Las imágenes del pasado fin de semana en la que se pudieron ver algunos aparcamientos llenos como el que el Diari d'Andorra muestra de El Tarter, así como colas en el telesilla de ese mismo sector de Grandvalira tienen varias razones, entre la que no está la de que hayan llegado esquiadores de fuera de Andorra.
Así lo ha asegurado el Presidente de Ski Andorra Francesc Camp en una rueda de prensa ofrecida ayer por la tarde. Allí explicó que las colas que se vieron en el telesilla fueron por un problema puntual de ese remonte. Que ese día había unos 5.000 residentes de Andorra esquiando, y que por la avería se concentraron todos en ese lugar en momentos muy puntuales.
¿Y los aparcamientos llenos? Pues bien, eso se debió a gente que dejó allí su coche para iniciar actividades no ligadas al esquí de pista, como puede ser el de montaña, senderismo o ir a tomar algo a los restaurantes del dominio esquiable.
Pese a que hay menos kilómetros esquiables abiertos, la media es de unos 5.000 esquiadores duarios los fines de semana. El ratio de distribución de clientes entre pistas sigue siendo brutal. Tampoco hay ningún problema de aglomeraciones que pueda incrementar el riesgo de contagios"