No os lo vais a creer!!!
Estamos subiendo a Tignes y han enviado una foto de grupo los que están Ali!!!
Me he quedado muerta cuando lo he visto en dicha foto!!!
Esta vivo y nos está esperando allí!!

Ayer en la kdd todavía me preguntaron por la historia famosa de anaconda y hoy me encuentro yendo a su encuentro…
Socorro!

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awandi
No os lo vais a creer!!!
Estamos subiendo a Tignes y han enviado una foto de grupo los que están Ali!!!
Me he quedado muerta cuando lo he visto en dicha foto!!!
Esta vivo y nos está esperando allí!!

Ayer en la kdd todavía me preguntaron por la historia famosa de anaconda y hoy me encuentro yendo a su encuentro…
Socorro!

Evaaaaaa, vas a su encuentro?

No se si os enterasteis en la KDD, pero lo tuvimos en enero en dolomitas con nosotros, hay que decir que no lo conociamos y que va buscando grupos para esquiar, y al final dió con el nuestro, Arantxa, yo y muchos más que formamos grupetas para esquiar por ahí. Pues también nos la lió, menudo personaje, no acabamos a ostias algunos, porque tenemos un poco más de masa gris que él. Cuando nos volvamos a ver te contaré.

PD: Nos enteramos de que era el ANACONDA, por otra gente del foro.

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awandi
No os lo vais a creer!!!
Estamos subiendo a Tignes y han enviado una foto de grupo los que están Ali!!!
Me he quedado muerta cuando lo he visto en dicha foto!!!
Esta vivo y nos está esperando allí!!

Ayer en la kdd todavía me preguntaron por la historia famosa de anaconda y hoy me encuentro yendo a su encuentro…
Socorro!

Evaaaaaa, vas a su encuentro?

No se si os enterasteis en la KDD, pero lo tuvimos en enero en dolomitas con nosotros, hay que decir que no lo conociamos y que va buscando grupos para esquiar, y al final dió con el nuestro, Arantxa, yo y muchos más que formamos grupetas para esquiar por ahí. Pues también nos la lió, menudo personaje, no acabamos a ostias algunos, porque tenemos un poco más de masa gris que él. Cuando nos volvamos a ver te contaré.

PD: Nos enteramos de que era el ANACONDA, por otra gente del foro.

Vamos a ver....
Coged al Anaconda y le tatuáis a fuego en la muñeca, "El Anaconda", así todo el mundo le podrá identificar de forma sencilla y no habrá más victimas.
De todas formas este elemento bien de la cabeza no estará, acaba siempre sacando de quicio a la gente hasta el punto que todo el mundo le quiere pegar y aún así insiste en acoplarse a cualquier grupo.

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oskar_hort
Vamos a ver....
Coged al Anaconda y le tatuáis a fuego en la muñeca, "El Anaconda", así todo el mundo le podrá identificar de forma sencilla y no habrá más victimas.
De todas formas este elemento bien de la cabeza no estará, acaba siempre sacando de quicio a la gente hasta el punto que todo el mundo le quiere pegar y aún así insiste en acoplarse a cualquier grupo.

Mejor en la frente. Que en la muñeca se lo tapa

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awandi
No os lo vais a creer!!!
Estamos subiendo a Tignes y han enviado una foto de grupo los que están Ali!!!
Me he quedado muerta cuando lo he visto en dicha foto!!!
Esta vivo y nos está esperando allí!!

Ayer en la kdd todavía me preguntaron por la historia famosa de anaconda y hoy me encuentro yendo a su encuentro…
Socorro!

Evaaaaaa, vas a su encuentro?

No se si os enterasteis en la KDD, pero lo tuvimos en enero en dolomitas con nosotros, hay que decir que no lo conociamos y que va buscando grupos para esquiar, y al final dió con el nuestro, Arantxa, yo y muchos más que formamos grupetas para esquiar por ahí. Pues también nos la lió, menudo personaje, no acabamos a ostias algunos, porque tenemos un poco más de masa gris que él. Cuando nos volvamos a ver te contaré.

PD: Nos enteramos de que era el ANACONDA, por otra gente del foro.

Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

Cita
Openai
Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

En realidad quejarse no se quejaba

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Jairo

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Openai
Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

En realidad quejarse no se quejaba

A lo mejor este es otro...

Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

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Jairo

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Openai
Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

En realidad quejarse no se quejaba

A lo mejor este es otro...

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Openai
Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

Pues no es el caso. Me cuentan desde 2 grupos diferentes.

Uno en Dolomitas en Enero que sigue no respetando a los demás en pistas, cruzándose y creando problemas. Pasàndose con las chicas más allá del límite. Vetado para ese grupo.

Esta semana en Tignes mala convivencia con los compañeros de apartamento. Suciedad. Poca implicación en las labores de convivencia. Mal con las chicas....

Intenta contenerse pero es como es

Mira que lo siento, pero entre cientos de buenos compañer@s conocidos en Nevasport, este no lo es 🤔

👍

Cita
Openai
Había una vez un grupo de amigos españoles que decidieron ir de viaje de esquí a los Pirineos. Entre ellos estaba un amigo a quien apodaban "el Anaconda" por su gran tamaño y su constante necesidad de atención.

Desde el principio del viaje, "el Anaconda" comenzó a ser un pesado para el resto del grupo. Se quejaba constantemente del frío, de la calidad del equipo de esquí, de la comida y del alojamiento. Además, siempre intentaba llamar la atención de todos, contando historias exageradas y haciendo bromas pesadas.

Durante los primeros días en la montaña, el grupo intentó ignorar sus quejas y su comportamiento inapropiado, pero "el Anaconda" se volvía cada vez más molesto y difícil de soportar. Incluso en las pistas de esquí, trataba de imponer su ritmo y su estilo a los demás, ignorando las recomendaciones del instructor y poniendo en peligro a los demás esquiadores.

Un día, después de una jornada agotadora en la nieve, el grupo decidió ir a tomar unas copas en un bar cercano. Sin embargo, "el Anaconda" comenzó a beber demasiado y a comportarse de manera aún más inapropiada. Empezó a hacer comentarios ofensivos a los demás y a insistir en que todos prestaran atención a sus historias exageradas.

Finalmente, el grupo decidió que ya era suficiente y que no querían pasar más tiempo con "el Anaconda". Lo confrontaron y le explicaron que su comportamiento estaba afectando al resto del grupo y que era necesario que se disculpara y cambiara su actitud. Aunque "el Anaconda" intentó defenderse y justificar su comportamiento, finalmente se dio cuenta de que había sido demasiado pesado y molesto para sus amigos y se disculpó.

A partir de ese momento, "el Anaconda" intentó ser más amable y considerado con los demás, y el resto del viaje fue mucho más agradable y divertido para todos. A pesar de todo, el grupo decidió que no volverían a invitar a "el Anaconda" en futuros viajes de esquí, ya que no querían arriesgarse a pasar por la misma situación de nuevo.

Pues no es el caso. Me cuentan desde 2 grupos diferentes.

Uno en Dolomitas en Enero que sigue no respetando a los demás en pistas, cruzándose y creando problemas. Pasàndose con las chicas más allá del límite. Vetado para ese grupo.

Esta semana en Tignes mala convivencia con los compañeros de apartamento. Suciedad. Poca implicación en las labores de convivencia. Mal con las chicas....

Intenta contenerse pero es como es

Mira que lo siento, pero entre cientos de buenos compañer@s conocidos en Nevasport, este no lo es 🤔

👍