Los Miembros del Consejo de la FIS aprobaron ayer en una reunión extraordinaria la obligación de llevar airbag desde esta misma temporada para las disciplinas de velocidad en la Copa del Mundo de esquí alpino. Corredores y corredoras deberán incluir este material en Super-G y Descenso.
La medida había sido aprobada en el Congreso FIS de Portoroz (Eslovenia) organizada el pasado mes de junio, aunque se le puso fecha a la obligatoriedad. Pero la fuerte conmoción que creó el fallecimiento de la jovencísima esquiadora italiana Matilde Lorenzi por una grave caída el pasado 29 de octubre mientras entrenaba en Val Senales, ha impulsado poner en marcha la medida desde esta misma temporada. En cun comunicado, el el Secretario General de la FIS, Michel Vion ha asegurado que
"Para la FIS, la seguridad de los corredores y corredoras es lo primero y no es negociable. Esto ha estado en lo más alto de nuestra agenda, y es por eso que establecimos la Unidad de Salud del Atleta en 2023, por ejemplo.
La adopción de airbags es parte de un enfoque más amplio que involucra todos los factores que pueden minimizar el riesgo de lesiones graves: desde el conocimiento sobre las condiciones meteorológicas y la configuración de la pista hasta el equipamiento como la ropa interior resistente a los cortes y las fijaciones inteligentes.
Adoptaremos cualquier medida que se demuestre que ayuda a proteger la salud y el bienestar de los atletas”.
Como la obligación es para las disciplinas de velocidad, la primera vez que se obligará a equiparse con airbag será el próximo 6 de diciembre, cuando en Beaver Creek se organiza un Descenso masculino. Y se volverá a ver al día siguiente cuando hay programado un Super-G.
Las corredoras deberán esperar hasta el 14 de diciembre, cuando también en Beaver Creek hay programado un Descenso. Y deberán volver a ponérselo al día siguiente para correr el Super-G programado.
Queda por tanto un mes por delante para aquellos corredores que quieran presentar alguna alegación que le evite ponerse el airbag. Aunque la FIS ya homologó un modelo a mediados de noviembre de 2014, no lo hizo obligatorio. Muchos corredores y corredoras no lo usaban porque aseguraban que les podría restar aerodinámica en un deporte en que cada centésima cuenta. Los hay que también acusaron a un problema de coste económico para no llevar esta equipación extra. Sí lo suelen usar más em entrenamientos , pero cuando llega el día de la competición no se lo ponen.
El airbag en las carreras de velocidad de la Copa del Mundo se propuso en 2011. Entonces la FIS contactó con la empresa italiana Dainese para desarrollar uno similar al que fabrican para el motociclismo. Pero el proceso para la homologación no fue sencillo. Tres años después, en octubre de 2014 se presentó un modelo aprobado por la FIS, pero pocos días después la Federación se echó atrás porque el sistema no seguía las reglas del material.
Al parecer la posición del generador del gas que hace que se infle la bolsa de aire perjudicaba la aerodinámica de los corredores que llevasen esta equipación. Tras algunos ajustes, finalmente a mediados del mes de noviembre de ese mismo 2014 la FIS homologaba el airbag para corredores de la Copa del Mundo de esquí alpino.
Según informó entonces la FIS, un sistema de sensores con tres acelerómetros y tres giroscopios que se comunican con el GPS 1.000 veces por segundo determina cuándo un esquiador está a punto de caer y activa el airbag.
Dainese, como marca que inició este proyecto en motocislismo y luego en el esquí, se ha posicionado como proveedor número 1 de estos airbags. Pero Rossignol e In&Motion también han desarrollado sus propios modelos.
Otra de las medidas de seguridad que seguramente se impondrán a corto plazo es el de ropa interior “anti-corte”. Se trata de evitar así las graves laceraciones como las que se vieron en el nouego Aleksander Kilde Aamodt tras sufrir una grave caida en Wengen el pasad mes de enero de la que todavía se está recuperando y que de hecho, le ha dejado sin poder competir esta temporada de Copa del Mundo de esquí alpino 2024-2025.
Para poder usar implantar esta ropa interior anti-cortes, el servicio médico de las estaciones de esquí donde se realicen las carreras, también deberán estar equipados con tijeras especiales y adecuadas en caso de una intervención de emergencia.