La Federación Internacional de Esquí (FIS) ha decidido mantener la suspensión de los atletas rusos y bielorrusos de todas sus competiciones, como ha hecho desde el inicio de la invasión de Ucrania, tras la reunión de su Consejo celebrada el viernes en Sölden (Austria).
"El Consejo decidió, para mantener la integridad de las competiciones de la FIS y por la seguridad de todos los participantes, en línea con las recomendaciones del COI, mantener su política de no permitir que los equipos de Rusia y Bielorrusia participen en las competiciones de la FIS"
El francés Michel Vion, secretario general de la FIS insinuó hace unas semanas que probablemente se les dejaría competir pero a modo individual y bajo una bandera neutral. Pero el COI a instancias de federaciones como las de Noruega o Suecia, pidió que se les expulsara totalmente.
El tema ha sido controvertido estos dias, ya que algunos miembros y técnicos no quieren dejar fuer a muchos jóvenes que en algunos casos conocen personalmente. Pero las federaciones escandinavas son totalmente reacias a que puedan participar, especialmente en el esquí de fondo donde hay una gran rivalidad deportiva.
Un gran impacto en el esquí de fondo
Ya privados por la Unión Internacional de Biatlón (IBU), los rusos se quedarán así al margen de los demás deportes de nieve olímpicos bajo el paraguas de la FIS (esquí alpino, esquí nórdico, esquí de estilo libre y snowboard).
Mientras que la participación de los rusos tendrá poca repercusión en el esquí alpino, será un problema importante en el esquí de fondo, donde ganaron casi un tercio de las medallas en los últimos Juegos Olímpicos en competencia con la seleccíón noruega, precisamente la que más ha insistido en mantener esta suspensión.
"Volveré. Tenemos que volver", reaccionó inmediatamente en sus redes sociales la joven esquiadora de fondo rusa Veronika Stepanova (21 años), campeona olímpica con el relevo femenino en febrero en Pekín.