Desoyendo a quién decía que no se podría esquiar en Navacerrada, la estación de esquí madrileña a caballo entre esta provincia y la de Segovia, ha ido manteniendo sus pistas abiertas esta temporada. Y de hecho, aún lo sigue haciendo, con previsión de que se pueda seguir esquiando en Semana Santa.
Es la estación predilecta para los madrileños que quieren recibir sus primeras clases de esquí al aire libre. Porque luego, una vez se acaba la campaña de turismo de invierno, podrán seguir haciéndolo bajo el techo de Madrid Snowzone, donde además escaparán durante unas horas del tórrido calor de la meseta estival.
Para esto aún queda, así que la estación de esquí de Navacerrada ha abierto hoy su pista verde de iniciación, las tres azules con las que dispone en su plano de pistas, e incluso para los que quieran algo más de adrenalina, una de las rojas.
10 centímetros en su cota más baja y otro medio metro de nieve en sus zonas altas, aseguran poder esquiar desde los 2.150 metros a los 1.950.
Ayer reabrió Valdesquí, que está sufriendo una de esas temporadas de 'mala pata'. A pocas horas del comienzo de la temporada y con un montón de nieve recién caída, un vendaval tiró las torretas eléctricas que alimentan los remontes. Así que se han pasado parte del invierno ' a verlas venir'. Luego la falta de precipitaciones, y hace unos días una segunda tanda de calima y polvo sahariano, volvió a poner a prueba la paciencia de los responsables de la estación madrileña.
Con todo, ayer viernes volvieron a reabrir tras dos días cerrada, y ahora muchos afortunados esquiadores están disfrutando este sábado de algo más de 15 kilómetros de pistas con espesores que van desde los 50 cm al metros de nieve de espesor, repartidos en 7 pistas verdes, 11 azules y dos rojas.
La previsión es de que las condiciones meteorológicas mantengan el termómetro con el mercurio bajo, así que se prevé un buen fin de semana de esquí.