Hemos bajado a La Villa dos veces, una por el plácido y soleado caminito, otra nos hemos decidido al final por La Gran Risa, la pista negra que desde el Pico La Villa se desploma en seis o siete tramos con sus vueltas hasta la base de la cabina. En fin, ya tenemos hecha la pista negra y a partir de aquí haremos lo que nos de la gana...
La vuelta a casa, con el pico Sassongher decorando la entrada al atardecer, nos hace por fin abrir una sonrisa de oreja a oreja al intuir que nos lo vamos a pasar bien !! Ja, ja, ja...
La mañana siguiente, el lunes, hemos puesto rumbo al Paso Gárdena, para bajar a Selva e intentar hacer un sube-baja a Santa Cristina, antes de encontrarnos por allí con nuestras respectivas parejas, que se acercarán en coche a medio día.
Cualquiera le niega al pico Sassolungo/Langkofel (3.181 m) un encuadre central cuando aparece por primera vez ante nuestros ojos...
Impresionante grupo rocoso, cuya imponente masa solamente puede apreciarse en relación al tamaño de los árboles y de la escala humana. Veréis con frecuencia en mucha de las tomas que aparece el elemento humano. Es deliberada su inclusión; hormiguitas, mosquitos, insignificantes siluetas por aquí y por allá calzando sus tablitas y con palillos en las manos.
El castillo de Gárdena se encuentra al paso hacia Santa Cristina, al borde de la pista variante roja Saslong, que es una preciosidad de pista. Gracias, Ludus Magnum, por las recomendaciones de tus reportajes, nos hemos movido por el dominio en parte motivados por ellas.
El Grupo Sella, omnipresente en estos dominios que le circundan. Se denomina "rondasella" al itinerario que puede hacerse a su alrededor, bien en el sentido horario, bien al revés. Lleva bastantes horas de esquí completarlo y es uno de los principales objetivos de gran parte de los esquiadores los días de buena visibilidad. Por ello, los remontes que forman parte de este itinerario, así como sus pistas, se convierten en una romería que a veces cansa y -es mi apreciación personal- hasta pone en peligro la seguridad porque intentan completar este largo itinerario personas de cualquier nivel de esquí. ¡Se ve cada coosaaaa...!
¡Ah!¡Por fin hemos localizado el famoso Bombardino! Es una bebida "spiritosa" a base de huevo, azúcar, ron, whisky...
Hoy no, porque hemos quedado dentro un rato y la tarde se mete en nieve y hay que poner la mesa... ...
Tercer día de esquí. No es que haga muy bueno, pero tampoco mal día, ha nevado y la nieve está de rechupete porque la temperatura debe andar por los -5Cº. Nos vamos hacia Armentarola, a tomar un microbús que nos suba a Lagazuoi. Lo hemos visto en plano y nos llama la atención.
Hay a primera hora una luz tamizada por nubes de estancamiento medias y bajas que resulta...
Una de esas sillas de dos plazas que dan acceso a la sella ronda, y que hoy tenemos que tomar para nuestro destino, quince o veinte minutos de espera. Suerte que el recorrido te hace olvidar...
Cabañas que son de libro y a las que no les falta detalle, se van sucediendo por todas partes. No recuerdo echar en falta una donde tomar un "caffè macchiato", o "expresso macchiato", como llaman por aquí a los cortados.
Mal momento para divisar panoramas, pero bueno, no faltan detalles que fotografiar en la única pista que baja a Armentarola, para que os hagáis una idea...
Al llegar a los alrededores de Armentarola, la llanura se impone para llegar al siguiente remonte durante unos kilómetros, no muchos, que pueden hacerse alternando patín y remando cuando hace falta, viendo el paisaje pasar, que es lo que nosotros hicimos; ...no sin ver con envidia a un grupo de esquiadores que pasaron arrastrados a remolque con cuerdas nudadas por un trineo a tiro de caballos. Por dos euritos, la próxima probamos
De nuevo el Sossingher que nos da la bienvenida por la tarde, hoy creyéndose volcán. JRR gritaba: ¡un volcán, un volcán...! Este hombre..., vamos a tener que hacer algo con él... Por cierto, que ha resultado ser un compañero de esquí tenaz y con mucha capacidad de disfrutar el medio en compañía
En todos los ámbitos. Espero que esté disfrutando el engendro este de repor en blanco y negro. ¡Estos pseudo-fotógrafos de interiores, cuándo salen a la calle no hay quién los contenga!
No digo na. Os paráis y veis el día que ha amanecido hoy, miércoles, cuarto día de esquí. Marmolada. Se puede ir esquiando un día como hoy, JRR, le dije. Y allá que vamos. Nuestros acompañantes se van a Cortina d'Ampezzo a mirar bisones ¡glub, la visa! ...Nada, resultó ser tan escandalosamente cara que a penas se volvieron con dos cervezas en el buche y pare usted de contar.
Paso Padon no está cerca, precisamente, hay que atravesar Arabba a pie, por paso urbano, y lleva su tiempo, pero ya habéis visto, merece la pena. Desde aquí se baja a Malga Ciapela, a 1.416 m, donde se toma el funicular de triple trayecto que te sube a Punta Rocca 3.250 m.
Espectacular mar de nubes. Para subir al mirador, hay dos o tres tramos de escaleras dentro del edificio, luego lo veremos por fuera. No sé si es apreciación mía, pero falta el aire en relación al esfuerzo que se hace para subir. De todos modos, el ansia por ver estas deseadas estampas en la realidad de uno hace subir los peldaños con ritmo.
Grupo Sella desde lejos y con esta perspectiva, qué delicia el piramidal Piz Boé coronando el macizo. A nuestros pies, el comienzo de pista y el "Lago di Fedaia"
JRR con actitud de soportar frío. El viento no estaba en calma y levantaba nubes de nieve cumbrera que resultaba ciertamente desagradable. Las vistas son irresistibles y procuramos tomar fotos de todos los puntos cardinales. Lo que dan de sí los tres mil y pico metros!
Estación de llegada vista desde la pista. Es enorme, con una ermita excavada en la roca y todo. Se ven las escaleras abajo...
No ha sido un descenso fácil. La única pista que baja hasta el paso Fedaia va cargada de esquiadores que a duras penas pueden lidiar con el extenso y repetitivo campo de bañeras que se nos presenta por delante. Miles, millones de bañeras de todos los modelos, medias bañeras, bañeritas, bañeras de cuerpo entero, jacuzzis de siete chorros... ja, ja, ja... A ver si éste es modelo para lucir en semejante terreno:
La vuelta a casa ha sido a contra-reloj pero dentro de tiempo y la recompensa, ahora sí, es hoy en forma de refrescante tónica aromatizada
Hoy no es día de esquí. Hemos sacado forfait para esquiar cinco días y preparamos excursión a pie por los alrededores. Ha empezado a nevar con ganas y parece que ese es el pronóstico que nos queda. Pero bueno, Bigotes II y Concha han preparado una olla de lentejas estofadas que no se la salta un galgo y vamos a hacer ganas a la calle y el campo.
Umhhhh... Estos parece que se huelen algo..., tanta cadena...
Buena pista de patinaje, me hubiera gustado catarla y recordar lo poco que sabía patinar con veinticinco años. Lo anoto en "pendientes".
Postales y más postales, clásicos de la nieve y de la arquitectura. En este dominio no falta de na. Estas casas de formas tan limpias, forradas de madera y con huecos de fachada tan asimétricos han llamado mi atención. No tienen nada que ver con la arquitectura local, pero tampoco desentonan en absoluto. No sé si es el aspecto práctico que aparentan o el corte de cabaña del año 3.000... Vuela mi imaginación, perdonen...
Mejor nos vamos recogiendo. Hoy hay que dar movimiento a esas lentejas y por fin han localizado mis amigos lo más parecido a un hüte de los de Austria. Sigue nevando, pero a cubierto no se está mal, para nada mal. Música y gente bailona, mucho guapo y guapa, como reza la publicidad que nos llevó aquí.
Ya le dije a JRR que en reflejo del grifo no iba a salir bien..., pero se empeñó !!
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Vaya, vaya, vaya..., tela, la que ha caído y la que sigue cayendo... Ayer veíamos la acera de enfrente, y hoy a nadie se ve pasar.
Hemos hecho el intento, que conste, pero el quinto día de esquí no va a ser posible. Están todos los accesos cercanos cerrados y el eskibús ese hoy está "chiuso, chiuso, chiuso". Sometida la cuestión a la opinión de todos, decidimos que Munich nos espera. El tiempo no para de complicarse y nosotros -que ya nos hemos esquiado bien- tenemos que estar mañana con tranquilidad en el aeropuerto, que es lo que corresponde.
Tenemos tiempo de dar un paseo por el pueblo, andando con pies de plomo, y ver el ambiente de la gente que hoy se dedica a contemplar el manto acumulado. Un tesoro para la comarca, supongo, que vive del turismo principalmente.
Con el coche cargado hasta las trancas nos alejamos hacia el histórico paso de Brenneo, las ruedas de invierno son un gran invento para la automoción y sin más problemas llegamos a Munich.
Recomendados esta vez por otro forero, Jaque_Mate, de nuestro grupo NevasportGY, que sabe lo que dice en la materia...
Nos metemos un codillo entre pecho y espalda, con varias cervezas para ayudar, y finalmente hacemos migas con estos tiroleses de pro, de los que hay decenas en el local poniéndose de zumo fermentado hasta más allá del equilibrio para sostener la cabeza derecha. Eso sí, el gesto de coger la jarra y llevársela a la boca, o el de pedir al camarero un último medio litro, automatizados, oigan.
Un último paseo por el barrio más cercano y vuelta al centro, donde se prepara algún acto de protesta contra el gasto militar y la opresión de los civiles en las guerras, algo que, según parece, preocupa a las autoridades y siembran manzanas enteras de un catálogo completísimo de figuras policiales, de todas las administraciones concurrentes, cada uno con sus colores, equipamientos y poses. Los siguientes, no se crean, posan alegremente para las turistas, aunque declinan hacerlo con ellas, pero yo prefiero que vean el corro de posturas divergentes.
Y punto y final. Esperad, que os activo de nuevo los conos de la retina para que vuelva de nuevo la alegría cromática....
Parece que sólo hay esta foto de color. Pero no, ¿cuántas has visto?
Sé de uno que ahora va a reclamar su voto positivo...