Y es que si algo les encanta a los italianos es correr, y por eso el Descenso es la disciplina favorita por aquellas latitudes, así que tener a uno de los suyos en lo alto de la clasificación General después de ganar dos Descensos consecutivos, y en casa ante los suyos, ha puesto a muchos de ellos 'excitantes de amor'.
"Maestro de Stelvio". "Emperador de Bormio". "Rey de Valtellina". Son algunos de los apelativos que se pueden leer en la prensa italiana. El corredor de 30 años se elevó a la categoría de mito después de ganar dos veces sobre la que es ya su pista, su segundo hogar. Y es que en Bormio se ha impuesto ya seis veces: cinco Descensos y un super-G.
Dominik Paris se ha convertido en el tercer italiano con más victorias en la Copa del Mundo después de imponerse en 18 ocasiones, solo superado por Gustav Thoeni quien tiene 24 y los apabullantes 50 triunfos de Alberto Tomba. Hacía 25 años que un italiano no se colocaba como líder de la clasificación del 'circo blanco', si excluimos las 4 semanas que Peter Fill logró colarse tan alto durante la temporada 2006-2007.
De todas maneras en un calendario de Copa del Mundo FIS en que las disciplinas técnicas dominan sobre las de velocidad, Dominik Paris no lo tendrá fácil para quedarse ahí arriba y repetir la hazaña de Alberto Tomba, cuando en 1995 se llevó el Gran Globo de Cristal.
De momento los 'tifosi' siguen soñando y la audiencia de las carreras del 'circo blanco' donde participa han subido notablemente. Su próxima gran cita serán los Descensos de Wengen y Kitzbüehel, estadios nacionales suizos y austriacos, cuyas selecciones están viviendo una de las mayores presiones en muchos años, con un combinado noruego copando podios y unos italianos reclamando su sitio. Claro está, si no gana de nuevo la Combinada de hoy domingo...