Enviado: 02-10-2016 01:16
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Al fin lo conseguí. Odio la técnica. Creía que nunca llegaría este día pero, por fin y tras mucho esfuerzo, dedicación, tesón e implicación personal, puedo decir alto y claro que odio la técnica.
Llevo años, menos de una década puesto que el tubo y el virleo nacieron, en 2005 y 2004 respectivamente, viendo vídeos de técnica de esquí. He leído cuanto hay escrito en castellano, incluso tengo varios ejemplares repetidos de un par de libros, sobre técnica de esquí. Entender a los que hablan como Shakespeare sólo me ha traído más que trabajo y dolores de cabeza. Decenas de webs, centenares de artículos, varios blogs variopintos, esquiadores virtuosos, otros menos, y un sinfín de ideas han retronado dentro de mi cabeza durante horas a lo largo de los años.
Paralelismo, independecia de tronco y piernas, de piernas entre ellas, los brazos así o los brazos asá, centralidades que ni los partidos políticos que no tengan reminiscencia del Politburó querrían para si mismos, trucos infalibles, trucos absurdamente falibes, ideas sencillas que tienen mucha guisa, ideas complicadas que atrapan neuronas como la mierda a las moscas, contra rotación, proyección, fases, ritmos, presiones (hasta políticas oiga!), palabras inventadas como el "espibillo" (lo digo desde el cariño), caderas que se mueven pero que no se sabe ni respecto a qué, botas, esquís, así, asá, nieve, blanca, menos blanca, mármol, jodida y cabrona, pero no, que es el índio y no la flecha, Cristo no dice ni mú, y sí todos aquí reunidos persiguiendo un unicornio que jamás nadie vió.
Todo el mundo habla de técnica. ¡Hasta los que vienen un fin de semana y no regresan jamás! Y sí, lo confieso. Desde 1999 hasta hoy, que es 2016 (casi 2017), que llevo pensando en "la técnica". El virus ha ido mutando pero me temo que se le han acabado las ideas. Veo un vídeo tras otro y me parecen todos iguales. Da igual que sea un debutante, que un profesional, que un corredor de la copa del mundo. Los veo a todos iguales. Ya no hay misterio. Y no, no es que haya sublimado como un rico propietario de varias empresas que se retira al disfrute casi pornográfico de la "dolce vita". Tampoco he hecho todos los ejercicios habidos y por haber. Tampoco he llegado a dominar "la técnica". El aburrimiento no ha hecho mella, podría escribir o hablar de técnica durante horas. Pero ya no lo hago. De momento.
Preparación física, material, psicología barata (y de la cara también), contactos, medios, recursos, todos puestos a disposición de la técnica. Charlas de bar, charlas de foro, charlas entre compañeros, charlas a neófitos, charlas con profesionales (los de la copa del árbol), charlas con uno mismo y hasta con la pared. Todo este lío para acabar viendo un vídeo de Leni Riefenstahl, de Allais, de Stenmark, de Maier o del culazo de Vonn y darse cuenta de que todos son iguales. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. Sí, la técnica importa. ¿Hasta cuándo? ¿Cuánto? ¿Por qué? ¿A quién?
Mediáticamente vivo casi en paralelo. Y a veces creo que el mundo se ha vuelto loco. Hasta he llegado a pensar que el loco era yo al ver según qué cosas y pensar dos segundos sobre ellas. Actualmente, insisto en el 2016, casi que da igual que se sintonice SkyNews, que la CNN, que la BBC, que la RAI1, que TVE. Mismo formato, mismo tono, mismas coletillas y guiños. Pero... ¿hay algo que los distingue? Y, ¡qué demonios tiene que ver! ¡Está sonao este vaquero!
Interski. Sólo hay que verlos. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. ¿Hay algo que los distinga? ¿El estilo? ¿Los trajes? ¿La procedencia? ¿La política quizá? ¿Esquían bien? ¿Esquían mal? ¿Mejor unos que otros? Cuña con esquís planos, a la española con sus tipos 1, 2 y 3. Fundamental. ¿Clavo o no? Paralelos que destrozan ideas preconcebidas y otros que las llevan al Olimpo de los Dioses del Esquí. Ejercicios en parado, lentos, rápidos, que asocian o disocian, para el ritmo, para los pies, las manos, hasta para levantar ese culo y llevarlo adelante. Pasitos a un lado, colas que se levantan, saltos como los que hacen los peces, hasta musicales como el tip-tap. Y si la nieve está así, pues también tengo para eso.
Da igual que sea coreano, austrícao, yankee, argentino, australiano, chino, moro o español. Todos tienen lo mismo y todos hacen lo mismo. La técnica permite hoy que cualquiera (hasta yo) los lea, vea, y hasta incluso debata con ellos. La computación nos ha hecho dar un paso inmenso hacia adelante. La medicina, la mecánica, la técnica en general nos hace avanzar y supuestamente disfrutar más de la vida y de todo cuanto hacemos.
Será el signo de los tiempos o que me levanto con el pie malo. La industria musical ha muerto, el cine apesta, la televisión pública no emite libremente por internet a cualquier ip del planeta, la economía mundial va dopada hasta las trancas, y estamos todos en general muy preocupados por la técnica. La técnica de un instrumento musical, del coche que conducimos, la de la construcción de nuestra casa, la de marketing que tenemos que enseñarle a nuestro jefe, para nuestro nuevo proyecto, la de un programa de televisión, la del puto movil, la de tal o cual accidente aéreo, de tren, la de un asesino, la de la policía para dar con él, y cómo no la del esquí.
Un Domingo de madrugada a la 01:16H quizás justifique el escrito pero todo el se desmorona en el momento que quieres hacernos ver al resto que.............el culazo de Vonn es igual a todo el resto
Enviado: 02-10-2016 14:09
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Cita SnowCowboy
Al fin lo conseguí. Odio la técnica. Creía que nunca llegaría este día pero, por fin y tras mucho esfuerzo, dedicación, tesón e implicación personal, puedo decir alto y claro que odio la técnica.
Ahora que no estoy en el móvil contesto con más calma
Este es un tema que merecería un mini-ensayo. Como dije arriba no puedo sino comprender al Cowboy.
En el mundo hay gente que hace cosas y gente que habla de ellas. Hay artistas y hay críticos; hay deportistas y hay expertos en explicar lo que hacen. Los que nos dedicamos a lo segundo, a criticar o a analizar, solemos cometer el error de darnos tanta importancia que fagocitamos a los que hacen aquello de lo que hablamos. Incuso cogemos carrerilla y terminamos hablando de nuestro propio ombligo dejando al deporte (o al arte) de lado.
Es posible que cumplamos una función positiva, pero no es tan importante como se suele hacer creer, y seguramente el mundo del arte o el mundo del deporte seguirían adelante evolucionando sin la existencia de críticos y analistas.
En el caso del esquí a la técnica se le ha dado una importancia desmesurada, y creo que eso ha influido muy negativamente. Ya lo he argumentado innumerables veces: la enseñanza del esquí sigue anclada en los años 30 cuando comenzó formalmente, en una época donde la "moda" incipiente de la ciencia era la biomecánica y el análisis del movimiento. Todo eso está superado en la enseñanza del deporte y el esquí debería de intentar hacerse hijo de su tiempo, dejando de dar tanta importancia un esa parte ínfima del rendimiento, que además cambia cada dos por tres, jaja
Así que aprovecho el post del cowboy para confesar: personalmente hablo de técnica porque no tengo más remedio, porque la gente lo pide pero, si por mi fuera (y los que me han conocido en la nieve lo saben) no daría a la técnica más de un 5% del tiempo precioso y escaso que tenemos
Solo sé que Sócrates no sabía nada, o algo así era
Enviado: 02-10-2016 17:43
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Para mí, desde el punto de vista de un profesor, los videos de youtube, blogs, foros y libros han sido una bendición, me han permitido saber qué hacen y cómo lo hacen los demás y aprender de ellos. En medicina, por ejemplo, la asistencia a seminarios y congresos es continua y forma parte de su profesión. Nosotros, en cambio, nos sacamos un título y a correr, así podemos estar años y años enseñando lo mismo y de la misma forma...
Personalmente miro videos, leo blogs, foros y libros de técnica para responder preguntas y escribo de vez en cuando en foros de técnica para que opinen profesionales y aficionados. El saber no ocupa lugar y el aprendizaje es continuo.
Quizá el error sería pretender o pensar que por mirar videos y leer blogs se pueda llegar a ser como ellos, en no saber saber distinguir entre técnica y pedagogia, entre el análisis técnico para saber qué sucede, qué hacen o cómo ser más eficientes y la forma de transmitirlo y enseñarlo.
Enviado: 03-10-2016 09:19
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Cita SnowCowboy
Al fin lo conseguí. Odio la técnica. Creía que nunca llegaría este día pero, por fin y tras mucho esfuerzo, dedicación, tesón e implicación personal, puedo decir alto y claro que odio la técnica.
Llevo años, menos de una década puesto que el tubo y el virleo nacieron, en 2005 y 2004 respectivamente, viendo vídeos de técnica de esquí. He leído cuanto hay escrito en castellano, incluso tengo varios ejemplares repetidos de un par de libros, sobre técnica de esquí. Entender a los que hablan como Shakespeare sólo me ha traído más que trabajo y dolores de cabeza. Decenas de webs, centenares de artículos, varios blogs variopintos, esquiadores virtuosos, otros menos, y un sinfín de ideas han retronado dentro de mi cabeza durante horas a lo largo de los años.
Paralelismo, independecia de tronco y piernas, de piernas entre ellas, los brazos así o los brazos asá, centralidades que ni los partidos políticos que no tengan reminiscencia del Politburó querrían para si mismos, trucos infalibles, trucos absurdamente falibes, ideas sencillas que tienen mucha guisa, ideas complicadas que atrapan neuronas como la mierda a las moscas, contra rotación, proyección, fases, ritmos, presiones (hasta políticas oiga!), palabras inventadas como el "espibillo" (lo digo desde el cariño), caderas que se mueven pero que no se sabe ni respecto a qué, botas, esquís, así, asá, nieve, blanca, menos blanca, mármol, jodida y cabrona, pero no, que es el índio y no la flecha, Cristo no dice ni mú, y sí todos aquí reunidos persiguiendo un unicornio que jamás nadie vió.
Todo el mundo habla de técnica. ¡Hasta los que vienen un fin de semana y no regresan jamás! Y sí, lo confieso. Desde 1999 hasta hoy, que es 2016 (casi 2017), que llevo pensando en "la técnica". El virus ha ido mutando pero me temo que se le han acabado las ideas. Veo un vídeo tras otro y me parecen todos iguales. Da igual que sea un debutante, que un profesional, que un corredor de la copa del mundo. Los veo a todos iguales. Ya no hay misterio. Y no, no es que haya sublimado como un rico propietario de varias empresas que se retira al disfrute casi pornográfico de la "dolce vita". Tampoco he hecho todos los ejercicios habidos y por haber. Tampoco he llegado a dominar "la técnica". El aburrimiento no ha hecho mella, podría escribir o hablar de técnica durante horas. Pero ya no lo hago. De momento.
Preparación física, material, psicología barata (y de la cara también), contactos, medios, recursos, todos puestos a disposición de la técnica. Charlas de bar, charlas de foro, charlas entre compañeros, charlas a neófitos, charlas con profesionales (los de la copa del árbol), charlas con uno mismo y hasta con la pared. Todo este lío para acabar viendo un vídeo de Leni Riefenstahl, de Allais, de Stenmark, de Maier o del culazo de Vonn y darse cuenta de que todos son iguales. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. Sí, la técnica importa. ¿Hasta cuándo? ¿Cuánto? ¿Por qué? ¿A quién?
Mediáticamente vivo casi en paralelo. Y a veces creo que el mundo se ha vuelto loco. Hasta he llegado a pensar que el loco era yo al ver según qué cosas y pensar dos segundos sobre ellas. Actualmente, insisto en el 2016, casi que da igual que se sintonice SkyNews, que la CNN, que la BBC, que la RAI1, que TVE. Mismo formato, mismo tono, mismas coletillas y guiños. Pero... ¿hay algo que los distingue? Y, ¡qué demonios tiene que ver! ¡Está sonao este vaquero!
Interski. Sólo hay que verlos. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. ¿Hay algo que los distinga? ¿El estilo? ¿Los trajes? ¿La procedencia? ¿La política quizá? ¿Esquían bien? ¿Esquían mal? ¿Mejor unos que otros? Cuña con esquís planos, a la española con sus tipos 1, 2 y 3. Fundamental. ¿Clavo o no? Paralelos que destrozan ideas preconcebidas y otros que las llevan al Olimpo de los Dioses del Esquí. Ejercicios en parado, lentos, rápidos, que asocian o disocian, para el ritmo, para los pies, las manos, hasta para levantar ese culo y llevarlo adelante. Pasitos a un lado, colas que se levantan, saltos como los que hacen los peces, hasta musicales como el tip-tap. Y si la nieve está así, pues también tengo para eso.
Da igual que sea coreano, austrícao, yankee, argentino, australiano, chino, moro o español. Todos tienen lo mismo y todos hacen lo mismo. La técnica permite hoy que cualquiera (hasta yo) los lea, vea, y hasta incluso debata con ellos. La computación nos ha hecho dar un paso inmenso hacia adelante. La medicina, la mecánica, la técnica en general nos hace avanzar y supuestamente disfrutar más de la vida y de todo cuanto hacemos.
Será el signo de los tiempos o que me levanto con el pie malo. La industria musical ha muerto, el cine apesta, la televisión pública no emite libremente por internet a cualquier ip del planeta, la economía mundial va dopada hasta las trancas, y estamos todos en general muy preocupados por la técnica. La técnica de un instrumento musical, del coche que conducimos, la de la construcción de nuestra casa, la de marketing que tenemos que enseñarle a nuestro jefe, para nuestro nuevo proyecto, la de un programa de televisión, la del puto movil, la de tal o cual accidente aéreo, de tren, la de un asesino, la de la policía para dar con él, y cómo no la del esquí.
Querido vaquero: creo que te pasa lo mismo que al pobre Don Quijote en ocasión similar, así que copio y pego una antigua reflexión:
...el esquiador se enfrascaba delante del ordenador y se le pasaban las noches de claro en claro, y los días de turbio en turbio, y así, del poco dormir y del mucho leer, se le secó el cerebro, de manera que vino a perder el juicio. Llenósele la fantasía de todo aquello que veía en los vídeos, así de clavada de cantos como de bastones, pendencias, descensos, desafíos, lesiones, requiebros, tormentas y disparates imposibles, y asentósele de tal modo en la imaginación que era verdad toda aquella máquina de aquellas soñadas invenciones que leía, que para él no había otra historia más cierta en el mundo.
En fin, que ya dicen los clásicos que leer mucho puede ser perjudicial para la cordura.
Enviado: 03-10-2016 10:11
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Cita Carme
Querido vaquero: creo que te pasa lo mismo que al pobre Don Quijote en ocasión similar, así que copio y pego una antigua reflexión:
...el esquiador se enfrascaba delante del ordenador y se le pasaban las noches de claro en claro, y los días de turbio en turbio, y así, del poco dormir y del mucho leer, se le secó el cerebro, de manera que vino a perder el juicio. Llenósele la fantasía de todo aquello que veía en los vídeos, así de clavada de cantos como de bastones, pendencias, descensos, desafíos, lesiones, requiebros, tormentas y disparates imposibles, y asentósele de tal modo en la imaginación que era verdad toda aquella máquina de aquellas soñadas invenciones que leía, que para él no había otra historia más cierta en el mundo.
En fin, que ya dicen los clásicos que leer mucho puede ser perjudicial para la cordura.
Así que menos pensar y más disfrutar.
Que las pistas son cortas y la vida todavía más.
¡Genia! (Me encanta cómo lo dicen los argentinos).
Enviado: 03-10-2016 12:08
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Querido vaquero: creo que te pasa lo mismo que al pobre Don Quijote en ocasión similar, así que copio y pego una antigua reflexión:
...el esquiador se enfrascaba delante del ordenador y se le pasaban las noches de claro en claro, y los días de turbio en turbio, y así, del poco dormir y del mucho leer, se le secó el cerebro, de manera que vino a perder el juicio. Llenósele la fantasía de todo aquello que veía en los vídeos, así de clavada de cantos como de bastones, pendencias, descensos, desafíos, lesiones, requiebros, tormentas y disparates imposibles, y asentósele de tal modo en la imaginación que era verdad toda aquella máquina de aquellas soñadas invenciones que leía, que para él no había otra historia más cierta en el mundo.
En fin, que ya dicen los clásicos que leer mucho puede ser perjudicial para la cordura.
Así que menos pensar y más disfrutar.
Que las pistas son cortas y la vida todavía más.
Delicioso como siempre, amiga Carme. Rompamos las cadenas, escapémos de patrones, y disfrutemos libremente de este preciado bien que la naturaleza ha puesto a nuestra disposición.
CADA DÍA QUE SUBO A ESQUIAR, NO ME OLVIDO DE IR ACOMPAÑADO POR LA PRUDENCIA.
Editado 1 vez/veces. Última edición el 03/10/2016 12:10 por El Abuelo Carver.
Enviado: 03-10-2016 17:17
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Cita SnowCowboy
¿Cuándo sirve la técnica?
¿Cuánto sirve la técnica?
¿Cómo sirve la técnica?
¿Dónde sirve la técnica?
¿A quién sirve la técnica?
¿Por qué sirve la técnica?
¿a que huelen las nubes?
Te veo quemado Cowboy, la técnica no es nada y lo es todo, solo es técnica si eres consciente de que la usas..... es importante si la das importancia y si no es una mierda y también puede ser una mierda cuando le das demasiada importancia, puede liberar y puede oprimir. Es aburrida y divertida, si la cuestionas aprendes, si la aceptas la cagas....
Enviado: 03-10-2016 17:47
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Cita SnowCowboy
Al fin lo conseguí. Odio la técnica. Creía que nunca llegaría este día pero, por fin y tras mucho esfuerzo, dedicación, tesón e implicación personal, puedo decir alto y claro que odio la técnica.
Llevo años, menos de una década puesto que el tubo y el virleo nacieron, en 2005 y 2004 respectivamente, viendo vídeos de técnica de esquí. He leído cuanto hay escrito en castellano, incluso tengo varios ejemplares repetidos de un par de libros, sobre técnica de esquí. Entender a los que hablan como Shakespeare sólo me ha traído más que trabajo y dolores de cabeza. Decenas de webs, centenares de artículos, varios blogs variopintos, esquiadores virtuosos, otros menos, y un sinfín de ideas han retronado dentro de mi cabeza durante horas a lo largo de los años.
Paralelismo, independecia de tronco y piernas, de piernas entre ellas, los brazos así o los brazos asá, centralidades que ni los partidos políticos que no tengan reminiscencia del Politburó querrían para si mismos, trucos infalibles, trucos absurdamente falibes, ideas sencillas que tienen mucha guisa, ideas complicadas que atrapan neuronas como la mierda a las moscas, contra rotación, proyección, fases, ritmos, presiones (hasta políticas oiga!), palabras inventadas como el "espibillo" (lo digo desde el cariño), caderas que se mueven pero que no se sabe ni respecto a qué, botas, esquís, así, asá, nieve, blanca, menos blanca, mármol, jodida y cabrona, pero no, que es el índio y no la flecha, Cristo no dice ni mú, y sí todos aquí reunidos persiguiendo un unicornio que jamás nadie vió.
Todo el mundo habla de técnica. ¡Hasta los que vienen un fin de semana y no regresan jamás! Y sí, lo confieso. Desde 1999 hasta hoy, que es 2016 (casi 2017), que llevo pensando en "la técnica". El virus ha ido mutando pero me temo que se le han acabado las ideas. Veo un vídeo tras otro y me parecen todos iguales. Da igual que sea un debutante, que un profesional, que un corredor de la copa del mundo. Los veo a todos iguales. Ya no hay misterio. Y no, no es que haya sublimado como un rico propietario de varias empresas que se retira al disfrute casi pornográfico de la "dolce vita". Tampoco he hecho todos los ejercicios habidos y por haber. Tampoco he llegado a dominar "la técnica". El aburrimiento no ha hecho mella, podría escribir o hablar de técnica durante horas. Pero ya no lo hago. De momento.
Preparación física, material, psicología barata (y de la cara también), contactos, medios, recursos, todos puestos a disposición de la técnica. Charlas de bar, charlas de foro, charlas entre compañeros, charlas a neófitos, charlas con profesionales (los de la copa del árbol), charlas con uno mismo y hasta con la pared. Todo este lío para acabar viendo un vídeo de Leni Riefenstahl, de Allais, de Stenmark, de Maier o del culazo de Vonn y darse cuenta de que todos son iguales. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. Sí, la técnica importa. ¿Hasta cuándo? ¿Cuánto? ¿Por qué? ¿A quién?
Mediáticamente vivo casi en paralelo. Y a veces creo que el mundo se ha vuelto loco. Hasta he llegado a pensar que el loco era yo al ver según qué cosas y pensar dos segundos sobre ellas. Actualmente, insisto en el 2016, casi que da igual que se sintonice SkyNews, que la CNN, que la BBC, que la RAI1, que TVE. Mismo formato, mismo tono, mismas coletillas y guiños. Pero... ¿hay algo que los distingue? Y, ¡qué demonios tiene que ver! ¡Está sonao este vaquero!
Interski. Sólo hay que verlos. Dos brazos, dos piernas, una cabeza, un tronco, dos esquís y un pedazo de montaña nevada. ¿Hay algo que los distinga? ¿El estilo? ¿Los trajes? ¿La procedencia? ¿La política quizá? ¿Esquían bien? ¿Esquían mal? ¿Mejor unos que otros? Cuña con esquís planos, a la española con sus tipos 1, 2 y 3. Fundamental. ¿Clavo o no? Paralelos que destrozan ideas preconcebidas y otros que las llevan al Olimpo de los Dioses del Esquí. Ejercicios en parado, lentos, rápidos, que asocian o disocian, para el ritmo, para los pies, las manos, hasta para levantar ese culo y llevarlo adelante. Pasitos a un lado, colas que se levantan, saltos como los que hacen los peces, hasta musicales como el tip-tap. Y si la nieve está así, pues también tengo para eso.
Da igual que sea coreano, austrícao, yankee, argentino, australiano, chino, moro o español. Todos tienen lo mismo y todos hacen lo mismo. La técnica permite hoy que cualquiera (hasta yo) los lea, vea, y hasta incluso debata con ellos. La computación nos ha hecho dar un paso inmenso hacia adelante. La medicina, la mecánica, la técnica en general nos hace avanzar y supuestamente disfrutar más de la vida y de todo cuanto hacemos.
Será el signo de los tiempos o que me levanto con el pie malo. La industria musical ha muerto, el cine apesta, la televisión pública no emite libremente por internet a cualquier ip del planeta, la economía mundial va dopada hasta las trancas, y estamos todos en general muy preocupados por la técnica. La técnica de un instrumento musical, del coche que conducimos, la de la construcción de nuestra casa, la de marketing que tenemos que enseñarle a nuestro jefe, para nuestro nuevo proyecto, la de un programa de televisión, la del puto movil, la de tal o cual accidente aéreo, de tren, la de un asesino, la de la policía para dar con él, y cómo no la del esquí.
Enviado: 09-10-2016 21:45
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Bona nit.
Espero que nadie se tome la intervención de esta noche como una trolleada en toda regla aunque el hilo en sí tiene algo de ello. El título y el desenlace para mí son una pequeña gamberrada divertida. Temía en cierta forma que algunos entendieran que literalmente odio la técnica y que realmente lo he conseguido. Nada más lejos de la realidad. Es algo estúpido, por no decir tremendamente estúpido, anunciar el odio a la técnica en el foro de técnica. Quería escribir sobre la técnica desde el "otro lado" y es que de vez en cuando uno tiene que pararse y plantearse unas cuantas preguntas con el encabezado de las que lancé al final del primer post.
Los que me conocéis de carne y hueso y los que no, sabéis que a diferencia de la mayoría, no soy el tipo de persona que se conforma con: "déjate de chorradas y esquía". "Fluye", "disfruta de la vida", "déjate llevar", y ese tipo de cosas. Hubiera sido demasiado fácil y aburrido abrir un hilo con título similar y con un texto de tres cuatro líneas que resumido sería algo como: "uno llega a la conclusión que lo que importa es esquiar, experimentar, aprender de esas nuevas experiencias sin darle importancia excesiva a la técnica, hay que ser más feliz". Cuando uno es fan de Henry Rollins a veces se encuentra con situaciones complejas (ésta es una de ellas) y no puede resolverla en dos parágrafos (y menos aún en dos líneas).
Creo que no he tenido éxito en una de las ideas que rondaba por mi cabeza cuando escribí este post. Si no es así hacédmelo saber. Desde mi vertiente de esquiador aproveché todo ese conocimiento para intentar hacer un texto que de algún modo y después de alguna salida fuera de pista (léase móviles, coches, política, economía, televisión) esa neurona solitaria se despertara y no sólo si hiciera preguntas sobre el esquí. Por ello no cerré las preguntas con algo similar a: ¿... la técnica del esquí?
Cada uno vive el mundo a su manera y a pesar de la enorme tecnificación y sofisticación de cuanto nos rodea, los hay que apenas se dan cuenta de ello y lo dan todo por seguro. Otros están enfrascados (en esta obra eterna) en ello y apenas lo saborean. Los hay que lo tratan como un dogma de fe (cosa que entiendo de primerísima mano) y no salen de casa sin la gorra de la técnica. Hoy en día intento que la corriente no me arrastre y que la técnica sea una herramienta. Y no, no hablo solamente del esquí, ni siquera hablo de la técnica como algo matemático, complejo, etc. Facebook también es la técnica, una expresión basada en la técnica.
La mejora de nuestra técnica de esquí debería estar focalizada más en ayudarnos a mejorar nuestra expresión. Para mí el ir a esquiar es como una página en blanco. Puedo escribir, dibujar, arrugar, quemar, doblar, etc lo que me plazca. Cuanto más dominio de la técnica más cosas podré "decir". Seguro que os habrá pasado, especialmente a aquellos que llevan más años (y no sólo a los profesionales), que habréis visto a un compañero o amigo a lo lejos y lo habréis reconocido por su forma de esquiar. A pesar de seguir los mismos pasos técnicos, "su esquí" es distinguible. Empiezo a sospechar de estos vídeos dónde aparecen tipos con estilo milagroso porque básicamente se parecen tremendamente entre ellos. Algo similar sucede en algunos clubes. Algo que también se potencia en las "escuelas nacionales" y tiene su sentido y su por qué. No criticaré algo como esto porque tiene un cometido y un beneficio. Sin estructura estás perdido.
Sospecho de esos vídeos, que a mi también me encantan, porque todo es muy maquinal, frío y a veces casi impersonal. Lo contrario puede verse en no pocas carreras de copa del mundo. Cada uno saca lo mejor de sí en cada carrera y en cada curva. De tal forma que en ocasiones uno puede ver reflejadas las sensaciones del esquiador en algunos momentos. Atacar una curva con miedo lo hemos hecho todos y en la copa del mundo (de hecho en cualquier carrera) es algo que también hacen los mejores. El problema no es el miedo sinó cómo resolverlo. Me centro más en el esquí alpino puro y duro porque lo del freestyle sí contiene cantidades ingentes de expresión aunque llegue un punto en que parece que todos hagan lo mismo. Por ello un tipo como James Colby West o un Shane McConkey y hasta un Bode Miller es del todo necesario.
En resumidas cuentas. Quería traer un poco al debate el tema de la importancia de la técnica y cuántas otras cosas nos dejamos fuera. Y es ahí por ejemplo que los libros de Carlos cobran relevancia. Porque habla mucho menos de técnica que de otras cosas. Abrir el hilo desde el punto de vista "negativo" no ha ayudado a ello, pero me ha divertido y espero que a los demás también por poco que sea.
