El frente de borrascas anunciado para este final de semana ya ha entrado por Galicia, ha dejado sus primeras nevadas en las montañas de Asturias y León, y prosigue su camino hasta el este de la península. Las estaciones de esquí del Pirineo tienen puestas sus esperanzas en este frente que no solo puede dejar nieve, sino además ventanas meteorológicas para poder poner en marcha los aparatos de producción.
Desde hace unos días las estaciones ya empezaron a poner en marcha los sistemas de producción de nieve, pero desde la noche de este viernes la producción es más generalizada. En el Heraldo cuentan que Cerler se puso en marcha especialmente en las cotas bajas y que en Benasque, todavía más abajo, las temperaturas llegaron a alcanzar casi los -6ºC.
Hay que recordar que no se puede poner en marcha al mismo tiempo todos los cañones ya que dependen de la potencia de la sala de máquinas. Por eso el personal de producción de nieve va decidiendo qué ejes de la estación de esquí tienen prioridad. En general se suele comenzar por las lineas más bajas y comerciales para ir cambiando de sectores y subir las cotas, siempre y cuando no sople demasiado el viento a más altura.
La ausencia de nieve que hay en esta anómala temporada de esquí hace que en muchas estaciones de esquí se tenga que empezar prácticamente como los días previos a la Inmaculada o las navidades.
Dos días de nevadas
Los modelos económicos de los portales especializados, así como los que manejan los medios de comunicación confirman la llegada de este frente de nevadas e incluso advierten que podrían ser de abundancia en algunos puntos. Eso si, es una situación que durará dos días, tres a lo sumo.
Y es que a partir del martes se espera que los cielos se despejen de nuevo y que suban algo las temperaturas, aunque algo más normalizadas para esta época del año.
De todas maneras, para el martes todavía quedarán lluvias dispersas en el cuadrante noroeste. Se repite lo que llevamos viendo estas semanas, con una mitad de la penìnsula en que el agua sobrepasa la linea de los pantanos y los ríos se desbordan, mientras en el este sigue con un preocupante déficit hídrico.
Para el resto de la península, el buen tiempo será la tónica general al imponerse el anticiclón, con cielos poco nubosos o despejados a excepción del oeste de Asturias, noroeste de Castilla y León y sistema Central occidental, donde según la Aemet podría llegar otro frente de precipitaciones desde el oeste.
