Según la investigación policial, dos alpinistas habían comenzado el ascenso del Lagginhorn (4.010m), un cuatromil rocoso de cierta dificultad, pero decidieron dar media vuelta a la altura del Lagginjoch (paso situado a 3.499 m), debido a las malas condiciones meteorológicas. Durante el descenso, vieron "una mano y dos zapatos", que surgían del hielo, tal y como reza el informe. La proximidad de la estación superior del telecabina de Hohsaas, desde donde parten las vías normales del Lagginhorn y el Weissmies (4.017m), facilitó la localización por parte de las autoridades, pero debido al mal tiempo el cadáver no se pudo recuperar y trasladar el 25 de julio.

El día 26, un equipo de rescate recuperó los restos que estaban parcialmente atrapados en el hielo, trasladando el cadáver en un helicóptero de Air-Zermatt hasta Berna, donde la víctima fue identificada. El cuerpo corresponde a un alpinista alemán nacido en 1943, que desapareció el 11 de agosto de 1987 a la edad de 55 años. Se desconoce si el fatal accidente le sobrevino durante la ascensión o el descenso.
Según han declarado las autoridades y varios testigos en Hohsaas, este verano está resultando especialmente caluroso, facilitando el deshielo de las partes mas bajas en la mayoría de glaciares suizos; por tal motivo, no es de extrañar que este año sean varios los cuerpos recuperados por el hielo. A mediados del pasado mes de julio, una pareja que llevaba 75 años desaparecida en el macizo de Les Diablerets, también en Suiza, fue hallada momificada en el glaciar de Tsanfleuron, a 2.615 metros de altitud. Desde un principio, la vestimenta de los cuerpos encontrados indicó que estos habían permanecido en el glaciar Tsanfleuron entre 70 y 80 años, dado que llevaban ropas de la época de la Segunda Guerra Mundial.
307 personas siguen desaparecidas solo en el Cantón del Valais, según una lista que se confecciona desde 1926.
