La nieve deja a Saas Fee y Zermatt y sus estaciones de esquí aisladas del mundo

Las intensas nevadas de esta semana en los Alpes por la tormenta Hans están dando muchos problemas a un buen número de poblaciones y estaciones de esquí de Francia y Suiza especialmente. Una cantidad de nieve muy poco habitual para esta época del año, cuando las montañas ya se estaban preparando para el deshielo, lo que ha provocado una fuerte inestabilidad y a su vez avalanchas de nieve. El peligro de aludes sigue siendo en gran parte de estos territorios de 5 sobre 5, y los ayuntamientos recomiendan encarecidamente que no se esquíe fuera de pistas.

La población más afectada es Zermatt, que hoy sábado continua aislada del mundo. Nadie puede entrar o salir de la población por el grave riesgo que hay de grandes avalanchas sobre la carretera a Täsch, que lógicamente también está cerrada. Y desde esta población tampoco se permite circular a ningún lado, pero al menos hoy a las 10.30h se ha podido poner en marcha un reducido servicio ferroviario hasta Visp por donde han podido salir los turistas que estaban alojados en este pueblo del Canton del Valais.

Los que están alojados en Zermatt, al menos han podido esquiar algo en los 10 kilómetros de pistas que se han podido habilitar. El resto está pendiente del control de aludes para poder ir abriendo más dominio esquiable. La conexión con Italia sí que está cerrada totalmente y nada indica que puede ponerse en marcha antes del fin de la Semana Santa. No hay datos de turistas que se hubieran quedado al otro lado de su frontera.

Si nada se tuerce, hoy parece podrá volver a ponerse en marcha el tren a Visp (hay una primera previsión para las 14.30h), por lo que muchos turistas hacían colas ya en la estación para poder coger asientos lo antes posible. No obstante, el  número de frecuencias es muy reducido, por lo que la previsión es que esta operación de evacuación se alargue durante todo el día. El primer tren desde Visp sale a las 14:11 y desde Zermatt a las 14:37.

Otro de los problemas a los que se enfrenta el Valais, es que las fuertes nevadas han puesto en estado de emergencia a gran parte de este cantón, y además de provocar importantes repercusiones en el tráfico ferroviario, también ha afectado a las redes eléctricas. De hecho, las líneas no pudieron soportar el peso de la nieve ni de los árboles caídos, lo que provocó un apagón total en el pueblo del Matterhorn. En Zermatt las tiendas de comestibles permanecieron abiertas gracias a generadores de emergencia y el polideportivo del pueblo se convirtió en un lugar de reunión de emergencia. Allí hay agua caliente para llevar y se puede cargar el móvil.

Donde están sin problemas de este tipo es el refugio de Monte Rosa (2.883 metros sobre el nivel del mar). "Aquí todo es prácticamente normal", explica a Blick el guarda del refugio Kilian Emmenegger. Este edificio está equipado con paneles solares en todo su perímetro y se considera un ejemplo de construcción autosuficiente. No les falta de nada: tienen electricidad, comida y "estamos calentitos", explica Emmenegger, quién sabe que ahora mismo no tendrá clientes, pero que debe estar preparado porque nunca se sabe cuándo aparecerá alguien.

Mejor parece que están las cosas en el Valle de Saas. Hoy poco a poco se ha podido ir abriendo algunos accesos a Saas Fee, aunque las precauciones siguen siendo máximas porque el riesgo de deslizamientos de nieve sigue siendo alto y se espera un deshielo significativo entre el sábado y el domingo. El peligro no está solo en las toneladas de nieve que pueden caer, sino en las rocas que arrastraría y, al haber nevado tanto en cotas bajas, se suma el riesgo de caída de árboles.

Otras instalaciones como el túnel de Grand-St-Bernard, no se abrirá como mínimo hasta el próximo viernes debido a una avalancha que ha inutilizado las instalaciones y una de las bocas de entrada. Todavía no es seguro que el personal llegue al sitio para comenzar las reparaciones. Hay muchos túneles y carreteras en estos momento en reparación, con circulación restringida o cortada totalmente.

Esta avalancha, que comenzó el jueves 17 de abril, dañó severamente la Galería Toules, que conduce a la entrada del túnel Grand-St-Bernard (foto tomada al día siguiente el viernes).