Vail es una macroestación muy bien organizada, con gran cantidad de pistas y remontes pero... que no pudimos disfrutar al 100%. El viento y la gran afluencia de esquiadores (era sábado) nos chafaron la jornada de esquí. Así se encontraba el coche por la mañana, con estalactitas de hielo.
Al comprar el forfait comprobamos la gran cantidad de gente a la que nos íbamos a enfrentar. Por cierto que Vail tiene el forfait más caro del mundo, al menos yo nunca había pagado tanto, nada menos que 105 dólares por persona, en euros son 80.
Mapa de pistas de Vail. Pincha para ver más grande: http://www.vail.com/~/media/Vail/Images/2011TrailMapfrontfix.jpg
Las primeras impresiones de la estación eran buenas, buenas vistas y pistas potentes.
Aquí Ana posando junto al cartel donde indica la situación de la pista Lindsey´s, pista bautizada así en honor a la gran esquiadora Lindsey Vonn. A pesar de que ella es del estado de Mineshota, Vail es la estación que ella considera como su casa.
Las colas en los remontes eran tremendas, aunque no se refleje en mis fotos.
Sin embargo las pistas estaban casi vacías, toda la gente se encontraba en las colas de los remontes jaja.
Para ser el forfait más caro del mundo no nos gustó nada el asunto de las colas. La estación tiene varios sectores, su principal es el Front Side.
Intuímos que el sector principal sería el que más colas tendría, por eso nos dedicamos a recorrer toda la estación hasta el final para intentar esquivar las colas.
Esta foto es de la zona Blue Sky Basin, la parte más alejada de la base de la estación, donde se suponía que abría menos gente aunque no fue así.
Esta es la zona más salvaje de Vail.
Con multitud de pistas negras e itinerarios sin chafar entre árboles.
El sector de Back Bowls también tenías grandes laderas sin pisar donde dar rienda suelta a tus esquís, aunque el viento era cada vez más molesto.
Indicador de pistas.
En general es una estación muy amplia (3 sectores), con muchísimas pistas y muchísimos remontes, la más grande de Norteamérica dicen, aunque yo creo que Whistler y Vail deben ser muy parecidas en amplitud.
Desde arriba podías observar de escenario todo el pueblo de Vail, que fue creado en torno a la estación.
Pero a medida que ibas bajando hasta el pueblo se van viendo las tremendas colas de más de 20 minutos de espera en cada remonte.
Ana bajando hacía el remonte flipando.
Tras aguantar la cola del remonte, de nuevo a esquiar intentando alejarnos de las zonas más concurridas.
La estación dispone de gran cantidad de hectáreas para disfrutar.
Pero no fue el día ideal, cada vez que llegábamos a un remonte había que sufrir su cola correspondiente.
Menos mal que sus exigentes pistas te hacía darlo todo en cada bajada.
Tocaba animarse y disfrutar de Vail, fuese como fuese.
Aunque también estaban los típicos senderos de color verde para desplazarte por los sectores de una manera más fácil.
A pesar de todo, la estación nos pareció muy grande, imposible de poder ver bien en una sola jornada.
Y sus pistas la verdad es que eran bastante espectaculares, autopistas diría yo.
Finalizamos la jornada en Lionshead, donde teníamos el parking del coche, el otro núcleo urbano de la estación aparte de Vail Village.
Al día siguiente, tras otros 3 días de esquí consecutivos, y aprovechando que todavía hacía algo de viento, hicimos jornada de descanso. Aprovechamos el día para ir a conocer la estación que pensábamos esquiar, la vecina Beaver Creek. Esta situada a solo 15 minutos en coche de nuestro hotel de Vail, por el camino nos encontramos este "juguetito".
Vista general de la estación.
Entrada al complejo Beaver Creek, esta estación es como si fuera un club de golf, para entrar hay que pasar unas barreras con vigilantes para entrar.
Allí es todo mega-caro, Beaver Creek es un club de ricos diría yo. Por aqui salgo yo "regateando" por las tiendas.
Pista de hielo en el centro del resort.
Y este vaquero mirando...
... a esta pedazo de pala, ainss !!
Después de marear un rato nos volvimos al hotel, no sin antes comprar la comida en el hiper SAFEWAY. Es una fiesta entrar aquí y ver la cantidad de cosas raras de alimentación que venden jeje, aunque hay de todo y con precios más baratos que en España. Tanto en Canadá como en Usa casi siempre usábamos esta cadena de supermercados para comprar, al menos así controlabamos un poco la dieta porque lo que no podía ser es comer siempre hamburguesas y cenar también hamburguesas jaja, parece mentira pero es que si vas a un bar en america a cenar no tienen otra cosa jaja, alli todo tiene grasa !!
Por la tarde nos fuimos a conocer más a fondo la ciudad de Vail. Vimos sus 2 núcleos urbanos, sus tiendas, calles, restaurantes... tenían de todo pero la verdad es que a las 19:00 ya no había ni dios por las calles, poquísimo ambiente. De todas maneras son todo tiendas rollo vacaciones (deportes, souvenir, galerías de arte...) no espereis que haya tiendas de un pueblo normal como por ejemplo Vielha en España. Tambien aqui es todo bastante caro, te cobran por todo jeje. Lo tienen todo enfocado a un tipo de cliente con poder económico jaja, no es mi caso xDDD.
Como ya dije, las construcciones intentan imitar al Tirol, la verdad es que todo Vail parece un parque temático sobre Austria jajaja.
Aquí en Vail tampoco puede faltar la pista de hielo.
Y bueno, lo de los árboles con lucecitas... pues como si fuera Navidad xDD
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