"El plan director urbanístico de La Molina-Masella debe ser la oportunidad para que el Berguedà desencalle Coll de Pal".
Así lo ha explicado a
Regió7 David Font, presidente del Consell Comarcal del Berguedà, que cree que el proceso de
ordenación urbanística que promueve la Generalitat debe permitir que la comarca saque del callejón sin salida esta estación y consiga que se acaben las obras pendientes de realización.
Desde 2011 están paradas las obras del
telesilla que debía conectarla a La Molina. Se trata de una actuación presupuestada en 2,3 millones de euros que la Generalitat
dejó a medias después de haber invertido la mitad del presupuesto
"debido al mal momento económico". Enric Ticó, presidente de Ferrocarrils de la Generalitat, dijo en su día que no hay fecha para retomar estos trabajos. Por otra parte, también falta completar el
edificio de servicios. En 2011 se terminaron las obras de la primera fase de la construcción de este inmueble donde el Ayuntamiento ya ha invertido 700.000 euros, aproximadamente la mitad del costo. El alcalde de Bagà, Nicolás Viso, reclamó entonces ayuda del Govern para poder terminar una infraestructura como ésta.
Ahora, el dirigente comarcal ha expuesto que la Generalitat
"tiene la voluntad de afectar una serie de terrenos de municipios de l'Alt Berguedà, básicamente del término de Bagà y pequeñas puntas de Castellar de n'Hug y de Guardiola. He hablado con los alcaldes de municipios afectados y hay entendimiento para defender el papel que debe tener la comarca para conseguir que
Coll de Pal realmente forme parte del dominio esquiable de Alp2500. Tenemos que intentar conseguir que en este plan urbanístico se contemple todo lo imprescindible para que el Berguedà sea la puerta real de entrada de un dominio esquiable muy grande como es el de la Molina-Masella".
David Font especifica que puerta de entrada significa que
"la gente pueda llegar a Coll de Pal, pueda esquiar allí y aparcar allí". El presidente del Consell defiende que en la comarca
"podamos hacer un poquito de contención de la gente que quiere esquiar en la Cerdanya para que se queden alojados en el Berguedà. Esto, en la práctica, significaría retener una parte del turismo de fin de semana con la facilitación de la portada de entrada a este gran dominio esquiable".
Para hacerlo posible, sería necesario que se terminaran las inversiones pendientes: telesilla, edificio de servicios y conseguir que la
carretera esté abierta siempre y no haya cortes. También habría que habilitar un
aparcamiento en la estación baganesa, que ahora mismo no existe.
La carretera BV-4024 de Bagà A la estación de Coll de Pal tiene una intensidad media diaria de 77 coches de lunes a viernes, cifra que
los sábados llega a los 229 y los domingos a 273. El coste de mantenimiento es de
339.000 euros anuales , que paga la Diputación de Barcelona, ??administración a quien pertenece la vía. Los inviernos que nieva mucho, esta carretera es una de las que salen habitualmente en la recopilación de incidencias del Servei Català de Trànsit (SCT) ya que no se puede circular porque se cierra por razones de seguridad. La apertura de la vía todo el año es una reivindicación histórica de los dirigentes del Ayuntamiento de Bagà que ahora han vuelto a plantear al ente provincial.
En declaraciones a
Regió7, el diputado de Infraestructuras Viarias y Movilidad, Jordi Fàbrega, de la Diputación de Barcelona, explicó que los problemas se concentran
en los últimos 4 kilómetros (del punto kilométrico 17 al 21) de una carretera situada a 2.000 metros de altura con todos los riesgos que se derivan.
"De una media de 22 fines de semana esquiables, en los últimos tres años, esta carretera lo hemos tenido que cortar una media de cuatro veces. A veces han sido cinco y otros dos o tres veces ".
La estación de Coll de Pal en el mapa de pistas de Alp 2500
Estado actual del edificio de servicios de Coll de Pal, a medio terminar.