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RegístrarseUna vez más, ameno relato. Un placer.Cita
Dinosaurius.-park
Ahora me tocaría estar echando la siesta, pero como decía el emperador de Pekín en la ópera Turandot, nessun dorma !!
Porque no se puede dormir ante esta nevada que en estos momentos está cayendo en Sierra Nevada e incluso en Granada
Un año más de nieves, las nieves de mi vida. Incluso cuando me muera, si mis hijos cumplen mi última voluntad seguiré disfrutando de las nieves de Sierra Nevada y de Granada
Vivía en la Plaza de Fortuny, en el Realejo, y cuando hacía mucho frío siempre esperaba que amaneciera nevando, porque la nieve ha sido la gran ilusión de mi vida.
Al despertar y ver que el gallo de la vecina de la casa de al lado no había cantado, abría los postigos y veía los tejados nevados
Se notaba un silencio amortiguado por la nieve. Mi madre venía a despertarme, aunque yo ya estaba despierto, y esperando salir a la calle para subir a la escuela al Albayzín. Mi madre me ponía unos chanclos de la marca Pirelli sobre las zapatillas de paño ( eso si son unos buenos apreski, y no lo que venden ahora tan caros!), ya demás una boina (sería por apellido Arana de mi abuelo paterno), y nada más salir a la calle contrastaba mi alegría con el miedo de la gente que iba a su trabajo, cabreada y tiritando. Y es que la nieve no se ha hecho para los ciudadanos. En las ciudades provoca auténticos problemas
Subir la Calderería, la Cuesta del Aljibe de Trillo hasta la Plaza del Abad donde estaba mi escuela era un ejercicio de montañismo alpino parecido a la subida al Veleta. Las heladas piedras de las calles y la nieve pisoteada por lo que bajaban, con algún resbalón y consiguiente caída hacían peligrosa la aventura, que merecía la pena. Porque ese día no había clase, y el maestro D. Manuel, nos llevaba a disfrutar de la nieve en la Golilla o Monte Sombrero, después de comprarnos unas jayuyas en el la panadería Ayuso de la calle Panaderos.
Toboganes sin trineo, a pleno culo de pantalón de pana ( y sin plásticos ), peleas de bolas de nieve contra los "coreanos", que así llamábamos a los habitantes de Haza Grande, la población más próxima al lugar de nuestro disfrute, y luego vuelta a la escuela, empapados, para volver a Granada por la Calderería, donde la nieve ya estaba sucia y disuelta. Era una pena, para mí, ver el carácter efímero de la nieve en Granada......
Luego he recorrido las lujosas nieves de los Alpes, las entrañables nieves de las "montanyas regaladas", que así denominaba Mosen Cinto Verdaguer a los ardientes Pirineos de la Atlántida, pero nunca esas nieves me provocaron ni me provocan esa emoción que me provocaban las nevadas granadinas de mi infancia...tan escasas, tan efímeras.... y es porque la belleza de lo efímero es algo parecido a la vida, que pasa sin darte cuenta...
Por cierto, que esta mañana escuchando a un cronista de Catalunya Radio relatando los tiempos en que la gente tomaba el ferrocarril para ir a esquiar a La Molina ( lo de Baqueira Beret fué un invento hortera de unos madrileños ) decía que aunque eran todos catalanes...todos ellos hablaban castellano....
Tempus fugit.....
Saludos
Cita
Miguelbilbao
Una vez más, ameno relato. Un placer.Cita
Dinosaurius.-park
Ahora me tocaría estar echando la siesta, pero como decía el emperador de Pekín en la ópera Turandot, nessun dorma !!
Porque no se puede dormir ante esta nevada que en estos momentos está cayendo en Sierra Nevada e incluso en Granada
Un año más de nieves, las nieves de mi vida. Incluso cuando me muera, si mis hijos cumplen mi última voluntad seguiré disfrutando de las nieves de Sierra Nevada y de Granada
Vivía en la Plaza de Fortuny, en el Realejo, y cuando hacía mucho frío siempre esperaba que amaneciera nevando, porque la nieve ha sido la gran ilusión de mi vida.
Al despertar y ver que el gallo de la vecina de la casa de al lado no había cantado, abría los postigos y veía los tejados nevados
Se notaba un silencio amortiguado por la nieve. Mi madre venía a despertarme, aunque yo ya estaba despierto, y esperando salir a la calle para subir a la escuela al Albayzín. Mi madre me ponía unos chanclos de la marca Pirelli sobre las zapatillas de paño ( eso si son unos buenos apreski, y no lo que venden ahora tan caros!), ya demás una boina (sería por apellido Arana de mi abuelo paterno), y nada más salir a la calle contrastaba mi alegría con el miedo de la gente que iba a su trabajo, cabreada y tiritando. Y es que la nieve no se ha hecho para los ciudadanos. En las ciudades provoca auténticos problemas
Subir la Calderería, la Cuesta del Aljibe de Trillo hasta la Plaza del Abad donde estaba mi escuela era un ejercicio de montañismo alpino parecido a la subida al Veleta. Las heladas piedras de las calles y la nieve pisoteada por lo que bajaban, con algún resbalón y consiguiente caída hacían peligrosa la aventura, que merecía la pena. Porque ese día no había clase, y el maestro D. Manuel, nos llevaba a disfrutar de la nieve en la Golilla o Monte Sombrero, después de comprarnos unas jayuyas en el la panadería Ayuso de la calle Panaderos.
Toboganes sin trineo, a pleno culo de pantalón de pana ( y sin plásticos ), peleas de bolas de nieve contra los "coreanos", que así llamábamos a los habitantes de Haza Grande, la población más próxima al lugar de nuestro disfrute, y luego vuelta a la escuela, empapados, para volver a Granada por la Calderería, donde la nieve ya estaba sucia y disuelta. Era una pena, para mí, ver el carácter efímero de la nieve en Granada......
Luego he recorrido las lujosas nieves de los Alpes, las entrañables nieves de las "montanyas regaladas", que así denominaba Mosen Cinto Verdaguer a los ardientes Pirineos de la Atlántida, pero nunca esas nieves me provocaron ni me provocan esa emoción que me provocaban las nevadas granadinas de mi infancia...tan escasas, tan efímeras.... y es porque la belleza de lo efímero es algo parecido a la vida, que pasa sin darte cuenta...
Por cierto, que esta mañana escuchando a un cronista de Catalunya Radio relatando los tiempos en que la gente tomaba el ferrocarril para ir a esquiar a La Molina ( lo de Baqueira Beret fué un invento hortera de unos madrileños ) decía que aunque eran todos catalanes...todos ellos hablaban castellano....
Tempus fugit.....
Saludos
No me extraña tu afición por la montaña...desde el Realejo al Albaycin hacia la escuela es labor de escaladores.
Arana...Sabino, vena vasca de pura raíz. Fundador del Partido Nacionalista Vasco en el siglo IXX.
Siento decirlo..pero defendía tanto la "raiz" que rozaba el racismo...por cierto, sus partidarios y afinesllamaban " coreanos" a los llegados del sur y otras latitudes. Afortunadamente ese proceder ha cambiado o cuando menos reducido.
La belleza de Granada Nevada supera a la de secano, adornada con esa imponente mole montañoso cuán manto blanco arropandola.
Insisto, un placer, Dino.
Cita
Miguelbilbao
Una vez más, ameno relato. Un placer.Cita
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Ahora me tocaría estar echando la siesta, pero como decía el emperador de Pekín en la ópera Turandot, nessun dorma !!
Porque no se puede dormir ante esta nevada que en estos momentos está cayendo en Sierra Nevada e incluso en Granada
Un año más de nieves, las nieves de mi vida. Incluso cuando me muera, si mis hijos cumplen mi última voluntad seguiré disfrutando de las nieves de Sierra Nevada y de Granada
Vivía en la Plaza de Fortuny, en el Realejo, y cuando hacía mucho frío siempre esperaba que amaneciera nevando, porque la nieve ha sido la gran ilusión de mi vida.
Al despertar y ver que el gallo de la vecina de la casa de al lado no había cantado, abría los postigos y veía los tejados nevados
Se notaba un silencio amortiguado por la nieve. Mi madre venía a despertarme, aunque yo ya estaba despierto, y esperando salir a la calle para subir a la escuela al Albayzín. Mi madre me ponía unos chanclos de la marca Pirelli sobre las zapatillas de paño ( eso si son unos buenos apreski, y no lo que venden ahora tan caros!), ya demás una boina (sería por apellido Arana de mi abuelo paterno), y nada más salir a la calle contrastaba mi alegría con el miedo de la gente que iba a su trabajo, cabreada y tiritando. Y es que la nieve no se ha hecho para los ciudadanos. En las ciudades provoca auténticos problemas
Subir la Calderería, la Cuesta del Aljibe de Trillo hasta la Plaza del Abad donde estaba mi escuela era un ejercicio de montañismo alpino parecido a la subida al Veleta. Las heladas piedras de las calles y la nieve pisoteada por lo que bajaban, con algún resbalón y consiguiente caída hacían peligrosa la aventura, que merecía la pena. Porque ese día no había clase, y el maestro D. Manuel, nos llevaba a disfrutar de la nieve en la Golilla o Monte Sombrero, después de comprarnos unas jayuyas en el la panadería Ayuso de la calle Panaderos.
Toboganes sin trineo, a pleno culo de pantalón de pana ( y sin plásticos ), peleas de bolas de nieve contra los "coreanos", que así llamábamos a los habitantes de Haza Grande, la población más próxima al lugar de nuestro disfrute, y luego vuelta a la escuela, empapados, para volver a Granada por la Calderería, donde la nieve ya estaba sucia y disuelta. Era una pena, para mí, ver el carácter efímero de la nieve en Granada......
Luego he recorrido las lujosas nieves de los Alpes, las entrañables nieves de las "montanyas regaladas", que así denominaba Mosen Cinto Verdaguer a los ardientes Pirineos de la Atlántida, pero nunca esas nieves me provocaron ni me provocan esa emoción que me provocaban las nevadas granadinas de mi infancia...tan escasas, tan efímeras.... y es porque la belleza de lo efímero es algo parecido a la vida, que pasa sin darte cuenta...
Por cierto, que esta mañana escuchando a un cronista de Catalunya Radio relatando los tiempos en que la gente tomaba el ferrocarril para ir a esquiar a La Molina ( lo de Baqueira Beret fué un invento hortera de unos madrileños ) decía que aunque eran todos catalanes...todos ellos hablaban castellano....
Tempus fugit.....
Saludos
No me extraña tu afición por la montaña...desde el Realejo al Albaycin hacia la escuela es labor de escaladores.
Arana...Sabino, vena vasca de pura raíz. Fundador del Partido Nacionalista Vasco en el siglo IXX.
Siento decirlo..pero defendía tanto la "raiz" que rozaba el racismo...por cierto, sus partidarios y afinesllamaban " coreanos" a los llegados del sur y otras latitudes. Afortunadamente ese proceder ha cambiado o cuando menos reducido.
La belleza de Granada Nevada supera a la de secano, adornada con esa imponente mole montañoso cuán manto blanco arropandola.
Insisto, un placer, Dino.
Cita
Dinosaurius.-park
También metíamos piedras dentro de las bolas de nieve....
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nico52
Admirado Dino, permíteme la osadía de la confianza.
Me encantan estas historias, reflejan la realidad de unas vivencias infantiles/juveniles,
que ahora a nuestros años, sus recuerdos son de total felicidad.
Allá por 1.952 yo también nací en el Realejo y hasta los casi 19 años, mi vida transcurrió por ese mundo.
Ahora alejado de mi querida Graná, aunque la visito tanto como me es posiblle (4/6 veces al año)
siempre que leo algo en referencia, es inevitable esa nostálgia.
Gracias por esos report, por los de Miguelbilbao y por los de otros tantos que sigo con especial interés.
Un saludo.
Cita
Dinosaurius.-park
He ido mucho a Sanlucar y donde más me gustaba estar era en una estrecha taberna situada en una esquina, donde apenas cabia nadie. Todos en la calle, sudando en verano, y refrescándonos con manzanilla, langostinos y tortitas de camarones....
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