Las lluvias torrenciales de este fin de semana se llevaron por delante gran parte de la RN134 entre Urdos y el túnel del Somport. Como consecuencia las autoridades francesas cerraron el túnel. La decisiòn supone un problema para la economía de los dos valles, tanto del lado español como el francés.
La Asociación Turística del Valle del Aragón y la Oficina de Turismo Haut Bearn en Olorón, han sido unánimes en calificar la situación como "catastrófica". Y es que aunque ahora en otoño el tráfico de turistas baja notablemente respecto al verano y la temporada de esquí, se esperaba la llegada de residentes de Holanda o de Bélgica.
El Valle de Aspe (Francia), vecino al del Aragón por Somport, tiene cada vez más presencia en la parte española, aquí traen sus ferias de artesanía, de quesos o la última ‘noche gastronómica’ en la Ciudadela de Jaca, por al que pasaron cerca de 10.000 personas.
Desde el Valle del Aragón aseguran que el movimiento de visitantes que llegan desde el otro lado del Pirineo cada vez es mayor y con la carretera cerrada el otoño será especialmente duro. Si la previsión alcanza los seis meses como manejan las previsiones, se llegaría a la temporada de esquí con un auténtico problema por lo que se pide un paso alternativo.
De momento con Bielsa y Somport cerrados, el Portalet es única vía que permite pasar a Francia.
El alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez, mostraba este lunes su preocupación por el corte de la carretera y pedía urgencia al inicio de las obras para recuperar el tráfico.
"Los daños son importantes pero se debe empezar ya las obras para restablecer el paso, y desde España mostrar nuestro apoyo a Francia. Desde el Ayuntamiento de Canfranc ya se han tenido conversaciones con el delegado del Gobierno y representantes europeos al ser este paso un eje transpirenaico -Ruta Europea E7".
Seis meses de obras como máximo
Este domingo, la Prefectura de Pyrénées-Atlantiques aconsejaba a los camioneros que utilizan el túnel del Somport que vayan por el paso fronterizo de Irún y Hendaya, en el País Vasco, ya que la carretera ha quedado cortada por el lado francés por desprendimientos, y estará así al menos seis meses.
En un comunicado, la delegación del Gobierno de este departamento avanzaba que en las próximas semanas se analizará la situación generada por los desprendimientos de tierra, que se llevaron varias decenas de metros de carretera montaña abajo, para evaluar las obras que serán necesarias.
Fuentes de la Prefectura citadas por medios franceses precisaron que esas obras durarán "como mínimo seis meses".
Los efectos de las recientes tormentas también causan inquietud en las estaciones de esquí de Astún y Candanchú, que preparan la campaña invernal 2024-2025 y temen que pueda haber un descenso en el número de visitantes franceses ante el corte registrado en la RN-134. El portavoz de Candanchú, Lucas Sáez ha asegurado al Diario del Alto Aragón que
“Obviamente, es un acceso importante para nuestra estación. Estamos pendientes de ello, ya que es una vía que atrae bastantes visitantes. Esperemos que se pueda arreglar el problema lo antes posible."
En el peor de los casos, el paso a y desde Francia quedaría cerrado hasta la recta final de la campaña de esquí, hacia el mes de marzo.
La repercusión del corte ya se deja notar entre los alojamientos. María Bellosta, directora del Hotel Royal Hideaway Hotel ubicado en lo que era la antigua estación de Canfranc, lamentó también en el Diario del Alto Aragón que
“un porcentaje de clientes franceses canceló sus reservas para los próximos días. Es evidente que, al no haber alternativa de conexión, hay un impacto económico y en reputación.
A esto hay que añadir que algún trabajador del hotel vive en Francia y no pudo llegar a casa, así que tenemos que alojarlo mientras esto no se solucione”.