Pero la cuestión era dónde?
Aunque viendo como venían las nevadas decidimos Comes de Rubió ( la otra vertiente de Port Ainé)
Un entorno increible, ruta de 11 kilómetros ida y vuelta pero con menos de 300 metros de desnivel ( una ruta ideal para raquetas y iniciados en este mundo ).
Teníamos dos opciones de salida, pero al final optamos por la cima del Port del Cantó, en lugar del pueblo de Rubió ( ruta 1 km más corta).
Aquí una foto de la salida desde la misma carretera.
El inició de la ruta con nieve justita, pero la suficiente para deslizar.
Antes de entrar al bosque hemos disfrutado de las vistas del Turbón y de Llesui.
A partir de este punto queda prohibida la circulación de vehículos en invierno y es donde se juntan las pistas forestales desde la cima del Port del Cantó y del pueblo de Rubió.
Algunas fotos de la ruta.
Cuando uno llega al refugio, cree que esta en un país nórdico, el refugio es muy bonito por fuera y más aún por dentro.
Pero si el entorno es bonito, el refugio precioso, el trato del guarda, encontrar un refugio calentito y con uns comida muy buena ayuda a acabar de pasar un día agradable.
Tan agradable que nos hemos quedado dentro del refugió y no hemos coronado el Pic de L' Orrí para bajar por sus pales que hoy estaban llenas de POW
Y falta el postre, para mí mel i mató.
Un gran día de esquí, y con muchas posibilidades en la zona para debutantes y paseantes. Y con algo más de acción y esquí si se corona en la cima de Port Ainé.
