Es normal que los puestos de trabajo en la montaña requieran llevar una mochila. Hoy todo el mundo la lleva, incluso por la ciudad

Pero no me refiero a esas mochilas, sino a otro tipo de mochilas a las que se refería en un artículo de El País, hace muchos años el profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada, Agustín Ruiz Robledo.

Decia el catedrático que era norma aceptada y no discutida, que en los concursos para la cobertura de plazas en el sector público, incluido el universitario, donde el trabajaba, que era muy corriente que algunos de los participantes llevasen una mochila a cuestas, donde además del apellido (no me voy a explicitar aquí sobre las cátedras heredadas de padres a hijos en la UGRA ), sino de otros requisitos ad hoc que siendo propiedad de algunos participantes, y no de otros, aparecían en las bases de los concursos como objetivos y exigibles erga omnes a cualquier participante

Cuando he visto la politico-publicidad de una bolsa de empleo para esta temporada, aparece un requisito, el de la EXPERIENCIA, que en muchos de los puestos ofertados es imposible tener si no se ha trabajado antes en esa posición, como pistero, remontes,etc. Además, cosa curiosa, la experiencia exigible varía en cuanto a su duración, lo que hace pensar, que sólo hay algunos candidatos con esos requisitos

Cierto es que ahora se guardan las apariencias, no como en la época del nefasto Páez que contrataba al personal en la barra del Cunini , pero también es cierto que ese engaño público no podría hacerse sin el contubernio sindical

Así que aspirantes SIN MOCHILA, no perdáis vuestro tiempo y vuestra ilusión solicitando algo que nunca estará a vuestro alcance.

Saludos