El Departamento de Protección Civil del Gobierno de Andorra ha activado este jueves una alerta por riesgo de aludes, después de que el Servicio Meteorológico haya anunciado que en el transcurso de la noche se alcanzaría el grado de peligro 5 (muy fuerte) en la mayor parte del país.
Además, también se ha activado una prealerta por el aviso naranja por lluvias, que en el norte de Andorra pueden dejar entre 40 y 60 mm a lo largo del episodio, y se ha emitido igualmente un aviso amarillo por nieve, con la cota en torno a los 1.800 metros este viernes por la mañana. Finalmente, en el centro y sur de Andorra, se espera también fuertes rachas de viento.
Ayer jueves por la tarde la cota de nieve volvió a bajar mucho, llegando a casi todo el Pirineo, alcanzando algunas capitales de comarca como la Seu d'Urgell o Puigcerdà
En cuanto al riesgo de aludes, se recomienda no realizar actividades en la montaña y utilizar tan sólo los recorridos seguros de las estaciones que estén abiertos. Desde el Departamento de Conservación y Explotación de Carreteras (COEX) se están realizando avalanchas controladas en las zonas de riesgo. También se han cerrado preventivamente los accesos a Arcalís, Sorteny, la Coma de Ransol y Montaup y se hará una vigilancia constante durante las próximas horas. También se ha recomendado a la población que anticipe los desplazamientos, que se asegure de llevar los equipamientos obligatorios, que haga uso del transporte público y que evite el uso del vehículo tanto como sea posible.
Además, la estación de Vallnord - Pal Arinsal comunicó ayer que este viernes permanecerá cerrada por el elevado peligro de aludes, aunque en su página web anuncian hoy que lo tienen casi todo abierto. Ayer Grandvalira cerró también una parte de sus pistas por el mismo motivo. Hoy ya se ha reducido a tan solo 45 kilómetros, con espesores que alcanzan casi el metro y medio de nieve.
Por su parte, el Instituto Cartográfico y Geológico de Cataluña ha advertido que también hay riesgo de aludes muy fuerte (nivel entre 4 y 5) en la Val d'Aran y al norte del Pallars Sobirà (Franja Nord Pallaresa). En el Alt Urgell y Cerdanya, el peligro llega igualmente a nivel 4 en algunos puntos de la vertiente Perafita-Puigpedrós, junto a la frontera con Andorra. En cuanto al Cadí, el peligro es más moderado, de nivel 3, el mismo que existe en buena parte del Pallars, la Alta Ribagorça y el Ripollès (Ter-Freser). En el Berguedà (Prepirineo), el riesgo es ya bajo, de nivel 2.
