El viernes 22 fue el día elegido para esquiar por primera vez en mi vida Chamonix. Yo he estado más de 3 veces en Chamonix en el verano, pero nunca para esquiar en invierno. El resto de los integrantes del grupo, ninguno había estado Chamonix. Lo teníamos a 80min de nuestro apartamento, así es que, ese fue el día de la "madrugá". Tocaba salir muy temprano para llegar alli a primera hora y poder disfrutar del día. Durante el camino, podíamos admirar como amanecía el macizo del Montblanc.
Previo pago del túnel del Montblanc, 55 euros (ida y vuelta), cruzamos a Francia, cumpliendo así otro de los objetivos de este viaje. Esquiar en 3 países, y en sus picos más altos y emblemáticos de los Alpes, como el Montblanc, Monterosa y Matterhorn/Cervino. Foto del grupo en la plaza principal de Chamonix.
La jornada de esquí de hoy es para "hombres". Chamonix es la cuna del freeride, emblemática estación mundial. Y como no, lo primero que hicimos es subir al teleférico más prestigioso del valle para los riders. El famoso Les Grands Montets.
De este edificio sale el mítico teleférico, no sin antes chuparte la emblemática cola de 20-30min. Es lo que tienen los remontes míticos, todo el mundo quiere subir a ellos.
Aunque merece la pena la espera, porque la vista desde la cima de la estación a 3255m es completamente brutal.
Montañones puntiagudos, llamados agujas...
...rodeados de hielo, como el del Glacier des Rognons.
Mirador.
Otra vista del valle. Vaya fotón!! Al fondo del valle podemos apreciar el sector de "Les Houches", al que más tarde visitaremos.
Los paisajes de alta montaña son bárbaros, y hay mucha nieve. Chamonix es de las estaciones, que más nieve, ha recibido este, puñetero e inusual, invierno 2015-2016, que estamos sufriendo.
Pero bueno dejemos de tonterias y pasamos a la acción. Ahora hay que bajar estas escaleras para llegar al paraíso del powder.
La mejor nieve de todo el viaje estaba aquí. Se trataba de otra pista mítica, la negra Point de Vue. Una negra larguísima que tiene un inicio bárbaro sin pisar. La pista estaba muy bacheada, la nieve muy polvo pero a la vez también compactada en ciertos lugares ya trillados. Nosotros nos metimos por un lateral por fuera de la pista, ahí sí que estaba powder total!!
La verdad es que la pista era muy dura, un ladera guapa, te agotabas pronto, pero las vistas compensaban. Vaya agujas!!
Pau a lo suyo, a darlo todo!!
Tras el éxtasis inicial, llego la parte más dura de la pista, un mar de baches que no lo salvabas ni por los fuera de pistas. 
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Aun así el tio Richi, llevo a sus acompañantes, a donde sin duda estaba, la mejor nieve posible de la bajada jaja. Tengo un don para oler el powder, ehh Victor!!! " />
Esquiar entre glaciares es la bomba, es impactante alzar la mirada y ver la morrera del glaciar. Vaya lengua!!! 
Bueno bueno, ya casi hemos superado esta mítica pista. Point de Vue, recordarlo!!
Bonita imagen de Pau bajando este pistón.
En realidad es que todo el sector de Les Grands Montets es una pasada. Todo el terreno es completamente esquiable, una estación muy enfocada el freeride. Respecto a las pistas, son muy difíciles, muy muy inclinadas, prácticamente solo rojas y negras. Nosotros encontramos las pistas con nieve dura, te embalabas enseguida. Es una estación muy cañera, no apta para gente novata, hay que tener un nivel de esquí ya avanzado, al menos para disfrutar de las pistas.
Al medio día hicimos un inciso. Nuestra idea era conocer más de un sector en Chamonix, ya que solo teníamos un día para conocer semejante dominio de más de 150km. Así es que, ni corto ni perezoso, al medio día, todos para el coche, ni nos quitamos botas. Bueno el conductor si se quitó la botas jaja, fui yo el pringao de turno. Hubo gente del grupo que no quiso esquiar más, y preferían subir al teleférico de la Aiguille du Midi. Yo, prefería esquiar, no quería subir a la Aiguille du Midi, se me iban a poner los dientes largos por no haber bajado la Vallee Blanche; que en realidad era nuestra idea inicial. ¡¡Cagaos!! 
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Así es que nada, el grupo se dividió. Juan se fue con el teleférico hasta los 3842m...
... donde se podía ver la arista de acceso a la Vallee Blanche. Yo no lo vi, repito que me fui a esquiar, pero me dijeron que no es tan fiero el león como lo pintan.
El Montblanc presidía las vistas.
Las vistas desde aquí son espectaculares.
Paola y Sergio en la cueva de acceso a la Vallee Blanche.
Nieve, hielo y glaciares.
Chamonix al fondo del valle.
Helicópteros, vimos muchos en Chamonix. Imagino que serían para heliski en Italia, ya que en Francia está prohibido.
Otra foto más de la arista. Impresionante!!
Otra de las fotos del viaje es esta, tomada por Juan con mi cámara a 3800m. En ella vemos en primer plano el sector donde yo estaba esquiando en ese momento, Les Houches, en su famosa pista Kandahar de Copa del Mundo. En esta imagen, en un segundo plano, vemos al fondo, el dominio de Evasión Montblanc.
Imagen de la estación superior de la Aiguille du Midi.
Firma de los Gatos en el libro de visitas del teleférico.
Detalle de la cueva de hielo.
Curiosa vitrina de cristal, donde, con unas zapatillas especiales, que te prestaban para que no se rayase el suelo de cristal, te podías hacer una foto suspendido en el aire.
Raúl, Isidoro, Victor, Pau y yo, el grupo de "los Leones", nos fuimos a Les Houches.
Nuestro objetivo de hoy. Pista mítica Kandahar, creada en la década de 1950.
Mientras subiamos telesillas, tomabamos fotos del Montblanc.
Y de las pistas. Ya se le veía que iba a estar dura y a la sombra.
Por fin, yo, en el portillón de salida de la Kandahar!!
Vaya vistas hay en la salida de la Copa del Mundo, Isidoro se quedó flipándolo!!!
Comenzamos a bajar la pista a todo trapo pero, pronto vimos que la cosa iba a estar complicada. La pista se encontraba digamos que "en obras", ya que solo faltaba un mes para el gran evento de la Copa del Mundo. Habían grandes acumulaciones de nieve en ciertos puntos, para la creación de los saltos de la prueba de descenso. Isidoro se quedó con la boca abierta cuando bajando, llegó a un cambio rasante bestial y me preguntó: ¡Y esto?, y le contesté que eso era el primer salto de 20m del descenso y que eso lo cogen los pros volando.
Otra imagen más de la Kandahar. Es difícil explicar cómo es la pista, pero imaginarla muy retorcida, con curvones y nieve muy dura.
Como digo, la pista estaba en obras, pero no estaba cerrada al público. La verdad es que era peligrosa porque aquí en esta imagen, se ve con claridad la parte superior de la pista donde han acumulado nieve para realizar un salto pero, hay unos 20m de pequeños bloques de hielo y para bajar por ahí la puedes liar gorda. Yo tuve que ir por un lateral complicadísimo entre árboles para evitar la zona de bloques de hielo. Mis acompañantes, directamente vieron el percal, se desataron las tablas y subieron a pie hasta el último cruce jaja. No vi a nadie bajar por allí, solo el loco que os escribe. Verdaderamente nos sorprendió que ese tramo de la pista estuviera abierto, porque era impracticable. Está claro que es una pista negra de Copa del Mundo pero, ... ostras jaja.
Les Houches también tiene una parte soleada muy bonita, la cara trasera. Un sector que era una preciosidad por la nieve acumulada y por los árboles que lo rodean. En la imagen vemos la parte superior de la cima Prarion.
Después de cerrar la estación, tocaba dar una vuelta por el centro de Chamonix.
Aqui vemos al "Papa Noel de Chamonix".
Un pueblo precioso y con mucho turismo.
Fachadas completamente engalanadas.
A Victor le encantó!!
El centro de Chamonix es siempre una visita obligada, no defrauda.
Y poco más chicos. Al día siguiente, el sábado, quisimos esquiar de nuevo en Zermatt pero, en Cervinia hacia mucho viento y estaban cerrados los remontes en zonas altas. Por tanto, dimos media vuelta y fuimos a esquiar a nuestra Chamois, la estación de nuestro alojamiento. Allí al menos si abrieron todos los remontes, y además, abrieron todo el desnivel de la estación, los 800m. Fue un día tranquilo, mi octavo consecutivo de esquí. Chamois fue ideal para poner punto y final a esta gran semana de esquí por el valle de Aosta. Después por la tarde, hicimos la Closed Party, que básicamente consistió en ponerse pedo de cerveza por las calles de Cervinia. La verdad es que un poquito de fiesta siempre viene bien. Bueno mentira jaja, porque al día siguiente tuve resaca visitando el centro de Milán y cogiendo el avión de vuelta para Valencia. Pero, ¿qué importancia tiene una simple resaca después de esta pedazo semana de esquí? Ains, si es que parezca que todavía este allí !! Es más, quiero vivir allí !! 
No querría despedirme, sin antes, dar gracias a todos los componentes de este viaje, porque hemos formado un grupo de categoría. Para repetir!!! 
Y ya por último, aquí os dejo, un año más, con la sección de los "motes", que les hemos ido sacando, durante el viaje, a todos y cada uno de los 11 componentes jaja. Arriba esos Gatos!!!!
Un saludo, hasta el próximo viaje y recordar....SER FELICES!!!
Página 6: Monterosa
