Grandvalira se plantea seguir el modelo de Espace Killy para su forfait
Con todo, las mismas fuentes han asegurado que el funcionamiento del dominio se mantendrá sin cambios, por lo que se seguirá vendiendo el forfait de Grandvalira aunque, evidentemente, las dos marcas (Pas de la Casa-Grau Roig y Soldeu El Tarter) querrán ir ganando protagonismo. Fuentes próximas a la dirección de NEVASA han asegurado que la plantilla fija de la sociedad se mantiene, y que se ajustarán un poco las contrataciones de cara a la temporada de invierno. En cuanto a la aprobación de los precios para los mayoristas, las tarifas se han mantenido en la línea de los otros años, y el acuerdo permitirá que a partir de ahora se puedan comercializar con normalidad los productos y los paquetes.
Este presupuesto para la temporada, que se queda en unos 4 millones de euros, es el primero desde que se acordó el inicio del proceso de disolución de la sociedad, que culminará en mayo del 2019. Las cuentas aprobadas van en la línea de la propuesta hecha por el triunvirato que desde principios de julio gestiona el día a día de NEVASA, formado por su director general, Alfonso Torreño, Carl de Smedt por parte de Saetde y David Hidalgo por parte de Ensisa.
Así, se trata de un presupuesto un 20% inferior al de la temporada pasada, "suficiente para alcanzar las cifras de mercado que se han fijado como objetivo pero que optimiza el gasto de marca", según indicaron fuentes cercanas a la dirección de NEVASA, ya que aseguran que no tiene sentido continuar invirtiendo en la promoción de la marca conjunta cuando su futuro es incierto.
Las partidas que Saetde y Ensisa dejan de poner en el presupuesto conjunto, que no llegan a medio millón de euros cada una, servirán para potenciar sus respectivas marcas, Pas de la Casa-Grau Roig y Soldeu El Tarter. Pero, tal y como marcan los estatutos, el forfait de Grandvalira debe seguir comercializándolo Nevasa, por lo que el objetivo fijado es que, al menos durante la próxima temporada de invierno, se continúe funcionando sin cambios, con una central de reservas única y evitando en todo momento que el cliente salga perjudicado, con el objetivo de volver a hacer una buena temporada de esquí.
Así pues, las marcas de las sociedades madre irán "ganando protagonismo", pero el proceso se quiere hacer "de una manera ordenada". Las fuentes consultadas también han reconocido que, por tanto, es normal que tanto Saetde como Ensisa quieran vender sus servicios por separado, siempre que no comercialicen forfaits.
Aunque aún no se ha acordado qué futuro le espera a la marca, uno de los escenarios "razonables" que se plantean es el modelo que tuvo el primer año de Grandvalira, similar al que tienen ahora las estaciones francesas de Tignes y Val d'Isère, con dos marcas fuertes que también comercializan un dominio conjunto, Space Killy.