Tras la puesta en marcha de los vuelos de Madrid y de Palma es una cuestión recurrente la de hacia dónde debe crecer el aeropuerto Andorra – la Seu y qué destinos serían más atractivos. Málaga es la gran ciudad con mayor crecimiento de poblaciòn de Andalucía, y apunta a ser la de más habitantes de esta comunidad en pocos años.
En una entrevista con el periodista y consultor jurídico-aeronáutico, Javier Ortega Figueiral, el director comercial de Air Nostrum, Juan Corral, pese a que incide en que lo que quieren es consolidar estos dos destinos, sí señala que “un Andorra-Málaga puede ser una ruta interesante”. Hay un pero:
"Es un vuelo que ahora mismo implica un alto consumo de combustible lo que, sumado a la limitación en el número de pasajeros por el peso al despegue, encarecería los billetes.
De todas formas Aeroports de Catalunya (dependiente de la Generalitat) tiene previsto licitar la instalación de carburante en el aeropuerto de la Seu, lo que mejorará el radio de alcance de los vuelos y permitirá analizar la posibilidad de volar destinos más lejanos si se reposta combustible en la Seu.
La compañía sigue monitorizando siempre la evolución de la demanda en busca de nuevas oportunidades".
El aeropuerto de la Seu es una infraestructura con unas condiciones operativas que lo hacen singular. En este sentido, y teniendo en cuenta los distintos destinos en los que trabajan, Corral manifiesta que
"no hay ningún aeropuerto exactamente igual que Andorra - la Seu, aunque hay aeropuertos que tienen limitaciones operativas similares".
Y pone como ejemplo a San Sebastián, donde Air Nostrum voló muchos años, o Melilla, que “presenta singularidades importantes”. Y reivindica la experiencia de la compañía para operar en aeropuertos con estas peculiaridades:
“Air Nostrum es la compañía con mayor experiencia en este tipo de aeródromos. Somos operadores de pequeños aeropuertos y con baja densidad de tráfico. De hecho, como aquí en la Seu, también operamos en solitario vuelos regulares en Badajoz, La Rioja, Melilla o León”.
El director comercial de Air Nostrum valora satisfactoriamente que después de años en los que el aeropuerto “no ofrecía los requisitos operacionales” que se necesitaban, los esfuerzos conjuntos de la Generalitat, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, la Dirección General de Aviación Civil y el Gobierno de Andorra hicieran posible que “fuera operativo” para compañías como Air Nostrum.
“Después de treinta años de experiencia en la inauguración de rutas y con más de cien millones de pasajeros transportados, en Air Nostrum teníamos claro que el estreno de una nueva ruta en el aeropuerto de Andorra - la Seu (una infraestructura que llevaba 37 años sin vuelos regulares) requería de apoyos, como todas las rutas en su lanzamiento”.
Otro de los 'debates', alrededor del aeropuerto es el tipo de aeronaves que se utilizan. Corral defiende que
"el ATR 72-600 es un avión que trabaja muy bien en este tipo de aeropuertos y estamos convencidos de que es lo mejor de su clase para operar en Andorra - la Seu gracias a sus características de vuelo. La empresa ATR, (Airbus), lo fabrica en Toulouse y la variante -600 incorpora la tecnología más avanzada.
La instrumentación y las pantallas de la cabina de pilotos son una derivación de las que la empresa Thales diseñó para el Airbus 380 y sus motores tienen un 10% más de potencia sobre los de la versión anterior. Esto hace especialmente adecuado este modelo para la operación en pistas cortas y aeropuertos de montaña, por tanto es el mejor aparato para operar actualmente en la Seu."
Y haciendo una reflexión más global, y que hoy en día está plenamente vigente, la del impacto de la navegación aérea sobre el medio ambiente, defiende que la aviación comercial es
“un sector totalmente comprometido con la sostenibilidad que ha reducido un 80 % las emisiones por pasajero en los últimos 20 años.
El avión ha sido hasta este año el único medio de transporte colectivo que pagaba al sistema de compensación ETS (Emisiones Trading System) de la UE. Y eso que somos únicamente un 2% de las emisiones de gases de efecto invernadero frente al 25% del transporte por carretera, por poner un ejemplo
En este sentido, las aerolíneas están realizando un gran esfuerzo para la descarbonización.
Y añade que el sector aeronáutico tiene "la clave" gracias al SAF, un biocarburante que puede reducir en un 80% las emisiones durante el ciclo de vida.
El problema es que la producción de SAF es muy reducida y su precio es entre 3 y 5 veces más caro que el del queroseno. Y aboga, también, por que España se convierta en líder europeo en la producción de este biocombustible.
“Si se hicieran entre 30 y 40 plantas, esto sería suficiente para descarbonizar nuestra aviación comercial y se generarían 56.000 millones de euros de PIB y 270.000 nuevos puestos de trabajo según los datos que tiene Iberia de diferentes fuentes muy solventes del sector”.