A sus 34 años, Vonn se va con un currículum espectacular en el que se incluye las cuatro veces que se ha llevado la general de la Copa del Mundo de esquí alpino, sus 82 victorias en este circuito, además de un oro y dos bronces olímpicos, así como dos veces campeona del mundo,
Competiré en el descenso y el supergigante de los Mundiales de la próxima semana en Are y ésas serán las dos últimas pruebas de mi carrera"
En su escrito, la estrella estadounidense explica de forma clara su más que extensa lista de lesiones, antes de admitir, destacanado algunas palabras en mayúsculas que
En este punto, la artritis es la menor de mis preocupaciones y espero poder seguir esquiando con mis hijos algún día. Porque, aún sabiendo lo que le queda por delante a mi organismo, ha merecido la pena. Siempre trabajé duro, contraataqué y he asumido todo lo que me ha sucedido, porque simplemente me encanta esquiar.
Sinceramente, la retirada no es lo que me molesta. Retirarme sin haber alcanzado mi objetivo es lo que se quedará conmigo para siempre. No obstante, puedo mirar atrás a 82 triunfos en la Copa del Mundo, 20 títulos en esa competición, tres medallas olímpicas, siete medallas en Mundiales; y puedo decir que he logrado algo que ninguna otra mujer en la HISTORIA ha hecho nunca. Y eso es algo de lo que estaré orgulloso PARA SIEMPRE.
Así que por favor, permitid que mi historia sea la de los regresos, victorias y hasta lesiones; pero no me contéis mi historia como una de fracasos y metas inalcanzadas..
Gracias por estos apasionante años, por apoyarme en lo bueno y en lo malo; y por haber hecho mi trabajo tan divertido. Me muero de ganas de veros a alguno de vosotros en la meta de Are, donde echaré el resto por última vez.
Amor eterno"