Andorra busca dejar de ser el único país del mundo sin una infraestructura aeronáutica nacional. En otros pequeños estados europeos como Liechtenstein, Mónaco o San Marino, tienen algún helipuerto dentro de su territorio, o incluso un aeródromo en el último de estos tres casos. No obstante todos ellos disponen de un aeropuerto internacional a menos de 20 kilómetros de distancia.
No es el caso de Andorra, donde si sus habitantes quieren salir volando a algún destino internacional, tienen que hacerse 200 kilómetros hasta Barcelona o parecida distancia hasta el de Tolouse. El problema está tambien en el caso inverso, es decir, que para llegar al pequeño país de los Pirineos, los turistas tienen que hacerse antes un par de horas de carretera.
Con la inauguración del renovado Aeroport de La Seu d'Urgell, se esperaba que Andorra tuviese por fin su aeropuerto, pero la realidad es que el tamaño de la pista no permite el aterrizaje de grandes aviones, y tampoco es fácil ampliarla. Además, retrasos en instalaciones básicas como un GPS, obliga a que los pocos que se han aventurado a montar alguna ruta aérea, se encuentren con que las naves son desviadas a Lleida-Alguaire o incluso al aeropuerto de Reus en cuanto las condiciones meteorológicas varían un poco.
Los diferentes Caps de Govern de Andorra (Jefes de estado) han buscado en los últimos 17 años un lugar donde emplazar un aeropuerto con capacidad para grandes aeronaves. La primera vez que se intentó fue en 2001, cuando se encargó un estudio para construir uno cerca de La Rabassa pero parte de la pista tenía que construirse en territorio español lo cual complicaba sobremanera los trámites. Desde entonces nadie ha logrado encontrar el emplazamiento idóneo.
Ahora en un enésimo intento, se ha encargado a Navblue un estudio para tratar de construir un aeropuerto dentro del territorio de Andorra. Esta compañía tiene su sede en Tolouse, ya que pertenece al gigante europeo Airbus, donde tiene en la ciudad francesa sus principales plantas de producción y diseño.
Para el estudio se ha destinado 100.000 euros, aportados por la Cámara de Comercio de Andorra, y se ha emplazado a la empresa a que haga el estudio en unos terrenos situados a casi 2.000 metros de altura entre Soldeu y las pistas de esquí de Grau Roig, donde hay una gran recta en la que parece factible que aterricen A319 (modelo acortado del A320, con una capacidad de 124 a 156 pasajeros pero también con un alcance de 7.200 km., como su hermano mayor), A320NEO y A321NEO-LR.
El objetivo es lograr construir una pista de unos 2 kilómetros de longitud, con el objetivo de poder operar no solo rutas continentales, sino también transoceánicas, además de poder trasladar más rápidamente a los turistas que en invierno llegan en vuelos charter.
De hacerse realidad este Aeropuerto de Andorra, el de la Seu d'Urgell quedaría como 'complementario' según han indicado desde el ejecutivo andorrano. El alcalde de la pequeña población leridana ha respondido no obstante que todo este proyecto es "ciencia ficción" y no cree que lo vayamos a ver nunca.
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