En todo el continente asiático, donde encontramos las montañas más altas de la Tierra, tan solo hay una opción para esquiar en verano: Gassan Ski. Está en Japón y pese a que no es un glaciar, su nieve se mantiene hasta bien entrado el verano.
Durante el invierno las nevadas son tan abundantes, que no se puede abrir sus instalaciones. Y de hacerlo, habría que estar limpiando constantemente sus pistas y lineas de remonte. Por eso se esperan a que llegue la primavera, cuando la meteorología por allí se calma, para ponerse en marcha. Este año lo hicieron con unos espectaculares 8 metros de espesor.
Un grosor que podría dar para todo el verano 'y más allá', como le pasa al glaciar de Folgefonn Summerski Centre en Noruega. Pero la diferencia es que en Japón las temperaturas en cuanto llega el verano empiezan a subir rápidamente, lo que hace que la nieve se funda a velocidad de crucero. Es verdad que el valle puede aprovechar el espectáculo que ofrece el agua formando cascadas para el turismo de verano, pero los esquiadores que aún quieran darle algunas semanas más a las tablas tienen que darse prisa para aprovechar.
Por fortuna los responsables de Gassan Ski ponen todo de su parte para que quién quiera aproveche hasta el último copo de nieve que quede. Y esto es tan literal, que cuando cerró el telesilla doble por falta de nieve en su terminal de salida, se mantuvo un telesquí y un telecuerda en sus cotas más altas.
¿Y cuando no hubo nieve en las lineas de estos dos pequeños remontes? Pues pusieron en marcha el telesilla para acercar a los muy fans del esquí hasta las zonas donde todavía quedaba nieve. Para llegar actualmente, una vez se baja del remonte, hay que cargar las tablas al hombro y caminar hasta la zona 'esquiable'. Una vez abajo, de nuevo hacer servir las dos patitas para alcanzar de nuevo la silla doble.
Una imagen vale más que mil palabras para describir la situación. Esta es la lengua de nieve que queda, y a la derecha la linea de esquiadores que están llegando andando.
Pero la fiesta llega a su fin. Como se puede ver la zona esquiable de Gassan no da para mucho más. Las temperaturas siguen subiendo, y aunque es totalmente imposible que el deshielo provoque una avalancha, el calor si que está haciendo volar la nieve a marchas forzadas.
De hecho si nos acercamos más a la pista, podremos ver que es menos blanca de lo que parece tal como vemos en este vídeo grabado esta semana por unos aguerridos esquiadores.
El pronóstico para esta próxima semana no solo es de que sigan subiendo las temperaturas, sino de que además caiga precipitación, lo que se traduce en lluvias y agua sobre esa nieve. Así que no se espera que se pueda esquiar más allá del fin de semana.
Por fortuna los fanáticos del esquí en Japón no tendrán que esperar mucho para volver a calzarse unas tablas bajo los pies. Y es que allí suele comenzar la temporada muy pronto. A finales del mes de octubre estaciones como Yeti Resort se ponen en marcha con una pista cañoneada a base de nieve artificial creada a base de una especie de hielo picado' que las máquinas se encargan de triturar y convertir en deslizable.
Y de esta manera no solo suelen ser los encargado de abrir la temporada de esquí en Japón, sino a veces en el hemisferio norte. Hablando siempre de estaciones sin pista en glaciar.
Mientras tanto, podemos disfruta de estas otras imágenes de Gassan Ski esta semana.
Un telecuerda portátil funcionó hasta hace unos días. Pero la nieve ya está bastante mal