El Presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, pide al Gobierno de Aragón una prórroga en la ejecución del telecabina que deberá conectar las estaciones de esquí de Astún y Formigal. En una carta remitida al ejecutivo autonómico, asegura que es muy complicado cumplir los plazos marcados por la Unión Europea para recibir los 26 millones de financiación.
El principal escollo es la aprobación del Plan de Interés General de Aragón (PIGA). Se pone como ejemplo el plazo que supuso aprobarlo para la plataforma logística PLAZA en Zaragoza. Se empezó a pedir en 2020, y no fue hasta el mes de marzo de 2022 cuando por fin se aprobó.
Para empezar a mover los trabajos del nuevo telecabina de unión de las estaciones de esquí de Astún y Formigal, antes se tiene que tener aprobado este PIGA, y Aramón recién la ha pedido, tal como informó ayer el holding de la nieve.
En el caso de este telecabina, para cumplir los plazos marcados por Europa, se debería haber ejecutado un 50% al finalizar 2024, y un 75% en 2025. Unos plazos que Miguel Gracia ve casi imposible de cumplir, porque además la fuerte controversia que está generando este proyecto amenaza con llevarlo a los tribunales de Bruselas. Si acaba prosperando la demanda judicial, corre el riesgo de dilatarse en el tiempo.
Europa concedió 26 millones de euros a través del Gobierno de España para este telecabina. En caso de no cumplir los plazos, caduca la financiación. Y si el dinero ya está en manos de los impulsores del proyecto, se debe devolver y además con intereses. Una situación que ahora con la subida de tipos, aún podría provocar fuertes pérdidas a las arcas públicas.
Por eso Gracia pide no coger ese dinero hasta que esté todo aprobado y seguros de que se va a poder llevar adelante y cumpliendo los plazos.
Según informa El Heraldo de Aragón, la carta venía acompañada de un informe firmado por tres técnicos de la Diputación (el interventor, la secretaria general y la jefa de servicio de Secretaría), que advierten que es pinión de los funcionarios, es
