Cuando la empresa Nozaleda traspasó los activos de Boí Taull, las instalaciones de remontes y pistas pasaron a la red de estaciones de la Generalitat, y la mitad de las plazas hoteleras del Resort a la agencia de viajes esquiades.com de Reus (Tarragona) a través de su filial de inversión, Gestboi S.L.U. Finalmente la zona de ocio se la quedó la empresa valenciana Gestión 2000. Pero 247 hectáreas de suelo rústico divididas en 368 fincas situadas entre el la zona hotelera y el complejo invernal, se mantuvo en manos de la inmobiliaria.
Ahora la constructora, que mantiene negocios en bodegas de vinos, además del Balneario de Panticosa, se está desprendiendo de algunos de sus activos, y entre ellos están estos terrenos de Boi Taüll. Cuando la empresa informó de su intención, la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiendo de la Vall de Boí se unieron para quedarse con los terrenos. Es la tercera vez que lo intentan, y se ha de hacer a través de una subasta. Todo parecía atado, pero alguien se ha enterado y ha decidido hacer una puja ligeramente mayor.
La intención era quedarse los terrenos por 315.000 euros. La Generalitat pagaría 215.000 a través de un crédito solicitado por Actius de Montanya, la filiall Govern que gesitona la estación de esquí. Los otros 100.000 los pagaría el consistorio de La Vall de Boí. Pues bien, alguien a pujado por 1.000 euros más.
No se sabe nada de la identidad del postor que ha puesto 316.000 euros por los terrenos. La subasta se hizo a través de la web del Colegio de Procuradores. La subasta sigue en curso, pero el ayuntamiento da por hecho que se trata de alguien que conocía de antemano su acuerdo.
La subasta que actualmente está en curso supone el tercer intento de adjudicar estas fincas, en el marco del proceso de liquidación de la filial del grupo Nozar. Una primera puja quedó desierta en el año 2019 al no haber ninguna oferta, mientras que este mismo año se llevó a cabo una segunda puja que quedó suspendida cuando faltaban pocos días para concluirla. En este caso, la Generalitat objetó que la lista de parcelas incluía algunas que no eran propiedad de la empresa en liquidación, algo que llevó al administrador concursal a paralizar la subasta. La que se ha convocado ahora no incluye los terrenos que motivaron la impugnación del Govern.
La subasta de los terrenos donde rebaños han pastado de forma gratuita durante décadas preocupa tanto a los ganaderos como al ayuntamiento de La Vall de Boí. Temen que este aprovechamiento sin coste para los propietarios de ganado termine si el suelo cambia de manos. El consistorio ha reivindicado ante el juzgado de lo mercantil la existencia de un derecho histórico de uso de estas fincas, mientras que la Generalitat, a través de la empresa pública Actius de Muntanya, exige que se le reconozca el derecho de paso por los terrenos de la línea eléctrica que suministra a Boí Taüll. Ninguna de estas dos peticiones ha sido atendida por el tribunalhasta la fecha.