Die Abenturen des Megabyte in Zermatt

Guenas noshes de nuevo. Vamos a intentá terminá etta agonía de relatos y dejá descansá en pá a Sermatt, aunque esha no nos jasha dejao descansá en pá a nosotro. A vé si da tiempo a resumí los dó úrtimos días desquí.

Er caso é que despué der maravishoso dia desquí anterió, en la sena, entre olores a pies rascleteros, nos pusimos tós a inventá par dia siguiente shegá a las italias a una hora rasonable. Uniendo la sabiduría der grupo y los consejo dunos y dotros, lastrategia se iba a resumí básicasmente en dó pilares: uno, levantalse má pronto que la primera gashina der vashe, y la segunda, seguí una rusta arternativa que, como mú bien dise Raú, no é lisnea resta pero é má ráspida, a tenó de las declarasiones dargunos foreros que labían probao.

Asín que anteldesconsuelo der daví y der josele, que ettuvieron un buen rato resgateando un cuarto dora parriba un cuarto dora pabajo, ar finá quesdamo a las siete y cualto de la mañana pa desashuná, y a las osho menos cualto pa tirá parriba. Lostoy eccribiendo ahora, en frio y en la dittansia y mestán entrando sudore frio na má que de pensá lo cabralocas questábamo, pero lo ditalia sha era amó prospio pisoteao y había que shegá a la fronstera a una hora desente pa podé pasá er dia sin agobio.

Totá, que a la mañana siguiente cuando er móvi se puso a bailá un sapateao ensima der culo de la mega pa despertarlo, la mega no daba crésdito. Por dió por dió pero si era noshe serrá, si ettaban poniendo las cashes todavía, si prasticamente er mundo nossistía a esa hora, donde coño íbamos tós ettos frikis con nuestros sacos veldes, que cuarquiera que nos viera a esa jora en mosvimientos se pensaría queramos una panda alienígena que veníamo a consquistá er mundo o argo peó. Si pusimo la tele con er caná locá que salían las wescam de lo harto de las montaña y mira lo que se veía



La wescam é ese cuadrao negro como boca de lobo. La Caro y la Mega se pegaron un jartón a reí con esa risa floja que te da cuando sabe questasjasiendo er giliposha pero que timportaumpimiento, y se quedaron las dó mú a gutto y mú relajás pa asfrontá er retto der dia con buen humó, viniera lo que viniera.

Er desashuno, sus podéi deimaginá. A la der bufé der hoté la pishamo en braga dorsmitando detrá de la barra, que no tenía ni puestos los boshos, y nos miró con cara legañosa como disiendo "coño, ¿pos no mabían disho que eran españole?", toa esstrañá de ve a arguien que no tuviera la pié coló rosita levantao ante de la dié de la mañana. Seguro que sabía pedío er tunno de mañana sabiendo quettaba er hoté sheno despañole pa tocarse er jigo a gutto de siete a nueve, pos toma sha y ponte a currá.

Er retto de sacos verde fueron shegando como sombis con er pilotoutomástico puetto y se susedieron vario casos de esharle sumo de naranja ar café, juntalse mantequisha en la mano y jaserse bocata con er embutío arriba y abajo y er pan en medio. Desididamente er cuerpo jumano, y er nuettro en particulá, nostá diseñao pastá en funsionamiento a esas horas. La comunicasión verbá consistió en varios gruñidos de distinto tono y argunas vocalisasiones aisladas der tipo "eeemrrrrr eemmr súcar" y tú le pasaba er asúcar ar sombi que había emitío er sonido.

Cuando las neurona empesaron a jasé sus sinorsis y sus cosas y las menten empesaron a entrá en una fase normá de reconosimiento destímulos, empesamo a desidí er plan locomotrí arternastivo. No vimo musho entusiammo en las desisione, o má bien é que no nos estaban escushando. Er tema é que un gruspito redusio desidimo seguí las indicasione de argunos foreros y no bajalnos en la estasión intermedia der guesvo furi, sino seguí hastalfiná. Y ashí se bajaba una pitta cortita y se shegaba a furgg, donde se pishaba un megaguevo der cretásico que nadie lo cogía y que no hasbía cola, y shevaba jutto ar glasiá, donde sha se podía pishá er superguevo que shevaba arriba der tó (dió que casi mafissio).

Esquesmáticamente, ette é er rescorrido que jisimo er dia anterió:



y ette er plan innovadó previtto



Así que la cosa consittía en no bajarse der furi hatta er finá, y luego pisha er guevo T. E desí, utilisá los catetos dese triánsgulo donde la sipotenusa era presisamente uno de los guevos donde se montaba má cola. Y é sierto que la sipotenusa é er camino más corto, perooo, ¿sería er más ráspido? Eso mimmo queríamo de descubrí.

Bajamo ar guardasquí, y como eramo los prismero, er nido de las botas ettaba completo



Nos lansamo como guerrero der amanesé a conquistá las cashes der pueblo, y pol lo menos vimo que aunque no nos ibamo a librá de los ashushone, ar meno no ettaba tan petao como er dia de ante y había sitio pa moverse una poquita y sacá la cásmara.



Las aglomerasione en er assensó y en er guevo furi también ettaban presente, pero má fluidas que er dia anterió. Había sio guena idea la de madrugá, y seguí tól trashesto der furi ibastupendo polque ar menos ibas sentao.

Ar shegá ar finá, bajamos una pequeña pitta roja y shegamos a Furgg, donde pishamo er bisho antiguo y abandonao. Y cuando entramo ashí, aquesho nos paresió siensia fissión. No había nadie. Increible. Ettábamos tós anonadáo. Solo se metió en er superguevo un señó con barba y nosotro. Cómo sería nuettra sorpresa por etta inesperada situasión, que David nos deleitó con una clase improvisá de Barriosésamo, presentao por Carol-Paquipeña:




Ar shegá ar glasiá vimos que er guevo sipotenuso venía sheno de gente, y corrimo comolaslocas pa que no se nos colaran. La carrera fue una posquita surrealista porque fue a botancaso limpio y ar grito de mariscón er úrtimo, que curiosamente se cumplió, pero no por farta desprint sino por la torpesa habituá de la mega. A ve cómo te pone a corré a tó trapo con los esquises en una mano y los palosenlaotra. Pos noveas er resto como le pegaban, ni que acabaran dabrí las rebajas der cortinglé. Asín que claro, shegamos antes de que los sipotenusos desembaracaran, y pishamo er úrtimo guevo, er de la cola enolme, casi sin nadie. Nos remetimo ashí como pudimo, y nos dimo cuenta entre lásgrimas demosión que íbamo a podé subí ar próssimo que shegara. Nuettrastrategia había salio redonda, habíamo conseguío superá er úrtimoscosho ante de que shegaran las hordas, e incluso ante de que shegara no solo sha er retto de los saco verde. E que no había shegao ni er asacotim. Por un mosmento fugas saboreamo la vistoria, hatta que los sipotenusos shegaron ashushando y entramos en er superguevo otra vé a presión. Pol lo menos quedamos colocaos de tar forma que argo der glasiá pudimos vislumbrá en er caminito parriba.

Ar shegá arriba, a la Carol, que er dia de ante sabía quedao en er espá, sha no la pishó de sorpresa er peaso túsner pa atravesá er picasho, polque se lo habíamo contao. Y como íbamos de sobraos, hatta nos paramo en er miradó ese que se subía con un assensó desdersentro der túsner hatta lo arto der picasho. La verdá é que las vittas meresen la pena. Según ponía ashí, era er remonte má arto duropa. Los paisaje eran tal que asín:



Pa subí arriba der tó der picasho había que subí ettas escaleras:



Había un carté que avisaba de no jasé mushos esfuersos y movelse despasio por la musha artitú der sitio, pero la mega semosionó y no sacordó y se puso a subí lascalera a botancaso limpio. A lo dó milisegundo se le nusbló la vitta y aparesieron unos puntitos rojos mú potitos que se movían y se juntaban unosconotros y jasían performanses por tol campo de vision de la mega, y selaseleró er purso y lentraron sudore y le temblaron las piennas. Joé qué ráspido que astúa er mal daltura ese, sho creia que te daba argo de tiempo de reassión, pero no, é austomástico. Meno má que la Caro utilisó la cabesa y por er guarki se puso a shisharle a la mega que no corriera y que subiera despasito. Los puntito rojos desaparesieron y me dio una pena con lo bonitosqueran, pero bueno, me fui acostumbrando poco a poco y consegui shegá asriba sin má insidentes.











Despué de contemplá un rato er presioso paisaje, bajamo der miradó y nos pusimo por fin los esquises. Miramo los relojes y nos desposhamos tós de risa ashí mimmo. Las nueve y media, dó horas antes quer dia anterió. Con lalegría en la cara y tol dia pol delante pa disfrutá, nos tiramo pabajo por las peasos de autopittas italiana, y respetimo er mimmo rescorrido pa que la Carol conosiera la pitta de los diesiséi kilosmetro hasta Valturnenche.

Aquí vemo a Daví con er niño istaliano que adostó er primé dia que pasamo a istalia, y que luego dejó a la interperie toa la noshe, pero ar segundo dia se posdujo er reencuentro. Ettuvo esquiando y subiendose en los remontes con er niño tol dia, ante la misrada astósnita de los remonteros.



En aquesha sona, sha vorviendo parriba, cogimos do sishas con pittas espestaculare que no pudimo resistí la tentasión de probarlas, que son las sishas e y f. Tanto nos guttaron que repetimos las pittas varias veses, y una de ettas veses la Carol dijo que nosesperaba abajo, que ettaba una poca de perjudicá sha con las rodishas. Eso la convirtió en testiga presensiá y privilegiá de la trasgedia quesestaba maccando en er aire.

La mega, ar shegá ar finá de la sisha "f", senvalentonó y sacó la cásmaradevideo, dispuetta a grabá un dessenso en diresto. Como no quería que la cásmara sufriera daño (sha ve, la pobre), desidió grabá a siegas, con er visó serrao por si se ostiaba, que no se partiera por ahí pol las nieves. Así que cogió los palos con la isquierda, y con la deresha sin guante, enganshó la cásmara y dio orden ar grupo de rodá. Tol grupo se tiró hasia abajo a toa hostia, y la mega detrá intentando grabá argo. La grabasión luego fue una caca porque solo salió un troso der josele y una poquita der david, y musha nieve polque nostaba bien puetta la posisión y casi tol rato ettá demasiao baja. Pero la mega iba felís con su cásmara recogiendo fiesmente la emosión de la bajada. Y cada vé iba má ráspido, y má contenta, y la cásmara la movía pa la deresha, y pa laisquierda, y parriba y pabajo, sin prettá musha atensión a la pitta en sí mimma, de ahí que casi se sheva palante ar josele un par de veses, que era er que más cásmara shupaba.

Y má ráspido, y má ráspido. A la mega le salían las condussione con los esquises como si sacabara de sacá er canné, y la pitta ashudaba, de lo bien quettaba la nieve y de lo ansha y espestaculá que era.

Shegó un momento en que la pitta, asparentemente se quedó vasía polque la mega sha había adelantao a toda criastura viviente, y eso le dió ala pa corré má todavía ,en vitta de que no había nadie que la pusiera en pesligro. Eso mimmo debió de pensá er Daví, que cusriosamente iba esquiando en paralelo, pero ar otro lao de la pitta, y también a toa hostia.

La mega vió shegá un cambio de rasante y dijo, pa qué vamo a fresná, si no hay nadie, vamo a pegá er sarto y verá que guay sale luesgo en la cásmara. Los esquises de la mega se despegaron de la nieve y esha iba pol los aires felís y contenta y disfrustando comunaloca de la velosidá y er viento. En er mimmo aire, giró los esquises pa la deresha
y cashó en la nieve en esa postura, y claro, se desplasó musho hasia la deresha, sin percastarse de que er Daví también había volao pol los aire a su mimma artura, pero é había desidío cambiá la diressión hasia laisquierda. Y é lo que tiene la física, que no fasha. Si dó cuelpos que bajan en paralelo a toa hostia pol un planoinclinao de pronto restifican su trasyectoria en sentidos contrarios, la hostia ettá asegurá por el mimmo einstein. Y eso fue lo que pasó. La mega de pronto vió pasá toa su vida pol delante cuando sencontró a dó sentímetro der culo de Daví, y no pudo reassioná ni redusí ni frená ni ponelse un condón. Der poshaso que le metió ar Daví, er probe salió disparao sincuenta metro pabajo y le jisho trishiso con carrera y máster, y la mega voló pol los aire perdiendo los palos, los esquises, la cásmara, y gorpeándose en tol cuerpo con cosa indescristibles, a veses blanda, a veses dura, a vese durses, a veses salás. En aquer momento, cuando la mega iba por sus diesisei año en er repaso ráspido a su vida, jiso un paréntesi en er recordamiento pa asvertí que se podía está dejando los seso esparsíos pol la pitta si no hubiera shevao casco, de las peaso de hostias que sestaba shevando en la cabesa. Y luego siguió pol los diesisiete año.

Cansaita sha de caé y venga a caé y de gorpe y má gorpe, la mega desidió vorvé a la realidá polque er repaso ettaba siendo mú aburrio y sabía quedao atascá en los treinta año y no era plan de entrá en tanto detashe, si paresía que ar finá ni sabía matao ni na. Por dió qué lenta que mestoy vorviendo, pensó la mega, que ya no shego a tiempo ni pa repasá mi vida, si é que menrollo como las persiana hatta matándome. Con un leve deslisamiento finás, la mega perdió la poquita denergía sinética que le quedaba todavía pegá ar peto, y se paró, bocabajo y con la lengua fuera shupando la nieve. Se jiso er silensio y la oscuridá, y la mega nosatrevía a movelse pol miedo a que arguno de sus miembros desidiera no respondé a los impursos serebrale. Finasmente sarmó de való y se jiso un shequeo mentá de tol cuerpo, y ar meno los músculo prinsipales funsionaban. No pudo deprobá uno battante prinsipá pero polquestaba bocabajo y ademá no le paresía er momento ni er lugá apropiao pa semejante ersitasione. Dó segundo despué sescushó la vó angustiá de la Caro preguntando por los guarkis si ettábamos bien. Coño, é verdá, quemeshevao palante ar Davi, pensó la mega. Se levantó medio mareá y contempló er espestásculo dantesco de toas sus piesas esparsías pol la montaña y varios voluntarios rescongiéndolas, y treinta metro má pabajo er Davi escoñao en la nieve con gente alrededó. Ottia que melohecargao, pensó la mega, y lentró despronto er cargo de consiensia y jiso prospósito denmienda y le pidió a tós los santos ateos der sielo que er probe Daví ettuviera entero, o ar meno que las partes desmembrás no hubieran entrao en contasto con la nieve pa podé reimplantarlas.

Pero quiso er hasedó que ar Daví no le pasara ná más que tené er culo una poquita de dolorío y er mushasho no fue espesiarmente duro con la mega, de hesho sestaba descojonando una poquita y mira, ese buen humó animó a la mega y la ashudó a salí der susto.

Tras rescogé los bártulos, seguimo bajando hatta dondestaba la Caro, ar pie de la sisha, que nos resibió con un entusiatta "Vaaaaaaaya ostia que os habeis dao!!!", y empesamo a comentá, sha un poco má animaos tó el evento. Er probe Daví solo asertaba a desí "questa vé no he sio sho, ein?"

Los siguiente momentos los dedicamo a revisá la cásmara de video, que paresía que no había sobrevivío ar impasto, pero que despué se recusperó comunacampeona, pero no fuimo capases de sacá er video completo. Se ve que al pegá er guarraso, la úrtima parte no se grasbó ar dicco duro, y se perdió jutto la parte der encontronaso y la ostia, una pena. De toas formas, sus dejo er resto der video. No está mú ashá y marea un poco, pero é que er dogma no se me da ná bien.




Ya en la sisha subiendo de nuevo pa í jasia Plan Maison, la mega se dio cuenta de que tenía un poco jodío er dedo goldo de la mano derecha. Ettaba como inflamao, pero no pensó que fuera ná grave polque podía doblarlo y sacalse moco sin problema con el, así que pensó que era solo er gorpe, y siguió esquiando tan tranquila.

Etta foto é en er telesquí "h", vorviendo de Vartornenche.



Etta é una de las superautopittas que bajaban der glasiar de Sermatt hasia Servinia.



Y ya en la sona de Plan Maison o como se shame, comimo en un bareto, y luego empesamo a subí y a bajá pol esas peasos de pittas rojas y asules superanshas, hatta que sha vimos que se nos eshaba la hora ensima, y vorvimos a Sermatt por las tré sishas consecutiva N, O y P, y a travé der paso der teodulo. Ashí arriba establesimo contasto con otros sacos veldes y los esperamos pa bajá tós juntos hasia Sermatt.

Mientra esperábamos, jisimos argujas fotishos, como etta der superguevo que se mete en er pichaso de la montaña:



Las pittas der glasiar y er vashe donde ettá Sermatt


Er paso der teodulo, por sierto, é un canalisho estresho en er que tienes que tirarte prásticamente resto polque no hay sitio pa giros ni pa hostias. Bueno pa hostias si, que arguna se pegaron delante nuettra.

Seguimos tós basjando, y la mashoría de gente se quedó en er famoso jute de la pitta negra. Le mega ettaba preocupá por el estao de su dedo gordo, que no le dolia musho pero le mosqueaba questuviera tan hinshao, así que tiró par pueblo pa í ar mésdico. Er jute era ette:



Y aqui tenemo la cola pa cogé er esquibus cuando sacaba la pitta ar shegá ar pueblo



Na ma shegá ar hoté la mega sortó los bártulo y se fue par médico. Una dostora mú mona y mú simpastica lestuvo essplorando er deo, le jisieron unas radiosgrafia, y resurta que er deo estaba roto. La puntita der gueso estaba como aplastá por argo que en la caida le había mashacao, y la uña estaba toa negra y er gueso un poco jodidisho. La mega estaba toa sorprendía porque por suelte no le dolía ná, pero la médica le puso un jierro y unas vendas pa que no doblara er deo, y le dijo que podía esquiá presfestamente. Así que ná, la mega soltó los francos suisos que hubo que sortá (a vé si er seguro se porta, ojo, que como los intermundiá no me paguen, no vea la que les lio) y se fue pal hoté con su deo vendao y toa sorprendía.

Y er úrtimo dia desqui, fue tó musho má tranquilo, de jesho dejé de í de cabesisha de grupo y siempre iba atrá der tó, pa evitá ostialmen de nuevo y jodelme er deo má aún. En ette úrtimo dia nos dedicamo a rescorré de nuevo los sitio que má nos habían gustao de Sermatt.

Aquí, con er trofeo resien conseguio:



Er superguevo der Rothorn:



Tomando un vinisho caliente en er iglú bar



Tomando un cafesito con guenas vittas



Y etta é una cabañita der restaurante donde nos paramo a comé



Luego pol la noshe jisimo la salidita der pueblo de despedida, ettábamos tós má tristes...

Argunas imagenes der pueblo de noshe








Y ar dia siguiente, lo inesvitable. Me canso ná má que de pensarlo, jasé er equispaje, tren, autobú, esquises.... y sin tené er alisiente de í hasia la nieve. En fin, qué depresion...



Pos ná má, amigos y amigas foreiros. En resumen, una estasión como poco, curiosa. Sobrevalorada, con pittas fásiles y demasiados caminitos estreshos, y remontes coñasos e incósmodos. Er servisio de esquibus é ráspido pero los buses son pequeños y tol mundo va a apelotonao, tol mundo sapelotona en tós sitios... é un poco agobiante. La parte ditalia tiene pistas más largas, y más divertidas, y tiene telesishas y es una cosa rasioná y jumana. Pero é pequeña y se ve mú ráspido.

Una cosa tiene buena la estasión, y é que los dessensos son largos, los desnivele son grande y cuando consigue shegá arriba de argo, luego estás un buen rato bajando. Eso me gustó, pero en generá no compensa ni merese la pena ni creo que vuerva por ashín. Eso si, er pueblo é mú bonito, pero pa vé ettampas bonitas sha me pongo un belén en casa.

Espero no habero aburrío má de lo nesesario, y hattal año que viene, un besoten!