Hace unos días saltaron todas las alarmas cuando la estación de esquí de Loge des Gardes anunció que no podía abrir su temporada este próximo 5 de julio tal como tenia programado. Con tanto cierre de centros invernales en Francia que se están viendo estos dos últimos años, todos pensaban que estaban ante un abandono más.
Y no hubiera extrañado a nadie. A ver, la estación tiene la base a poco más de 1.000 metros y apenas supera los 1.100 de cota mázima. 70 metros de desnivel esquiable en cinco pistas según su mapa. Y esto en el centro de Francia, a cientos de kilómetros de los Alpes. Que ese pequeño complejo invernal esté ahí es todo un milagro que solo se explica por la tenacidad de sus distintos propietarios.
Los primeros remontes, un par de telesquís, se colocaron a finales de los años '50. Por aquella época Francia estaba todavía en plena reconstrucción tras la Segunda Guerra Mundial. Todavía sin graneds autopistas que atravesaran el país y solo estrechas carreteras, el que quería esquiar tenía que buscarse algún sitio no muy lejos de casa. Así que Loge des Gare supo hacerse un hueco en los llamada montañas de la Madeleine cuyo punto más alto, los Pierre du Jour (1.164 metros) fueron conquistados por los dos telesquís al que unas décadas después se unió un tercer remonte del mismo tipo.
Aunque debe ser complicado perderse, Loge des gardes tiene su plano de pistas
Ya por entonces las condiciones meteorológicas eran impredecibles. Unos inviernos la nieve llegaba antes, otros más tarde. Tampoco era raro que algunas temporadas no hubiera podido abrir. En 2013 los propietarios la ponen a la venta a través de Leboncoin, un portal de anuncios clasificados. No parecía el mejor sitio, pero tuvo una respuesta rápida.
La compró por 550.000 euros un tal Philippe Chevrier junto a su mujer, que vieron en todo aquello un buen negocio si diversificaba la oferta con actividades en verano para toda la familia. Así crea un completo parque de ocio con muchas propuestas que se convierte rápidamente en un éxito.
De todas maneras es el esquí lo que da realmente dinero, así que un par de inviernos malos crearon graves problemas económicos a la estación de esquí, por lo que Chevrier anunciaba esta pasada Navidad que no iba a abrir más y que ponía Loge des Gares a la venta.
Y cuando todo el mundo pensaba ya que se unían a esa lista maldita de estaciones de esquí que están cerrando en Francia, apareció hace unas semanas un residente de la zona llamado Nicolas Rougert, que a sus 44 años dijo que venía con ideas frescas y que veía futuro en ese pequeño centro de esquí. No obstante quedaban muchos trámites por firmar y esperaba llegar a tiempo.
Así que cuando hace unas semana anunciaron que el 5 de julio no abrían la temporada, saltaron las alarmas. Muchos creyeron que Rougert se había echado atrás y que ahora si, les metían en la lista maldita.
Pero no. Poco después la estación explicó que acaban de recibir las llaves hacía escasamente tres semanas y que no habían llegado a tiempo para dejar las instalaciones a punto. Pero que lo harían pronto.
En una entrevista de France3, que quiso conocer la historia del hombre que se embarca en la compra de una estación de esquí a tan baja cota y en pleno 2025 con la que está cayendo en este sector, Rougert explicó que es emplado de una fábrica y que nunca ha trabajado en esta industria de la nieve pero que Loge des Gares es el sitio donde aprendió a esquiar tanto él como sus hijos
"Nací en Roanne y la Loge des Gardes es un poco parte de mi historia. Allí tomé mis primeras clases de esquí y mis hijos aprendieron a esquiar. Vi pasar las temporadas y cambiar de dueños. La estación evolucionó y ofreció cada vez más actividades para las cuatro estaciones, como tirolinas y arborismo.
Y entonces, un día, llegó el mountainboard. Este deporte híbrido, a medio camino entre el snowboard, el skate y la bicicleta de montaña, le cautivó. Tanto es así que se ofreció como voluntario en el complejo para promover esta actividad al aire libre.
Esto es el Mountainboard,el deporte que enamoró a Nicolas Rougert
Por eso conocía a los Chevrier, y fue este matrimonio el que le animó a comprar la estación. La transacción no se ha dado a conocer, pero se habla de unos cuantos cientos de miles de euros. Rougert de momento no dejará su trabajo, aunque aprovechará las vacaciones para dedicarse a tiempo completo al arranque de Loge des Gares, y quién sabe si algún día podrá ser esta su única actividad.
De momento trata ahora de abrir lo antes posible la temporada de verano. También quiere abrir en invierno. Los Chevrier no lo hicieron esta pasada temporada pese a que tenían nieve, pero los problemas económicos les impedieron ponerse en marcha. Se ha comprometido a abrir a partir de navidad y hasta el fin de las vacaciones escolares aunque haya poca nieve. Si no se pueden poner en marcha las pistas, al menos la zona de trineos y la cafetería para tomar un chocolate caliente,
"Pero el invierno será excepcional, no cuento con ello. Las temporadas de verano salvan ahora este centro. La idea es más bien continuar con el desarrollo de las actividades de verano, con una oferta de bicicletas de montaña y bloques de escalada que complementen el recorrido de aventura en las copas de los árboles, tirolinas, tubing (descenso en tubos inflables), scooters y karts de descenso. Pero no quiero abandonar el esquí porque es una de mis pasiones."
Con horarios de apertura más amplios en invierno, aunque es consciente de la crónica falta de nieve en las estaciones más bajas. Acaba de gastar entre 30.000 y 40.000 euros en el mantenimiento y reparación de los equipos, incluidos los tres remontes de la estación.
La ventaja de este tipo de estaciones de esquí es que sufren menos la competencia que en los Alpes. Con la más mínima nevada se llenan. Están solas en su “zona de influencia,
«Hay un potencial enorme. La Loge des Gardes está a solo treinta minutos en coche de Roanne y a una hora de Vichy. Hay una clientela local, apegada al sitio, en esta estación familiar donde muchos aprendieron a esquiar».
En definitiva, una historia feliz entre tanto cierre de estaciones de esquí!
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Loge des Gardes combina estación de esquí en invierno con parque de ocio en verano
