
Espot es una estación de la FGC (Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña), 100% pública y mantiene la filosofía del grupo: convertirse en una estación de montaña (no sólo de esquí), generar trabajo y riqueza para la comarca, acercar la montaña a todos los ciudadanos, en todas las estaciones del año. Eso exige diversificar actividades y nada más llegar se aprecia: recorridos indicados, miradores con leyenda de lo que uno ve, una gran zona lúdica para los niños y los que simplemente se acercan a ver la nieve por primera vez…


Pero igual que se aprecian las señas de identidad de FGC, también se aprecia su propia personalidad. “Por la configuración de la montaña, las pistas tienen bastante desnivel, es una estación más alpina, de paisaje más agreste”, nos cuenta Xavier Bigarda, Director de Espot y Port Ainé. Es cierto: estamos en el linde del bellísimo Parque Nacional y el paisaje es de alta montaña. En la cima, laderas agrestes y el Mirador de la Pala, desde el que hay vistas fantásticas a un buen montón de picos, sobre todo la emblemática Pica d-Estats (3.143 metros), la cima más alta de Cataluña.


Otra de las señas de identidad de Espot es la pasión por la competición. “Tenemos tres pistas homologadas por la FIS para competiciones. . Desde hace varios años tenemos prueba de la Copa del Mundo de Telemark. Esta semana tenemos la Copa de Europa de la IPC (Comité Paralímpico Internacional)”. En la zona central de la estación se aprecian tres pistas cerradas y balizadas para competición con una cabina de cronometraje y un cartel indicativo… ¡Pasión por las carreras!


Nuevamente, en este Reto 33 estaciones, nos ha sorprendido encontrarnos con una estación con un nivel de nieve más que suficiente para esquiar. Realmente esta estación pallaresa, igual que su hermanada Port Ainé, está blanca y con nieve en cantidad y (al menos en nuestra visita de hoy) con buena calidad.


Los retos de Espot a medio plazo son aumentar la cobertura de los cañones, reorganizar los remontes y construir una zona de servicios en la base de la estación, en la cota 1.500.

En nuestro Reto Full Activity, esta es la décima estación peninsular que visitamos y hemos vuelto a recorrer todo el dominio rojo y azul disponible, que era la práctica totalidad de la estación (¡sólo una pista cerrada, además de las tres reservadas a la competición!). Lo que más nos ha gustado, como casi siempre, es el “costa a costa”, la bajada vertiginosa desde la cota máxima (2.500) a la mínima (1.500), un kilómetro vertical entero de tirón en el que empiezas en cumbres peladas de alta montaña por la imperial Pala d´Eixe y acabas bajando entre el bosque hasta la base por La Roca.


Nuestro próximo destino: Port Ainé.