Sí, así es. Ha nevado en la Serranía de Cuenca y más de lo que uno se podría imaginar. Estos días, noticias y modelos de previsión se centraban en el norte del país (C. Cantábrica y Pirineos) como las zonas de mayor incidencia de la nieve en sus montañas. El tiempo está siendo muy agraciado en este aspecto y muchas de las estaciones de esquí del norte peninsular están en vísperas de apertura, e incluso, la siempre prematura Masella, dando el pistoletazo de salida hace unos días, y no es para menos. Espesores que superan los 50cm en cotas bajas y más de 1m en algunas zonas del Pirineo Occidental en cotas altas. Después de dar un resumen escueto de la situación en el país, me gustaría mostrar lo que me he encontrado esta misma mañana. En el Sistema Ibérico también ha nevado y de forma más que notable (Valdezcaray, Punto de nieve Santa Inés y en menor medida Javalambre y Valdelinares). Los
modelos de previsiones como meteoexploration.com, meteoblue, o snowforescast.com para esta región conquense rondaban los 5-10cm en el mejor de los casos. Se desconoce por completo esta región montañosa pero la realidad es que es una fuente inagotable de nieve y con grandes espesores (En numerosas ocasiones, por encima de lo que puede nevar en sierras como la de Javalambre o Gúdar, "vecinas" de la Serranía de Cuenca. Conociendo esta ventaja, desempolvé todo el kit de nieve y me dispuse a subir con el entusiasmo de lo que podía encontrar. La carretera se encontraba en un estado más que aceptable, dónde la nieve hace acto de presencia ya en cota bajas.
Una vez llegado a la pista forestal que da acceso a la montaña, me dispongo a preparar todo el equipo. A 1600m encontramos un espesor muy por encima de los estipulado en las previsiones.
La estampa era un regalo para la vista y tuve el lujo de ser el primero que pisaba la zona. Solo quedaba subir un poco más. Unos 30cm se acumularon, superando con creces lo pronosticado. En zonas próximas a la cumbre ascendería a los 40cm aprox.
La icónica vieja pista de esquí, en todo su esplendor, como en el pasado donde miles de esquiadores conquenses aprendieron a esquiar en la Mogorrita.
Solo quedaba disfrutar. Y así fue. Un día para recordar.