Lo habitual en un cursillo o clase de esquí particular, es que tanto el alumno como el profesor se centren en mejorar técnicamente.
Y el mejorar la técnica sin centrarse en desarrollar equilibrio (que es más relevante) es importante, y debe ser uno de los temas centrales para mejorar nuestro esquí. Pero esa gran importancia que damos a conseguir una posición correcta cuando deslizamos, no es la única en la que fijarse cuando valoramos tanto el "postureo", ya que también se la deberíamos dar a nuestra forma de colocarnos para las virales fotos que después publicaremos en las redes sociales. En caso contrario, la mejor foto que obtengamos esquiando será "anulada" si después mostramos otra en posición de novatos.
Cualquier esquiador habitual, que además entienda un poco del tema, conoce a la perfección cuándo alguien lleva años esquiando o no, tan sólo con observarle en parado.
He aquí en el vídeo, algunas tácticas para no parecer lo que no se quiere.