El pasado 18 de septiembre, después de dos jornadas, Antonio José Herrera y el que escribe, dimos fin a una aventura de la que sale un nuevo trazado a la cara norte del Veleta.
La vía ha sido bautizada como “Despertavientos”, y no por error gramatical. Con una dificultad máxima de 6b, o A1 y 6a obligado, y 240 metros escalados.
La ruta comienza a unos 10 metros a la derecha de la entrada a la vía “Norte” justo a la derecha de unos bloques inestables.
De ahí parte totalmente recta hacia arriba, donde encontramos una fisura que nos permite poner un primer seguro.
A partir de ahí, con una ligera tendencia a la izquierda, escalamos una serie de placas lisas, en las que no hay el más mínimo resquicio para meter un seguro flotante. Seguimos subiendo para llegar al primer clavo, que no se ve hasta escalar unos 15 a 20 metros. De ahí vamos en línea recta para encontrar una primera vira, en la que haremos reunión sobre seguros flotantes. (V+ expo veletero, 35m. aproximadamente, con roca franca hasta la vira).
El segundo largo busca una fisura-diedro muy marcada y característica, que se asegura bien y termina en una fisura ancha hasta la pedrera bajo el gran gendarme, que sorteamos por la izquierda, hasta unos bloques en los que hay que montar la reunión, y a los que se accede por un paso entre dos cráteres. (V+,35m. aproximadamente, con roca franca hasta la pedrera del gendarme).
El tercer largo sale en diagonal a derecha por la placa buscando unos bloques adosados en los que emplazar algún seguro “psicológico” y después hacia una expansión a mitad de la placa. Luego sube recto hasta una repisa que se cierra por arriba con unos desplomes descompuestos. Ahí iremos en travesía a la izquierda hasta llegar a un diedro, que nos dejará en la siguiente reunión con dos expansiones. (V+ veletero, 35m. aproximadamente, con roca franca hasta la travesía).
El cuarto largo comienza por el diedro de la izquierda de la reunión y va buscando una fisura que te permite pasar entre la línea de techos, hacia un diedro amarillento en el que hay cuatro clavos para asegurar la secuencia más dura. La llegada al techo tiene unos pasos finos sobre roca poco franca que hace sudar al primero y al segundo de la cordada viendo los desplomes que hay alrededor. Pasado el diedro amarillento, que tiene una fisura para protegerse, llegamos a una placa muy aérea, que se asegura con un clavo metido a cañón. El largo termina en un techito descompuesto que hay que sortea con cuidado sobre una presa lateral que nos permite subir los pies y llegar a la siguiente reunión que hay que montar. (6b con roca poco franca, 40m. aproximadamente).
El quinto largo sube sorteando terrazas y resaltes terrosos por unos diedros poco marcados hasta unos bloques fisurados que nos permiten montar reunión. (V con roca terrosa y pedreras, 55m. aproximadamente).
El sexto largo sale hacia la izquierda de la reunión por la rampa hasta encontrar una placa característica con una fisura marcada, que sorteamos por la izquierda hasta llegar a las repisas de salida, donde montaremos otra reunión con material flotante ya en la cumbre. (V por pedrera y roca algo mas franca, 40m. aproximadamente).
Saludos
Antonio Cabanillas García