Siempre me ha sorprendido un poco como la mayoría de personas se transforman en ‘weekend warriors’ del esquí durante 5 meses al año y una vez acaba la temporada de esquí no vuelven a hacer deporte hasta que llegan, de nuevo, las primeras nieves.
Desde mi punto de vista debemos empezar a entender que el esquí es un deporte físicamente muy exigente y que una adecuada preparación física nos ayudará a ser mejores esquiadores y. sobretodo, a minimizar el riesgo de sufrir lesiones.
En próximos artículos trataremos diversos temas relacionados con la preparación física de un esquiador pero hoy, para arrancar motores, voy a proponeros 5 razones para empezar esta misma semana la preparación física de cara a la temporada 2014-15.
1- Si queremos llegar a la temporada en óptimas condiciones no podemos empezar a entrenar en octubre.
Un plan de preparación física más o menos completo requiere de varios meses para llegar al estado físico necesario para optimizar la práctica deportiva. En el caso de alguien que parta de cero (o de una condición física muy baja), deberíamos empezar por unas semanas de preparación básica (acondicionamiento), seguidas de varias semanas de preparación general y, por último, llegaríamos al periodo de preparación específica. Si suponemos unas 8 semanas para cada uno de los 3 periodos, empezando ahora estaríamos a punto a principio de noviembre.
2- Ahora podemos aprovechar que nuestras piernas aún estarán fuertes gracias al trabajo realizado durante la temporada de esquí.
Aunque no seamos personas que realizan deporte de manera habitual, si hemos estado esquiando cada fin de semana durante la temporada de esquí seguramente en este momento nuestras piernas estarán más fuertes de lo que estaban en noviembre y nuestro cuerpo está ahora en mejor condición física de lo que estará después de varios meses de inactividad. Si empezamos ahora nuestra preparación partiremos de un punto un poco más avanzado y no nos será tan duro.
3- Con la llegada del buen tiempo es más agradable entrenar al aire libre.
¡Entrenamiento físico no quiere decir cerrarse en el gimnasio! Se trata de realizar deporte de manera habitual, planificada y con un objetivo claro, pero no tiene porque tratarse de levantar pesas. Podemos idear un plan de trabajo que incluya varios días de trabajo al aire libre, ya sea corriendo, patinando, saliendo en bici o realizando otras actividades deportivas, y solamente complementarlo con el trabajo puntual en gimnasio (sobretodo durante los periodos de acondicionamiento y preparación general).
4- Un correcto plan de entrenamiento físico durante el verano nos hará mejores esquiadores en invierno.
Muchos esquiadores no se dan cuenta de la importancia de nuestra condición física al esquiar hasta que un día empiezan a entrenar y a prepararse físicamente. La realidad es que estar fuertes y ágiles nos ayudará enormemente a ser mejores esquiadores y a disfrutar más del esquí. Podremos esquiar mejor y durante más rato sin cansarnos tanto.
5- Estar en forma es un elemento crucial si queremos minimizar el riesgo de lesiones.
Última pero no menos importante, una correcta condición física ayudará a que nuestras piernas estén más fuertes, elásticas y ágiles y por tanto, sea más difícil que suframos lesiones musculares o en las rodillas.
De modo que ya lo sabéis, no dejéis para mañana lo que podáis hacer hoy, ¡empezad a prepararos para la próxima temporada de esquí!
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Sam Suarez,
Técnico deportivo superior
