el viaje fue tranquilo y descansado
y despues de 13 horas de coche, el pueblo que nos encontramos fue este:
A la mañana siguiente, despues de un buen desayuno, estabamos ansiosos por subir a la estacion..
Y la verdad es que merecia la pena subir...
la estacion esta enclavada entre 43 cimas de mas de 4000 mts
y a pesar de no tener en estos momentos mucha nieve, la calidad de la misma era impresionante.
las pistas eran largas y con zonas con buena pendiente aunque bien es cierto que habia zonas con escasa pendiente donde habia que patinar o... dejarse remolcar por algun pali.
eso si, con el matterhorn visible desde cualquier punto de la estacion
a nivel de remontes estaba bastante bien, con un buen numero de telefericos, telecabinas, sillas con capota, un funicular para acceder a la zona del sunnegga paradise y el curioso tren de cremallera, el gornergrat, que aunque lento, bien merece la pena coger una vez para disfrutar del paisaje..
y hasta perchas
un curioso altimetro dentro delteleferico que subia al klein
y otros medios de trasporte
u otros mas acertados
siempre habia zonas de avituallamiento..
..y claro, al que se le ocurriera subirse latas y tirarlas por ahi....
aqui, una de las cosas mas tipicas del pais:
el tiempo nos aguanto pero hizo bien de frio..
en la zona mas alta de la estacion habia escarvado en el glaciar una gruta con figuras hechas en hielo bastante curiosas..
los dias trascurrian de bajada en bajada.
con algun descanso..
y entonces se acabo lo bueno y la verdad es que nos hemos llevado un buen recuerdo de zermatt y de su entorno y con animo de volver alguna otra vez. Altamente recomendable para todo el mundo. Saludos!!!