Para ese fin de semana, conocido como el de Hahnenkamm, se venden entradas para asistir en directo. Pero también hay palcos VIP para quien los quiera alquilar. Una ingente cantidad de ingresos para los organizadores que permite a los organizadores, invertir millonarias sumas de dinero en las instalaciones específicas de la carrera. Una anulación, como ha ocurrido alguna vez, es un desastre.
Pero tener que organizarlo todo sin apenas obtener ingresos, puede ser más desastroso todavía. Una situación a la que se tendrán que enfrentar este próximo mes de enero después de que la FIS haya decidido organizar las carreras a puerta cerrada. Es decir, solo técnicos, personal esencial y las cámaras de televisión, podrán ser testigos presenciales de lo que allí ocurra.
En 81 años de historia del Descenso de Kitzbühel nunca se había tenido que organizar la carrera sin público. Adiós a cerca de 100.000 espectadores que pasaban a lo largo de los tres días de competiciones.
No obstante los organizadores ya han anunciado que el presupuesto se va a reducir a una tercera parte. Para esto no hay seguro que cubra las pérdidas. Sí tienen uno por si una posible falta de nieve o una situación meteorológica como una densa niebla obligase a cancelar la etapa.
La etapa de Kitzbühel está programada del 19 al 24 de enero de 2021 con tres días de entrenamiento en Descenso, luego el super-G el viernes y finalmente el sábado el Descenso.El Slálom que tradicionalmente se disputa en domingo, se organizará en su vecina estación de Kirchberg.
