A finales del pasado mes de noviembre y tras la apertura de sobres, se adjudicó a Leitner la construcción e instalación del futuro Telecabina de Benasque que permitirá llegar hasta las pistas de esquí de Cerler cómodamente sentados en un transporte por cable, pudiendo dejar de esta manera el vehículo particular en el pueblo.
Al proyecto optaban dos empresas, pero Leitner fue capaz de ofrecer un presupuesto de unos 600.000 euros menos que su oponente. Ante dos marcas de contrastada solvencia, el Ayuntamiento de Benasque optó por la más económica.
Faltaba ahora la firma de ese contrato. Un trámite que se llevó ayer a cabo en el Ayuntamiento de Benasque al que acudieron los responsables de Teleféricos y Nieve S.L., empresa filial de Leitner en España que se encargará de toda la instalación propia del telecabina.
En cualquier caso los trabajos no podrán superar los 12,8 millones de euros por los que se adjudicó finalmente. Con ese dinero tendremos las dos terminales de salida y llegada, las 53 cabinas de 10 asientos cada una y las 15 pilonas para sustentar el cable. El recorrido se hará en menos de seis minutos, un tiempo notablemente inferior a hacerlo en coche por carretera y además el pasajero aparecerá en el aparcamiento de Cerler con botas y esquís puestos.
Según el Alcalde de Benasque, Manuel Mora, los trabajos deberían comenzar antes de acabar este primer trimestre de 2025. Es decir, que antes del día 31 de marzo deberíamos ver los primeros movimientos de construcción.
Un telecabina hoy en día, salvo problemas de índole mayor, se puede construir en unos pocos meses. Así que teniendo en cuenta el tiempo que hace que se adjudicó y que las primeras obras pueden comenzar en un par de meses y medio, no debería haber mayor problema para poder subirnos en este nuevo telecabina de Benasque el próximo mes de diciembre o incluso antes, pero siempre a tiempo para el Puente de la Inmaculada.
Quedarán dos flecos por resolver. Uno es el recurso que Asociación SOS Ribagorza dijo a mediados de octubre que quería interponer contra este telecabina. El otro, y no menos importante, es quién asumira el coste de subirse a este remonte. Si el pasajero pagará un ticket aparte o si al menos para esquiadores y snowboarders estará incluido en el forfait de la estación de Cerler.