Los altos precios de la electricidad y el riesgo de racionamiento de energía podrían causar problemas a varias estaciones de esquí pequeñas y medianas en Noruega, según publica el periódico Dagens Næringsliv.
Norwegian Alpine Resorts and Mountain Destinations (Visit Norway) envió una carta la semana pasada al Primer Ministro y a los titulares de las carteras de los ministerios de Finanzas y Cultura para perdir medidas de apoyo estatal. En el comunicado recordaban que uno de los costes más elevados de una estación de esquí es la electricidad, tanto para mover los remontes continuamente como para hacer funcionar los sistemas de nieve artificial.
Odd Stensrud, vicepresidente de Norwegian Alpine Resorts and Mountain Destinations y director gerente de Alpinco, empresa propietaria de las estaciones de esquí de Hafjell y Kvitfjell, expliaba en el Dagens Næringsliv que
“En nuestra región, con los precios esperados, estamos viendo un aumento de diez veces en los costos de electricidad, tal vez más, para el próximo invierno”
Para Alpinco, los costos de electricidad son el tercer elemento de gasto más grande y los márgenes operativos en las estaciones de esquí ya son bajos, según Stensrud.
Noruega es uno de los principales exportadores de electricidad de Europa y envía casi una quinta parte de su producción a los países vecinos, pero los bajos niveles de agua en el sur del pais obligan al gobierno a actuar ahora para evitar la escasez este invierno. Según el ministro de energía, el 13 de julio ya empezaron a evaluar continuamente más medidas para garantizar la seguridad del suministro para el invierno. También confirmó que se adelantará un mes, desde el 1 de septiembre, el programa para ayudar a los consumidores y agricultores a cubrir el elevado precio de la energía.
Noruega obtiene casi toda su electricidad de sus recursos hídricos. Pero esta primavera ha sido muy seca y los embalses están al 49,3%, en comparación con la media que es de 74,9% para el período que abarca desde el año 2000 al 2019.
Reino Unido es uno de los países más dependientes de la emergía de Noruega, y tras el bajón de la importación de petróleo ruso del que también era muy dependiente, ahora tendrá que volver a quemar carbón para pasar el invierno. Los noruegos emitirán una alerta de emergencia para poder dar prioridad a las necesidades del país y poder romper el contrato que les obliga a exportar electricidad a Europa. Aún así, empresas como las que gesitonan las estaciones de esquí siguen intranquilas por el precio que deberán pagar por toda esta crisis.