Como el camino era largo desde el hotel, no llegamos a tiempo de aparcar en la zona gratuita y tuvimos que dejar la furgoneta en el parking cubierto, que tiene un coste de 5€ la jornada. Se nos adelantaron ene l parking y el los "trillamientos".
Aquel que no conozca Ischgl, comentarle que es una de las mega estaciones austriacas. Tiene 238 kms de pistas. Creo que aún hay pistas que no he bajado a pesar de haber estado ya cuatro veces en ella. Al margen de su tamaño, cuenta con los remontes más modernos del mercado. Cada año construyen líneas nuevas o modernizan los que tienen ya. Aquí es fácil encontrar desembragables de 8, con asientos deportivos, calefactados y con capota. En Ischgl todo es un exceso.
Por encima del Silvrettabahn, estaba despejado.
Nada más subir, nos pusimos a hacer una bajada por la derecha de Flimjochbahn,
para salir al Palinkopf y dirigirnos a una de las mejores zonas de la estación para hacer fuera pistas.
Vistas a la salida del Palinkopf.
Panorama desde el Gampenbahn, el único remonte que conozco que se tarda más en bajada que en la subida. Y que es hay unas laderas tremendas para bajar fuera pista.
Esta es una de las razones por la que se tarda tanto en bajar, hay tanto por donde ir buscando para trillar y trillar ...
Vistas desde la salida del Greitspitze. Al fondo Samnaun (Suiza) estación que comparte forfait con Ischgl.
Y para terminar el día, una foto de recuerdo con mi hermano de la nieve Loren.
[b]Día 7:Retorno[/b]
Por la noche comenzó a nevar con intensidad. Así estaba la carretera en los túneles del Alberg.
Y así la autopista en Suiza
Un brindis con Moët antes de subir al avión en el duty free. La chica que servía el champagne en el stand promocional era de Barcelona y nos apresuró a beber nuestras copas antes de que llegasen los rusos,
Finalmente, quiero agradecer a Trok, que compartiera su conocimiento, compañía y las aventuras en las que nos sumergió (literalmente) durante toda la semana.
¡Muchas gracias, compañero!¡Qué el powder te acompañe!
Página 3: Tercera parte