Así que ahí me ves, mientras toda España sigue dando la bienvenida al Nuevo Año o empieza ya a recogerse después de una noche loca, yo cojo el coche para llegar a esquiar a Andorra el día 1 de enero.
Me esperan cuatro días para disfrutar de lo que más me gusta en el mundo, el esquí.
El primer día encuentro las pistas bien planchaditas así que decido estrenar mi última adquisición del año pasado, los Fischer RC4 Worldcup sc (ya estaban probados en Xanadú pero había que darles un estreno digno). Qué decir… ¡pues que van como un tiro! Yo que pensaba tener un día tranquilo de esquí me doy cuenta de que con estos bichos como pareja de baile es imposible.
Esquí agresivo, divertido y juguetón. Muy ágil en los cambios de giro corto y medio con buen rebote si le aprietas. Buen agarre en nieve dura y muy estables a altas velocidades. Vamos, para resumir ¡una gran adquisición para días como hoy!

El día 2 de enero cambiamos de tercio… como ya dije en mi anterior report…me he enamorado del esquí de montaña y he caído en sus garras. Así que hoy toca skimo y repito guía. Esta vez Edur de Grand Valira Mountain Guides me lleva a la zona del Estany de l`Estanyó. La idea inicial era subir la Serrera pero en el último momento cambia de decisión por la falta de nieve y la orientación de las palas.
Y el cambio es un acierto, porque la subida nos recompensó con una pala de nieve polvo brutal a la bajada.
Empezamos en el parking de Sorteny por el camino que va al refugio del mismo nombre, pero antes de llegar al refugio nos desviamos a la derecha y empezamos a subir por un bosque de pinos donde en algunas zonas pisamos esta nieve. Esto es solo el principio de lo que nos íbamos a encontrar en la bajada.

La subida transcurre sin mayor novedad, disfrutando de las vistas impresionantes que nos rodean.

Y llegamos al Estany de l'Estanyó… aún nos queda por subir el último muro y me empiezan a fallar las fuerzas -Aclaración. No es que la ruta sea difícil, pero yo aún no estoy acostumbrada y la falta de técnica se empieza a notar cuando llevas un rato de calentón-

Edur me empieza a hablar de nieve, tipos de nieve, copos, cohesión y hasta de las Tortugas Ninja


Aquí nos movemos un poco buscando la orientación perfecta para encontrar la mejor nieve.
Y ¡la encontramos! Esta es la pala y la línea que bajamos vistas desde abajo. Cómo diría un gran amigo y apasionado como yo de esto de la nieve la pala era ¡brutal, espeluznante!


Y acabamos esta gran jornada comiendo en el Refugio de Sorteny, muy recomendable, por cierto.

El día 3 de enero toca freeride en Ordino Arcalís, el gran paraíso del esquiador fuera de pista. Edur se dedica a enseñarme algunas de las canales de la zona de Portelles, de esas que ves desde la silla y piensas ¡madre!, ¿y por ahí se baja? Y sí se baja, porque además de enseñármelas, bajamos algunas y me enseña cómo hacerlo para no morir en el intento.

En alguna de ellas se me complica la historia, pero oye, ¡que para eso están los límites, para superarlos! Y ahí salen a relucir todas las enseñanzas del día y todos los truquitos que están guardados en el disco duro esperando a ser utilizados.

Y como recompensa, ¡bajadas impresionantes! De esas que crees, cuando las ves desde la silla, que no están hechas para ti, pero al final…¡bajas!

Y aún queda el día 4, pero como después hay que volver a Madrid toca día tranquilo de esquí en la estación a bordo de los cohetes. No sé yo si será tan tranquilo…
Como resumen perfecto de estos 4 días, me quedan estas dos fotos…

Disfrutando del presente…

Mientras busco las líneas del futuro…
Fotografía por @edurlopex y martagsc
Guía de Montaña: Edur López de Grand Valira Mountain Guides