Os comento un poco el viaje de estas navidades por si a alguien le sirve de provecho.
Hemos visitado la zona de saanenland o más conocida como Gstaad. Hace tiempo que le tenía echado el ojo a la zona ya que se podía dibujar un viaje interesante.
Hicimos base en el pueblo de Rougemont a escasos 7 km de Gstaad pero a pie de pistas de uno de sus 6 sectores. Este pueblo se encuentra ya dentro del cantón “Francés” de Chateau D´oex lo que abarta y bastante los precios de alojamiento. Una de las primeras sorpresas que me llevé al preparar el viaje es que a pesar de su fama elitista se encuentran hoteles a precios bastante razonables (siempre hablando dentro del rango de Suiza, Austria o Italia).
El primer dia esquiamos el sector de “Casa “ que es el número 2 “Eggli-Videmanette” con descensos interesantes en ambas partes. Se llega esquiando hasta el mismo pueblo de Gstaad. Los medios mecánicos de la zona son un poco obsoletos, pero la atmósfera que se respira en este sector es como muy rural. A penas si que se tocan los bosques para hacer pistas y no hay casi construcciones que no sea las propias del campo, es decir cuadras y graneros, lo que le da un aire muy bucólico.
El segundo día nos dirigimos al sector 1 “Schônried¨- Saanenmöser” .Apenas 15 minutos de coche y ya estábamos a pie de pista. Desde nuestro hotel se podría haber llegado hasta aquí en un corto trayecto en tren. De hecho casi todos los pueblos están conectados por tren y las estaciones se encuentra a pie de pista. Este sector conocido por ser el lugar donde nación y se forjó el campeón Suizo Michael Von Gruningen es un poco más extenso que el del día anterior. Combina pistas de baja y media dificultad y sus remontes son algo más modernos. Las bajadas a los Pueblos de Zweisimmen y St Stephan son bastante interesantes con desniveles que sobrepasan los 1000m.
El tercer día visitamos Lenk-Adelboden famosa esta última por el gigante de la copa del mundo que se celebra todos los años como anticipo al descenso de Wengen. El ambiente en esta estación cambia por completo con lo que habíamos visto en Gstaad. Mientras que en los primeros días a penas si se veía gran nivel de esquí y si mucha gente principiante.Lenk se reveló como una estación “racing” tanto por sus pistas como por el nivel medio de sus esquiadores. La pista de copa del mundo es bastante interesante y el muro final muy bonito (no tanto para D.Rahlves) . Muy buenas pistas y grandes posibilidades de fuera pista.El único pero es que la unión entre Lenk y Adelboden no está muy bien realizada y se tiene que remar en un par de ocasiones. Aún así esta estación bien merece una visita. Por cierto el forfait de Gstaad de 4 o más días es válido aquí previo pago de un suplemento de 10 francos suizos. El trayecto Rougenmont-Lenk se cubre en 30 minutos en coche y algo más en tren
Para el cuarto día reservamos las estaciones de Villars-les diablerets entrando por esta última (30 minutos en coche). Un dominio interesante con buenas pistas en la zona de diablerets y más fáciles en Villars-Gryon. Buenas vistas y la imagen del tren llegan a la estación de Bretaye a 1800 m de altitud y usado como un remonte más impagable. Lástima de poder esquiar el glaciar y es que sólo estaba abierta la parte alta cuando lo realmente interesante del mismo es la bajada hasta Reusch, una de las más largas de los alpes.
El quinto día y a pesar de ser año nuevo nos reservamos la estación más lejana de todas, pero sin duda el viaje mereció muy mucho la pena: Grinderwald-Wengen. Abajo en los pueblos nublado y arriba día de sol espectacular .La figura omnipresente del Eiger, hace de este lugar un emplazamiento único. Pistas de todos los niveles y de longitud media. La pista Lauberhorn donde se celebra el descenso de Wengen es preciosa. Bajar sus 4,5 kilómetros sin parar intentando emular a los campeones nos costó un dolor de cuadriceps considerable. Encontrarte una estación de tren a 2000 metros de altura a los pies del Eiger no tiene precio, para todo lo demás está mastercard. Sin duda es un lugar muy recomendable.
En resumen en Suiza, al menos en esta parte, hay que cambiar el chip. Olvídate de remontes ultramodernos y pistas planchadas. Hay que tomárselo todo con otro talante y con mucha tranquilidad ante todo. En wengen por ejemplo el tren pasa cada 20 minutos y no puedes acceder de otro modo a la zona superior de la pista de descenso. Nos quedó en el tintero para otro viaje el glaciar de la diablerets, la otra zona de Wengen : Mürren con su famoso “Piz Gloria” puesto en el escaparate mundial de la mano de James Bond. Engelberg puede ser otro destino cercano a grinderwald para el quiera pasar una semana por aquí.
Schonried
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En navidad anochece muy temprano.tanto que te casi te pilla en pistas
Esta foto de esquí nosturto, pertenece al estadio de slalom de rougemont. Desvirgar nieve polvo a las 10 de la noche y bajo una estrellada de consideración no tiene precio.
El tren en Villars
El tren en Grinderwald bajo la mole del Eiger
Pueblo de zweisimmen
Por cierto yo no salgo en ninguna foto
Bueno espero que el resumen os sirva para algo, al menos a mi recordarlo me ha servido para rememorar buenas bajas en buena nieve polvo.
Un saludo
Alex