Musa de Playboy en 2024, actriz pornográfica e influencer gracias a sus más de 267.000 seguidores que tiene en Instagram, la brasileña Ravena Hanniely se ha hecho famosa también por haber gastado miles de dólares en varias cirugías plásticas con el objetivo de simular tener un cuerpo de atleta.
El pasado 18 de marzo estaba en Salamanca dentro de un pequeño viaje personal por España, cuando se enteró que no muy lejos de allí estaba la estación de esquí de Sierra de Béjar. Así que pensó que sería buena idea hacerse unas fotos en bikini sobre la nieve de la Covatilla. Lamentablemente aquellos días estábamos viviendo en nuestro país la sucesión de borrascas que tanta nieve nos dejó. Aún así, parece que Ravena Hanniely no se amilanó ante la meteorología, y en un "todo sea por unos likes", subió hasta la montaña para hacer su sesión de fotos.
Pero las cosas no salieron como pensó. Aunque ese día los cielos estaban despejados, la sensación de bajas temperaturas era muy acusada, llegando, seún cuenta ella, a los -10ºC. Este invierno ha habido varias influencers que se han lanzado a posar en bikini en la nieve, y ella no queria ser menos. Sin embargo, lo que comenzó como una propuesta estética terminó convirtiéndose en un shock: poco después de las fotos, Ravena necesitó recibir atención médica por la exposición al intenso frío:
"Crystais✨, no creerás lo que hice! Fui a hacer una sesión de fotos en bikini en la nieve, súper inspirada por algunos influencers extranjeros, pensando que sería solo una experiencia elegante... Pero, mira, el resultado fue bastante dramático: ¡terminé en sala de emergencias con un dolor real en el trasero por el frío de -10 °C! 😱❄️
¡En serio, mi trasero REALMENTE se congeló! 😂 ¿Alguien más se ha metido alguna vez en una situación absurda sólo para conseguir la foto perfecta? Realmente quiero saber si soy el único en esta loca misión para obtener el clic de mis sueños o si también tienes historias para compartir. ¡Intercambiemos estas experiencias! 💖📸"
Ravena dice que pasó mucho tiempo intentando ajustar la configuración, la iluminación y las poses hasta lograr el resultado ideal. Insistió, en bikini, en que la foto fuera más perfecta de lo debido. Fue entonces cuando empezó a perder sensibilidad, sobre todo en el trasero. "Estaba tan entumecido que empecé a desesperarme y fui directo a urgencias".
Ahora en recuperación, Ravena tomó el susto como una experiencia de aprendizaje,
"Nos entusiasmamos con las ideas y olvidamos los riesgos. Fue hermoso, sí, pero también muy peligroso. Esto es una advertencia para cualquiera que piense en seguir estas tendencias sin prepararse. Llegó el clic, pero también llegaron los problemas».
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Ravena Hanniely en una sesión de fotos en Salamanca donde y en Sierra de Béjar
