Charles Kashiwa de 23 años y residente en Denver; Russell Francis de 51 años y Adam Francis de 21, padre e hijo y ambos residentes en Beaconsfield, Reinio Unido, comparecieron por separado ante el Juez el pasado martes para explicar sus motivos. Ellos afirmaron que no vieron la cuerda, y que no sabían que eso significaba que era ilegal esquiar a partir de ese punto. En Europa una cuerda suele significar el límite de las instalaciones de esquí y de las responsabilidades de la estación.
El Juez los acabó multando con 250 dólares, aunque la pena administrativa podía haber sido de 1.000 dólares a cada uno. Los tres fueron acusados de saltarse una cuerda en la zona de Aspen Highlands el Domingo, y dos días después ya estaban en el Juzgado y con una multa impuesta, que deberán pagar para poder salir del país.