La reacción que produce leer este titular en la comunidad conquense y zonas próximas de otras provincias es muy dispar. Para las personas que más cerca estuvieron de esta iniciativa les abordará un sentimiento nostálgico. Otro grupo de personas les servirá de alimento de un viejo recuerdo o noticia que se divulgaba entre la gente y por el contrario, otro grupo mucho más numeroso que es consciente por primera vez de esta propuesta que se intentó llevar a cabo a finales de los años 80.
En este primer reportaje haremos énfasis en los inicios del esquí en la provincia conquense, la posterior creación del club de esquí y un resumen de las características orográficas y meteorológicas de la Mogorrita. En posteriores reportajes, siguiendo este hilo, procederemos a explicar todo lo acontecido en este proyecto que se alargó en el tiempo durante años.
Esquí en Cuenca. Los inicios.
Sí. Así es, En Cuenca a principios de los años 60 la práctica del esquí apareció como un deporte moderno, de difícil acceso condicionado por la orografía y la meteorología además de estar "reservado" a las familias más pudientes de esa época.
Los inicios en este deporte siempre fueron duros, empezando por un equipamiento y unos accesorios muy rudimentarios. Simples tablas de manera enceradas con una fijaciones que difieren mucho de los sistemas de sujeción actuales. De manera similar ocurría con la vestimenta. Como expresa Daniel León, esquiador de aquella época, "nuestra vestimenta se basada en botas de cuero, preferiblemente, de caña alta, unos vaqueros, chaqueta de lana y un simple chubasquero adquirido en la fábrica de Mohorte".
A mediados de los años 60’, un pequeño grupo de esquiadores conquenses aprovechaban una de las laderas bajas del cerro de San Felipe (1836 m) para disfrutar de por aquel entonces, un deporte nuevo en la provincia. Las opciones que brindaba este paraje era muy limitado y la durabilidad de la nieve era corta. Hay que avanzar hasta principios de los años 70', cuando observan que unos pocos Kms al sur un cerro desconocido hasta entonces, concentra más cantidad de nieve y durante más tiempo. Hablamos del pico de la Mogorrita. Aprovechando un claro en la ladera E. de la montaña, los primeros intrépidos se embarcaban en los iniciales descensos debiendo hacer frente a las inclemencias del tiempo y a unas carreteras de montaña en unas condiciones muy precarias.
Debido a la gran extensión de terreno de la Serranía de Cuenca y su altitud, hacía de los trayectos una lucha constante contra la nieve y el hielo hasta los pies de la montaña en días de expedición. Daniel León recuerda que "los viajes desde Cuenca capital podrían prologarse horas, cuando los espesores de nieve eran considerables a partir del desvío antes de llegar a Tragacete…algunas veces el autobús se quedaba sin posibilidad de subir por la nieve a 5-6km del refugio" Entonces el vehículo de apoyo pasaba a ser el viejo Land Rover del ICONA: "Daba varios viajes de ida y vuelta hasta que todo la expedición lograba subir" relata Daniel León entre risas. En las proximidades del Pico de la Mogorrita se encontraba un refugio propiedad para esa época del ICONA, justo en las inmediaciones de la carretera y el camino forestal que daba paso a la ladera Este de la montaña, y que servía de resguardo y descanso a los esquiadores. Sus instalaciones favorecían la estancia y el disfrute de meriendas y comidas familiares. Tenía capacidad para 100 personas y estaba provisto de cocina, servicios, barbacoas y energía eléctrica.
Sin ningún sistema de remonte y pisado de la nieve, los propios esquiadores prensaban la nieve con sus esquís para luego disfrutar del descenso. El esfuerzo era grande y esto hacía que el día de esquí no se alargara más de 2-3 horas. La inclinación, sobre todo en la parte alta de la pista, y los espesores en algunos casos de 2m dificultaba la práctica, según cuenta Daniel León. Destacar que la ladera E. se extiende desde la zona baja de la cima rocosa de la Mogorrita hasta el pie de ella. Más adelante detallaremos sus características.
Club de Esquí "Montes Universales". Formalización del esquí conquense.
A principios de los años 70' la práctica del esquí pasó a ser más asidua. Javier de León, miembro de ese grupo inicial de esquiadores, decide ser el portavoz y creador de un club de esquí en Cuenca convirtiéndose así en el primero de la provincia. Tras las formalidades en 1972, el ayuntamiento de Cuenca cede al club en modo de usufructo, el refugio forestal propiedad anterior del ICONA y el paraje de la Mogorrita con su titular, el Ayuntamiento de Cuenca, para la práctica deportiva. Este paso fue clave para la mejora y ampliación del complejo y la pista. El club era abierto a todo aquel que quisiera disfrutar del esquí. Su cuota de socio eran de 300, 1000 y 3000 pesetas según la edad y el número de socios rozaba los 400 esquiadores.
Su finalidad era promocionar estas instalaciones de esquí, no solo como proyecto deportivo sino también como proyecto turístico de fuerte incidencia económica en la sierra conquense. Se trabajó en la pista para la limpieza y acomodamiento además de instalar dos pequeños telesquís muy austeros movido por un viejo motor de un Seat 1500 y unas llantas de camión donde discurría el cableado que te subía hasta la zona alta de la ladera. Como relata Daniel León "La instalación de los remontes era muy básica pero efectiva. Solo en días de mucho frío, el motor se resistía a arrancar aunque siempre le hacíamos funcionar". Lo que anteriormente fue un claro en la ladera de la montaña, con las mejoras del terreno se convirtió en una pista de 500 m de longitud, 50 m de ancho y un desnivel de 120 m.
No olvidemos que esta región del nordeste de la provincia es una de las más deprimidas y envejecidas de España en la actualidad. En los años 70' los municipios de la Serranía Alta no superaban (ni superan en la actualidad) los 500 habitantes y su economía se sustenta principalmente de la ganadería y en el pasado, además, de la industria maderera. Su nivel de despoblación es realmente alto, el que más de toda la región de la provincia. Por tanto, hablamos de una comarca solitaria, con un futuro poco esperanzador y que un proyecto de este calibre habría sido vital para su economía y su conocimiento al resto de la provincia y zona próxima del extenso y valioso paraje de la Serranía Conquense.
Entre la creación del club en 1972 hasta 1987 no se hace ninguna mejora de gran calibre en las instalaciones. Durante ese periodo de tiempo era usual ver, según avanzaban los años, más esquiadores por la Mogorrita. El conocimiento de que existía un parque de nieve en Cuenca se extendió por la zona llamando la atención no solo a conquenses sino a turolenses, alcarreños y valencianos.
No olvidemos que para aquella época solo existía la reciente estación de Esquí de Valdelinares, creada unos años antes, como la única del sur del Sistema Ibérico. La estación de Esquí de Javalambre no existía como tal hasta su creación en 1996 pero si que se encontraba equipado con dos remontes desde 1972. Por tanto, sería un excelente complemento para la demanda del esquí debido a su cercanía. (68km con Javalambre, 95km con Valdelinares).
Posteriormente a 1987, el deseo de creación, mejora y ampliación de la estación de esquí en la Mogorrita fue ganando peso y protagonismo. Los periódicos locales de la época se hacían eco de las posibilidades y las necesidades existentes.
La Mogorrita. El techo de Cuenca.
En el corazón de la Serranía alta de Cuenca, limitando con los Montes Universales (cadena montañosa limítrofe entre las provincias de Teruel y Cuenca) dentro del Sistema Ibérico encontramos el pico o cerro de la Mogorrita. Con sus 1864 m de altitud se convierte en el punto de mayor altitud de la provincia. Su situación dentro de los límites de la Serranía de Cuenca hace que pertenezca al municipio del mismo nombre. El acceso por carretera más cercano es la CU-9161 que une el Nordeste de la provincia conquense (Tragacete) con el sureste de la provincia turolense (Albarracín). La región montañosa se encuentra enclavada en uno de los pinares silvestres más extensos del país. Su riqueza maderera a comienzos del S.XX hasta los años 50' era conocida, no solo en España, sino fuera de ella exportando a diferentes países de Europa por su excelente calidad. Como dato, la provincia conquense es la segunda provincia europea con mayor extensión de bosque.
Su localización geográfica y altitud hace que nos encontremos en un lugar con unas condiciones especiales de temperatura y pluviometría a lo largo del todo año. De manera oficial, encontramos una zona delimitada muy próxima a la montaña entre los municipios de Teruel, Calamocha (provincia de Teruel) y Molina de Aragón (provincia de Guadalajara) conocida como el triangulo del hielo donde sus registros de temperatura con grado negativo ha batido record en este país desde que se tiene constancia de datos oficiales. (En Calamocha, por ejemplo, según la estación de AEMET se llegaron a los -30ºC el 17 de diciembre de 1963). Por tanto, hablamos de la región habitable de España más extrema en este sentido. Sin embargo, existen municipios conquenses cercanos a esta zona que podrían formar parte de este grupo "selecto" del frío. Por ello, ciertos grupos medioambientales con estudios actuales amplían este triangulo a las localidades de Molina de Aragón-Calamocha-Cantalojas-Zafrilla, este último encontrándose en la provincia de Cuenca. A modo de ejemplo, las localidades de Zafrilla y Vega del Codorno en la provincia conquense, con una altitud similar que superan los 1400 m. y muy proximas a la Mogorrita, registró en el año 2015 la temperatura anual más baja del país llegando a los -19,2ºC. Por tanto, podemos ubicar al pico de la Mogorrita en la región más inhóspita y fría de la España habitable.
En cuanto a la pluviometría, nos encontramos en la región de la comunidad autónoma con mayor precipitación. En los años 80, los estudios recabados por el club de esquí conquense defendió su propuesta de construcción con un escrito donde explicaba que "las condiciones que posee la Mogorrita son semejantes a otras estaciones invernales" idea que el geógrafo Izquierdo Croselles apoyó apuntando lo proclive que era el borde oriental de la Meseta sur para recibir grandes nevadas como consecuencia del encuentro entre vientos húmedos mediterráneos con las masas frías del interior continental con precipitaciones sobre los 900 milímetros anuales y una humedad relativamente alta para la ubicación geográfica en la que se encuentra.
En definitiva, cumple con los requisitos mínimos "exigidos" de pluviometría, humedad y altitud. Es cierto que este último puedan crear cierta duda ya que nos encontramos con una cota que no supera los 2000 m, referencia generalizada y actual que se utiliza para determinar la viabilidad de una estación de esquí. Aunque esa falta de altitud la contrarresta con unas temperaturas realmente bajas en invierno a diferencia de otras actuales estaciones de esquí (con misma latitud) que buscan cotas más altas para compensar la temperatura ligeramente más elevada (véase en estaciones de esquí actuales como la de Navacerrada o la Pinilla en el Sistema Central, con 2177 m y 2200 m respectivamente).
Por último, reseñar que el conocimiento de esta montaña es relativamente moderno. Hasta los años 80' se catalogó al cerro de San Felipe (1836 m) como cota más alta de la provincia, sin tener constancia que unos pocos kilómetros al sur se encontraba un pequeño cerro de mayor altitud. Hubo que esperar al reacondicionamiento de la carretera que unía Cuenca con Teruel para que el conocimiento de esta montaña se extendiera por la comunidad conquense.
Rodeado por multitud de cumbres que oscilan entre los 1700 m hasta los 1800 m, hace que su altitud (1864 m) no destaque sobre su entorno montañoso y no sea visible hasta cierta cercanía a él. En su paisaje se observa la predominancia de la roca caliza donde la intensa erosión kárstica produce una homogeneidad en sus cumples en forma y altitud. Debido a este suceso, es llamativo como una basta extensión de montaña (74.000 hectáreas) como es la Serranía de Cuenca, no tenga una cumbre que no supere los 2000 m. En su cima rocosa se encuentra un vértice geodésico con la medición exacta de 1864,485m.
Las vistas desde su cumbre son realmente espectaculares pudiendo observar a su alrededor diferentes cumbres cercanas, la Sierra de Javalambre y su estación de esquí, la vecina Sierra de Albarracín, los Montes Universales con el Caimodorro (1936 m), perteneciente a la provincia de Guadalajara, como el más alto observador de su entorno y en días claros, el Peñarroya (2028m) en la Sierra de Gúdar.
Y por supuesto, toda la Serranía de Cuenca...
Este artículo tendrá continuidad con una segunda parte donde se centrará de lleno en el proyecto de la estación de esquí. Pincha aquí.
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Artículo escrito por David Algarra (Skyline de la Serrania)
Fotos: David Algarra (Mogorrita), Javier de Leon (fotos años 80'), Google Earth, ign.es (mapa de precipitación anual actual)