Las Navidades ya se sabe, para los "trabajadores blancos" son revueltas, un poco stressantes y un baile de fechas que no te enteras ni en el día que vives, ni en el que estas.
A todo esto me llama Jorge de una revista de montaña y esquí, para decirme si podemos realizar un reportaje sobre el Telemark, y no se decir que no!!, vale Jorge.
total metido en medio de la voragine de cuadros, esquí, atenciones familiares, comidas, cenas, cansancios y a veces quedarme quieto en un rincón sin pensar, oir, ni escuchar, llamo a Luis un buen fotografo y mejor amigo, y como Luis tampoco sabe decir que no!! y aparte le apasiona el arte de la fotografia y más si es en el medio natural, me da el OK. y nos plantamos por la montaña, ( ayudados de los remontes, que todo hay que decirlo ) y nos ponemos manos a la obra en las fotos que vamos a meter en el reportaje de.....Jorge.
Y Luis que es muy paciente y yo que soy muy impaciente, pues ahí estamos trabajando codo a codo, ponte allí, desciende por allá, no te escapes, pero Luis como no me voy a escapar con esta nieve que tengo debajo de mis pies!!!
Y Luis que me mira como diciendo, Joder que yo tambien la tengo y aqui estoy tumbado en ella para sacarte la mejor instantanea, vale, vale, donde me pongo.
Sube otra vez, baja, anda, desanda, fotos, más fotos, muchaass fotos.
Vale ya tenemos las suficientes, vamos a esquiar sin presiones, ya pero cuando vino ese momento mis piernas no me obedecían y con un sol luminoso, una nieve polvo impresionante y un día de "reve" que dicen nuestros vecinos franceses, me despedí de Luis, el se quedo y a casa a soñar con las bajadas, y lo de soñar es muy cierto porque la siesta fué de las de verdad.
Os pongo unas fotos de Luis, las otras las vereís en la revista que ya os anunciaré.
Saludos.
Fotos. Luis Santos.