Aunque actualmente los viejos remontes son sustituidos por otros más modernos, rápidos y eficientes, hay casos de aparatos que no se desmontaron. Se dejaron ahí por un 'por si acaso'. Todos conocemos telesillas que hacen un viaje en paralelo a otro, aunque la mayoría opta por subirse lógicamente al más nuevo.
También hay casos de telesillas antiguos que se duplicaron para poder mover más esquiadores. En la época en que se montaron no existían los modernos y rápidos aparatos que tenemos hoy en día.
Cuando se ha dejado un telesilla 'por si acaso' se suele dejar parado para poner en marcha en días punta. Pero en algunos casos se ha mantenido dando vueltas junto al nuevo remonte. Decidir dejar solo uno de ellos a veces se presume una medida algo impopular y las estaciones de esquí no se deciden a hacerlo.
La actual crisis energética en que está sumida Europa y ante un invierno caliente en este asunto, los Gobiernos están pidiendo que las empresas tomen medidas para ahorrar consumo eléctrico. Y en Andorra también. El pequeño país de los Pirineos solo genera el 20% de su electricidad. El resto se importa especialmente de España pero también de Francia.
Las estaciones de esquí se sitúan en el punto de mira de este ahorro energético. Estos días los directores de montaña andan haciendo cálculos de aquí y de allá para ver de donde pueden ahorrar energía eléctrica sin que ello suponga reducir calidad al cliente.
Se supone que los esquiadores serán comprensivos ante una temporada en que se ha pedido a las estaciones de esquí que midan sus gastos energéticos. Pero igualmente todos estos complejos invernales buscan la fórmula para contentar a los Gobiernos pero también al cliente.
En Andorra para lograr este equilibrio se tomarán ciertas medidas. Y entre ellas está la de dejar parado alguno de esos remontes 'duplicados'. Una medida que se tenía que haber tomado antes y que estaba ya en la libreta de asuntos pendientes, pero que ahora se adelante definitivamente.
El director general adjunto de SETAP365, Josep Marticella, explicaba ayer a la Radio Televisión Andorrana que por ejemplo él tiene ya en mente un par de remontes que hacen un servicio similar. Así que de ahí pueden sacar algo de ahorro. No obstante asegura que los días con mucha afluencia se pondrán en marcha los dos, pero que en el resto uno de ellos puede quedar parado sin que nadie note una merma en la calidad.
En lo que parece que todo el mundo está de acuerdo es que no se va cerrar ninguna pista que tenga condiciones para poder abrirse. Se quiere poner en marcha el máximo de sectores de las estaciones de esquí y en todo caso dejar alguna pista para expertos sin pisar. Algo que probablemente muchos inclusi agradezcan.
Respecto a la nieve artificial, en Andorra hace años que se está modernizando el sistema de producción. Funciona mediante un programa informático capaz de detectar no solo el momento exacto de ponerse en marcha, sino cuando debe parar. Es más, estos sistemas tecnológicos (que también encontramos en la mayoría de estaciones de esquí del Pirineo) pueden decidir que uno o varios aparatos de una linea de cañones se queden parados si por lo que fuera en ese punto exacto no se dieran las condiciones para que la nieve producida sea de la calidad necesaria (puede que una canal atraviese esa zona variando la meteorología ahí).
Si la eficiencia energética de la nieve artificial llegó para quedarse, en el caso de los remontes todo indica que será igual. Será una buena temporada de pruebas para ver qué pasa cuando estos 'remontes duplicados' se quedan parados.
Muchas de estas medidas, como también el retoque de horarios en algunos remontes (abriendo o cerrando antes) se aplicarán ya para siempre a partir de esta temporada de invierno.
