 4 para Descenso.
-Álvaro. ¿Y botas?
-Joan. Elijo tres pares de botas. Las más blandas para velocidad (Descenso y Súper Gigante) con una dureza de 150. -Blanditas, pienso para mis adentros-. Para Gigante dureza media (160) y para Eslalon las más duras, de 170. -Madre mía, vuelvo a pensar-. Recuerdo haber visto publicado que Joan había participado en los JJOO de Sochi en 2014, igual sí que necesita buen material, pienso para mí.
-A. ¿Cuáles son tus patrocinadores actuales?.
-J. Actualmente me patrocina HEAD (material duro), Sweet Protection (cascos), Neon (gafas), Credit Andorra, Grandvalira, Archled y Caldea-Inuu.
-A. ¿Cuál fue el primer patrocinador que confió en ti?
-J. El primer patrocinador que confió en mí fue HEAD, y por ello estoy muy agradecido y contento del trato que tenemos y del material que me dan. En la actualidad tengo también a los demás y aprecio mucho su ayuda, el mundo del esquí no es nada fácil y valoro el esfuerzo que hacen apostando por mí.
Durante un rato hablamos de la vida personal de Joan, de cómo le ayudan sus padres, de cómo confían en él, y lo orgulloso que está de ellos. De cómo son sus estudios, del tiempo que dedica a los entrenamientos, de todos los sacrificios que hace pese a su juventud, del no salir con los amigos, de no tener noches de fiesta... Joan me parece un joven sensacional, un ejemplo para los chicos de su edad, para los más jóvenes y también para los que ya no tenemos 20 años. Hay mucho sacrificio detrás de "un tipo que esquía bien" para dar el paso a enfrentarse a carreras de Copa del Mundo.
Joan estudia ADE, Administración y Gestión de Empresas en la Universidad de Andorra con un programa adaptado para sus competiciones. Eso quiere decir que después de esquiar y entrenar, además, tiene que estudiar y también obtiene unos resultados.
Volviendo a las carreras, aunque a mí lo que realmente me interesa es el lado fuera de la competición, me está cayendo muy bien este chico y me interesa mucho más su vida y sus proyectos que simplemente sus carreras. Pues voviendo a las carreras hablamos de que la temporada que viene correrá algunas pruebas de Copa del Mundo, de momento parece segura su participación en Solden en octubre y en St. Moritz. También a mediados de noviembre estará entrenando en Canadá y aprovechará para hacer alguna carrera de Copa del Mundo. Después de Navidad hará alguna carrera en Europa.
Hablamos un rato de su carrera preferida, el descenso de Kitzbuhel, con toda humildad me contó cómo todavía no estaba preparado técnica, psicológica ni físicamente para una competición semejante. Pero, con determinación me dijo que esperaba correrla en dos temporadas siempre que vaya todo bien, que los entrenadores y él lo vean factible y conveniente. Me gustó mucho este rato de la charla, porque te das cuenta de que es un chico que sabe dónde está y dónde quiere llegar, pienso que es realista a la vez que humilde, pero tiene un espíritu competitivo que le lleva a decidir que pronto estará preparado. Yo quiero verlo, sé que lo estará.
Había leído que hace poco hubo cambios importantes en la Federación Andorrana y que se habían otenido frutos, mucha parte de los éxitos se los atribuye a Matthew Dickens, entrenador físico que, según Joan, ha aportado mucho al equipo nacional andorrano. Lo cierto es que Joan había sufrido lesiones en anteriores temporadas y en esta última no ha tenido ninguna importante. Como sabéis, el aspecto físico es fundamental en la competición de alto nivel.
Joan ahora mismo se encuentra en Austria, por lo visto esquiando con bastante buenas condiciones. Dentro de poco comenzará su carga física más importante, y en el mes de julio se van a Argentina a hacer pretemporada. Después vuelven a casa unas tres semanas y en octubre se van una semana a los Alpes (seguramente a Tignes), a mediados de noviembre a Canadá... Mientras me va contando todo esto pienso en si daré la edad y el nivel para apuntarme al equipo nacional... pero me temo que he pasado la edad, el nivel lo puedo conseguir con algunas clasecillas particulares, creo...
Siempre que entrevisto a alguien que "sabe esquiar" le pido un consejo para mis lectores, en su mayoría, como yo, esquiadores turistas pero que están empeñados en mejorar su esquí. "Los brazos siempre delante" me dice Joan, sea cual sea el nivel de esquí, los brazos siempre para delante. Para un turista, para un buen esquiador, un "freerider", para un competidor de la Copa del Mundo, si no llevas los brazos por delante te estás generando dificultades.
Además, siempre antes de esquiar calentar bien las rodillas. Fundamental.
Me recomienda coger, como ejercicio esquiando, los palos de esquiar en horizonal y por los extremos, con los brazos estirados, para forzar que los brazos estén bien por delante y así todo el cuerpo irá para delante. Siempre hacia delante. Y ahora, que estoy aquí sentado delante del ordenador, pienso en lo que tardaré en volver a esquiar y poder llevar a cabo sus consejos para poder esquiar mejor. Seguro que no mejoro suficiente como para ir a Copa del Mundo, pero pienso practicarlo y seguir mejorando mi esquí.
¡¡¡Ayyy!!! ¡Cómo echo de menos esquiar estos días!
Como ya se nos ha acabado la temporada no me ha dado tiempo a esquiar con Joan, pero seguro que el año que viene lo hacemos algún día. Le diré que vaya un poco despacio a ver si puedo seguirle y, si me da algún buen consejo, os lo cuento en este mismo blog.
En fin amigos, aquí os he contado un buen rato que eché con un campeón. Sé que llegarán muchos más éxitos deportivos a Joan, y desde luego los voy a celebrar, pero yo creo que lo mejor de este chico son sus ganas de mejorar, de aprender, su humildad y su determinación. Es muy competitivo y trabaja para mejorarse como atleta. Yo, desde aquí, le animo a que siga trabajándose como esquiador, pero que siga así como persona, me ha parecido un chico sensacional y un ejemplo para todos. Dentro y fuera del esquí.
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