Advierto de antemano que este es un comentario MUY LARGO.
Sobre el asunto de la mujer en el deporte hay mucho relato falaz. También sobre la mujer y otros ámbitos, así como tantos otros asuntos políticos-ideológicos, especialmente desde que las narrativas y relatos se han erigido en instrumentos para crear realidades a la carta e interesadas. Siento tanto rollo, pero es el punto de partida. Con respecto a la noticia (o a lo que se nos explica en ella) algunas cuestiones importantes:
Previa: además de que, como se comenta en ella, parece ser que el esquí alpino es un deporte aproximadamente “paritario” en premios, cuantías, patrocinios, etc. Lo es también en práctica popular no competitiva. Y ambas cosas, competición y práctica ociosa, las lleva el esquí en su “ADN” desde sus orígenes en Noruega a finales del siglo XIX y su implantación y evolución posterior en los Alpes a principios del siglo XX. En eso, precisamente, ha mostrado una historia ejemplar.
Que eso no se traduzca en “cuotas” de puestos puede deberse a múltiples motivos, fundamentalmente culturales o de intereses personales, proyecto vital, etc.
El Artículo señala que: “[…]. Además, se ha detectado que las jóvenes esquiadoras abandonan la competición y entrenamientos en mayor número y mucho antes que los esquiadores”. El abandono deportivo en la adolescencia está estudiado hace décadas como un problema sistémico (en el deporte en general) cuyas variadas causas tienen que ver con los dos saltos educativos importantes (primaria-secundaria y secundaria-bachillerato) que en muchos casos llevan añadido cambio de centro escolar; con el interés por los actuales “ritos socioculturales de madurez” propios de la pubertad y adolescencia (amoríos, alcohol, drogas, fiesta, gregarismo de pandilla, pérdida de los adultos (progenitores, profesorado, entrenadores…) como líderes de referencia, etc. Esto es algo conocido y, precisamente, estudiado en los módulos de formación de entrenadores en España. Que eso afecta más a chicas también se sabe, y que es general, no específico del esquí. De lo que no se tienen certezas es de las causas, que, por lo general son supuestas, complejas y multifactoriales (sociológicas, psicológicas (especialmente motivación), etc.). Al menos, según se incluye en la noticia, parece que reconocen que no saben las causas, pues pretenden investigarlas en el punto 1. “Investigar los obstáculos que enfrentan las niñas y las mujeres en el esquí alpino primero como deportista y luego como entrenador […]” solo que no es una cuestión de obstáculos (que, precisamente, en el esquí alpino actual son pocos y los mismos para ambos sexos, y se suelen poder enmarcar dentro de los geográficos, económicos y de motivación), sino de interés en seguir desarrollando una carreta como técnico, gestor deportivo, etc.
Otra cita literal “La ausencia de entrenadoras se traduce en una falta de modelos a seguir para las niñas, lo que contribuye a que abandonen este deporte”. Esto, directamente, es una conjetura. Lo de los modelos y “referentes” se ha convertido en una frase hecha sin valor científicamente demostrado, en una suposición tan falta de veracidad como otras muy populares “si se hace deporte se evitan las drogas, el alcohol y las malas compañías”, “los valores inspirados por del deporte son intrínsecamente buenos”, etc. Son eslóganes muy periodísticos, políticos y populares, pero no tienen respaldo de investigación detrás y, de hecho, cuando se investiga, se comprueba que fallan con frecuencia y no son generalizables.
Otra “Uno de los principales obstáculos para la igualdad de género en el esquí alpino es cómo se forma y contrata a los entrenadores”. Ignoro cómo se contrata a los entrenadores (quiero suponer que a dedo en base a currículo), pero sí conozco bien como se los forma en España, que es mediante las titulaciones de técnicos deportivos de régimen especial (EDRE), con el eventual añadido de cursos de especialización de libre configuración pública, privada o federativa. Dichas titulaciones son de libre acceso para los géneros, únicamente con exigencia previa de titulaciones educativas genéricas (ESO y/o Bachillerato), las cuales son “unisex”, y prueba de acceso específica (con diferentes baremos para mujeres y para hombres). Si no se matriculan más será porque no quieran. Cuantitativamente, las mujeres españolas muestran claras preferencias universitarias. A favor de carreras relacionadas con sanidad, educación, comportamiento, biología, derecho, filologías… algo que no le preocupa a nadie. Lo que parece preocupar es que muestren poco interés por las tecnológicas. Pero esa misma preocupación no se muestra porque haya estudios con cuotas mínimas de chicos (¿?). El estado de la cuestión con respecto a estudios relacionables con el entrenamiento deportivo (CAFID, TAFAD y EDRE), la última vez que lo repasé (hará unos cinco años), mostraba entre un 65-35% de preferencia por parte de hombres que de mujeres. Pero, a ver si se nos mete en la cabeza a todos que las cifras no deberían NUNCA justificar que a la gente no se la deje estudiar lo que quiera, guste o interese, y que haya que empeñarse en modificar las conductas de libre elección para maquillar estadísticas.
Otra afirmación “La formación de los instructores y entrenadores de este deporte de nieve, insiste en el aspecto técnico del esquí, dejando atrás importantes habilidades y conocimientos que se supone se aprenderán luego en pistas”. No es el caso en España, en donde han de cursar un Bloque Común para todos los deportes con importante carga lectiva relacionada con la psicología, pedagogía, aprendizaje motor, sociología, medicina, fisiología, legislación, organización deportiva, etc. Otra cosa es con qué seriedad lo haga cada centro de formación y cuánto se lo controle la correspondiente inspección educativa. Los Bloques de Formación Práctica y Bloque Específico, incluirían (según el nivel) organización de eventos, etc.
“Sin embargo, esto se traduce en una práctica de cooptación y, en consecuencia, en la perpetuación del “club de chicos””. La afirmación es gratuita y debería ser demostrada (podrá haber casos, pero habría que identificarlos, cuantificarlos y, si acaso, denunciarlos”).
De los temas propuestos abajo añadir:
“Deportes de invierno y cambio climático”. Sin comentarios.
“Ajuste de botas y preparación de esquí”. Se corresponde con parte del Bloque Específico.
“Gestión, liderazgo, comunicación, competencias digitales”. Se corresponde con partes del Bloque Común.
“Oficiales Alpinos (Director Técnico, Director de Carrera, Jefe de Carrera)” y “Ética. Preparación de pistas de esquí y organización de carreras”. Imagino que parcialmente puede que esté relacionado con el Bloque Específico (según qué nivel) pero no me he tomado la molestia de revisarlo. Sin comentarios.
“Bienestar de los deportistas (salud mental, salud física, nutrición)”. Contemplado en los Bloques Comunes.
Y, efectivamente, habría mucho más de lo que hablar. La concesión de la subvención tiene toda la pinta de ser un caso de discriminación positiva. Personalmente opino que ello sigue siendo discriminación, y gestionar a golpe de discriminaciones (positivas o neutras) va generando una espiral de injusticias y necesidad de compensaciones y reparaciones que acaban quedando a potestad de quienes tengan en mando, generando redes clientelares, dependencias, discriminaciones reales, etc. Y mucho empoderamiento político y gubernamental. Mal asunto.
No critico al transmisor de la noticia, sino al contenido y trasfondo de la misma.