En pelotas para salvar la estación de esquí de Sambuy

Fotos de esquiadores/as desnudos/as, pero con los esquís puestos y un cartel de cartón que tapa estratégicamente, recorren las redes sociales de la Alta Saboya desde principios de la semana pasada. Tratan de llamar la atención para protestar contra el posible cierre de la estación de esquí de La Sambuy donde el mal invierno de este año parece que ha dado la 'estcada' definitiva a unas cuenta que ya iban mal desde hace algunas temporadas. 

Para unificar la protesta y hacerse ver, crearon un grupo en Facebook "Sans ma Sambuy, je suis à poil." (sin mi Sambuy estoy desnudo/a).

Con una magnífica panorámica del lago de Annecy, pero con una cota muy bajas que parte de los 1.150 metros de la base para alcanzar los 1.850 m de altitud, la estación de esquí de La Sambuy sufre de nieve a principios de temporada, especialmente esta que las nevadas llegaron tan tarde.Y eso que su orientación norte le permite mantener bien la nieve e incluso es un punto de freeride muy conocido por los aficionados locales.

Pero tampoco ha podido hacer frente a la competencia de otras estaciones que tratan de abrir antes cada año y ofrecen más servicios. Las cuentas reflejan un déficit de 450.000 euros en 2022 y según el ayuntamiento de Faverges-Seythenex (Alta Saboya), que gestiona la estación, las deudas aumentarán en 50.000 euros más esta temporada por culpa del retraso en las nevadas.

Con solo 10 pistas, un veteranísimo telesilla de 1989 y a apenas 75 kilómetros de las grandes estaciones de esquí de Chamonix, la competencia es feroz.

Ante esta situación, un grupo de simpatizantes y clientes crearon la asociación "Tous ensemble pour la Sambuy". Proponen las soluciones clásicas que siempre se ponen sobre la mesa: desestacionalizar y apostar por el esquí de montaña. También hacer aparcamiento de pago. En este caso sería por una buena causa!.

Pero el alcalde no está muy de acuerdo. Argumenta que si fuera tan rentable como dicen desde Tous ensemble pour la Sambuy, alguna empresa invertiría dinero, pero la realidad es que no hay interesados, y cree que al final será el Ayuntamiento quién acabe pagando la factura y que la solución pasa por una estación sin remontes.

Así que ahora se ha creado una batalla entre partidarios y detractores del Ayuntamiento. Ya sean locales o de otras regiones, han mostrado su apoyo a la estación posando desnudos con un letrero que muestra un mensaje de apoyo. "La Sambuy es toda nuestra vida, ¡no la toques!". Otros esquiadores desnudos de París, Normandía o Bretaña dibujan corazones para protestar contra el cierre. El futuro de la Sambuy se decidirá este mes de abril.