Esta intervención forma parte de las diferentes actuaciones previstas para mejorar la circulación y la seguridad en el Port de la Bonaigua, donde la Generalitat anunció el pasado mes de enero que invertiría un total de 9,5 millones de euros en actuaciones comprendidas entre el 2016 y 2019. Algunos tramos de carreteras del Pallars Sobirà y la Val d'Aran se ven afectados periódicamente por avalanchas de nieve procedentes de las montañas adyacentes, que afectan al tráfico.
En el caso de la C-28, estas avalanchas menudo conllevan el cierre del Port de la Bonaigua. Las obras que ahora se impulsan pretenden mejorar la accesibilidad al sector de la Peulla y el Cap del Port. El proyecto actuará en la zona del Cap de Comial, que incide sobre un tramo de la carretera C-28 donde se sitúa la variante de los Abets, en el término municipal de Alt Àneu. Se colocarán hasta cinco zonas de antialudes, con barreras de cuatro metros de altura.
Criterios en la disposición de las barreras
Se formarán varias hileras lineales separadas unos 20 metros entre sí, siguiendo la línea de la pendiente. La disposición al terreno tendrá en consideración factores como la línea de desencadenamiento de aludes, la dirección de la presión de la nieve, la extensión lateral de las barreras y si esta disposición es continua o fragmentada. Los paneles de las barreras serán transportados en helicóptero a su posición en la ladera. Las obras se adjudicarán antes de final de año y se iniciarán cuando las condiciones meteorológicas son más favorables, es decir, a partir de la próxima primavera. Los trabajos tendrán un plazo de ejecución de ocho meses y deberían estar listos para la temporada de invierno 2017 a 2.018.
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